13 supersticiones + 1 ñapa
1. No remueva la taza de otra persona o provocará disputas.
En Venezuela esta superstición ya no existe porque no habiendo tampoco azúcar en los mercados, no hay nada que revolver en la taza de otra persona. Algo bueno tenía que traer esta escasez.
2. Si al contemplar un narciso, este se inclina hacia usted, mal augurio.
Ahora, si el narciso lo que hace es despotricar de usted, insultarle en público y llamarle plasta o miasma, por el contrario, lo que le sobreviene es una suerte extraordinaria.
3. Un zapato sobre la mesa: Discusión seria en casa.
Es una superstición imbécil. Por supuesto que un zapato sobre la mesa tiene que traer una discusión seria en la casa con el abusador que deja sus zapatos regados por ahí. Ahora, si en vez de un zapato es un Zapata y sobre la mesa de Esteban de Jesús, la cosa cambia: Insulto seguro.
4. Huevo roto: pierna rota. Huevo pasado por agua que se abre por el extremo pequeño: mal augurio.
Definitivamente el huevo está asociado a la mala suerte. En medio de la coyuntura que vive el país, el único que le ha sacado provecho al huevo ha sido Claudio Nazoa… ¡Y no saben cómo!
5. El pan quemado alimenta al diablo.
Si es pan quemado con mantequilla, alimenta a la diablilla.
6. Un cuchillo que señala hacia usted: señal de que va a morir.
Si el cuchillo está en manos de un malandro, que no le quepa la menor duda.
7. La leche derramada es una de las peores cosas que pueden suceder.
Es lógico, si luego de una cola de tres horas para obtener solo un par de litros -en la que le meten el dedo en tinta indeleble del CNE- a usted se le derrama el producto de todas esas angustias, no queda más opción que el suicidio (que, por cierto, también trae muy mala suerte para que lo comete: todos los suicidas terminan muertos). ¡Qué mala leche!
8. Levantarse con el pie izquierdo trae una mala suerte horrorosa.
Pero nada peor que levantarse con un gobierno derecho (que se las da de izquierdo)
9. Romper un espejo trae siete años de mala suerte.
No sé si recuerdan que en febrero del 1992 alguien quebró los espejos ubicados en el “Salón de los espejos” del Palacio de Miraflores. Si al romper solo uno son siete años, imagínense la mala suerte de un espejo roto que se refleja en otro. O sea, que hasta demasiado bien nos ha ido.
10. Derramar la sal empava.
Y ni se diga si la sal se derrama un martes 13, debajo de una escalera mientras pasa un gato negro. Esto hace que el diablo esté al acecho. La contra es: agarrar una pizca del la sal derramada y lanzarla hacia atrás con fuerza (de derecha a izquierda y por encima del hombro), para que le caiga en los ojos al diablo, que está siempre detrás de uno vigilando cualquier descuido.
11. Abrir un paraguas dentro de la casa.
Trae muy mala suerte, pero peor es la suerte del que le agarra el palo de agua sin paraguas.
12. Un gato negro siempre trae pava.
Salvo que usted sea miembro del Press Club, que mantiene un riguroso código secreto conocido como “gato negro” y que, naturalmente, no puedo revelar aquí a riesgo de empavarme yo para siempre.
13. Ser Rico es Malo
Entre todas las supersticiones hay una que ha cobrado mucha fuerza últimamente. Si usted es multimillonario y visita al que te conté, en menos de un mes se le quemará una casa valorada en cinco millones de dólares, porque en Venezuela, ser rico es malo.
14. No ir a este 6 y 7 de Noviembre a ¿Por qué somo cómo somos? da mala suerte (ñapa)
No le podemos asegurar que no le dará mala suerte si va presentación de Laureano, ni tampoco podemos decirle que su suegra no visitará su casa este fin de semana… Lo que si le podemos garantizar es que va a gozar. Vaya, diviértase y cambie la mala suerte por un buen rato.