Tradición - Runrun
Orlando Viera-Blanco Dic 03, 2019 | Actualizado hace 2 semanas
«La cultura popular -en pleno auge de identidades y tendencias- da entrada la modernidad de la postguerra, donde cada quien tiene su propia interpretación de la vida».

Uno de los valores superiores del hombre es su dignidad, que es orgullo, nobleza, gallardía, carácter, talante, integridad. ¿Pero qué alimenta tal virtud que a su vez es un sentimiento? ¿Qué elementos componen la validación de la consciencia de lo bueno y conveniente sobre lo malo, capaz de soportar cualquier tempestad e impulsar cualquier amanecer? Las experiencias espléndidas del ser humano nos convierten en una acumulación de vivencias que nos permiten “ahorrar” bondades y atesorar dignidad. Dignidad que se nutre de un universo maravilloso, de un cosmos ingrávido que hace la diferencia entre estar o caer: ¡tradición!

Violinista en el tejado

Este musical estrenado en Broadway en 1964-basado en el libro del escritor ruso Sholem Aleijem, con arreglos musicales de Jerry Bock, Sheldon Harnick y producción de Joseph Stein-se abre paso en la variopinta NY, entre la multiculturalidad representada en blancos, negros, latinos, asiáticos, feministas, homosexuales, liberarles, conservadores, musulmanes o judíos, urbe propia para asimilar las temperancias” de la ¡tradición!.

La cultura popular-en pleno auge de identidades y tendencias-da entrada a la modernidad de la post guerra, donde cada quien tiene su propia interpretación de la vida. Pero en ese andar, en esa búsqueda de la verdad, siempre subyace la necesidad del ser humano de mantener inalterable un valor que lo dignifique, que lo motive, que lo distinga.

¿Cómo y dónde encontrar ese milagro afectivo y humano, esa bisagra histórica que represente una identidad indiscutible? ¿Cómo adoptar el uso, modo o compañía correcta? ¿Qué o quién es ese acompañante? !Tradición!

 

Sheldon Harnik y Jerry Bock-compositores de violinista en el tejado- adoptaron para su composición, leyendas de Judíos [antecesores] de lejanas tierras de la Rusia Zarista [1905], colmadas de fe, trabajo, familia, humor, tristezas, alegrías y despojos. Historias que le dieron contenido a “tú me amas” [do you love me], “si yo fuera rico” {If I were a rich man] o ¡Tradición!

Stein encontró un pequeño libro “Las Hijas de Tevye” [las hijas de Tobías], la magia que poco a poco fue construyendo el milagro de los milagros. !Tradición! Un musical que se convertiría en la representación de todas las identidades, donde un lechero, padre de cinco hijas en un poblado de judíos ortodoxos, ve como cada una de ellas se enamora del hombre que él no había elegido. Una batalla entre mis certezas y la felicidad de mis hijas. Y al final el perdón vence a los egos. ¡Es la fuerza de…Tradición!

El drama de Tobías [Tevye] da respuesta a todas las preguntas. Fue la conexión entre letras, líricas, historias y vidas. Conectividad entre el pasado y el presente, entre tradición y modernidad…representada en el amor de la familia, la pasión por la cultura, por una prosa sabia. “Si por esas razones me amas entonces yo también te amo…” Frase sutil de una canción, que nutre la lealtad en el hogar. !Tradición!

Entonces la vida es la acumulación de dichas y amarguras, emociones que consagran una “manera de vivir”, si acaso de resistir, por convertirse en huella perenne de nuestros hábitos, usos y rutinas. La modernidad amolda, flexibiliza, relaja algunas “maneras”. Pero otras permanecen inalterables. Libertad, honor, honestidad, amor, nobleza, que es !tradición!

Y eso representa “violinista en el tejado”. El hombre sobre un techo inclinado que debe mantener el equilibro entre su toque de violín y la gravedad. Balancear entre su melodía y su caída. Eso es la vida. Un eterno equilibro entre nuestras melodías-que son suaves creencias y carencias-y la realidad. !Tradición!

Venezuela es !Tradición!

La maldad siempre ha sido derrotada por la !Tradición! La esclavitud, la violencia, matrimonios pactados [matchmakers], las tiranías, los abusos de poder, han sido derrotadas por las buenas experiencias que son valores, principios arraigados. Tavye enfrentó varias guerras. La propia y la ajena. Batallas con Dios y con su imperativo moral. Sufrió. Pero al final se impuso la fuerza y la fe de un espíritu colectivo. ¿Virtudes? Perseverar, creer, confiar, resistir, amar, ayudar, perdonar…¡Tradición!

Tradición es suma de las buenas costumbres que hace de mi buena voluntad, la representación generosa de quien quiero ser. Así elijo con quien casarme, que quiero estudiar, como y donde vivir, y que sentido darle a mi vida. ¡Tradición!

 

Es la acumulación de amor, dedicación, entrega de cada una de nuestras madres por nosotros. Es el orgullo de hacer patria y nación por honrar el legado de nuestro mestizaje y nuestras gestas de libertad. Eso esta ahí, como lo está el carácter indómito y la irreverencia de un pueblo que no se deja despojar ¡Tradición!

Un bravo pueblo que ha resistido, se ha levantado y caminado cada vez que lo han humillado. Y un pueblo humillado nunca ha sido derrotado.

¿Por qué Violinista en el tejado tiene el record de haberse escenificado cada día en el mundo-al menos en un colegio-desde 1964 hasta hoy? Porque el balance entre tradición y libertad no cede ante la imposición. Y eso vive Venezuela. ..Un balance continuo entre nuestra dignidad y nuestra ansiedad de ser libres, una melodía indetenible, entre ser y no ser, donde las fuerzas más poderosas no pudieron con Tavye [Tobías]…!Tradición!

@ovierablanco