"Conversar con Maduro no significa legitimarlo" y otras perlas de Capriles - Runrun
«Conversar con Maduro no significa legitimarlo» y otras perlas de Capriles
Capriles consideró que pareciera que Maduro «también está barajando sus cartas bien»

Henrique Capriles, exgobernador de Miranda, consideró que conversar con Nicolás Maduro no significa legitimarlo, indicando que hacerlo puede representar una oportunidad para que la situación de Venezuela cambie.

En una entrevista que concedió a El País, Capriles se pronunció sobre las diferentes oportunidades que ve para lograr un cambio político para el país y habló sobre algunas actuaciones de Maduro y su gobierno.

A continuación las perlas más destacadas de Capriles en esta entrevista:

«Nosotros no nos quedamos en una retórica, en un discurso bonito que suena muy bien, pero que al final no se traduce en nada para la gente».

«Aquí lo que estamos buscando son soluciones y que el país empiece a recuperar su democracia, a recuperar su institucionalidad. El año pasado estuvimos cerca, pero aunque no se logró, no quiere decir que tiramos la toalla, seguimos buscando una solución política acordada».

«Lo que se logra con el nuevo Consejo Nacional Electoral [CNE], que yo diría que es el menos malo en 22 años porque en Venezuela toda la institucionalidad tiene una carga de desconfianza, es un paso de muchos otros que hay que dar».

«Los venezolanos en nuestro ADN tenemos el votar. Hay que ser protagonista de las decisiones».

«Se le ha engañado a la gente diciendo que si la gente come o si la gente tiene medicinas eso le da oxígeno a la dictadura. No, eso le da oxígeno al pueblo venezolano».

«Para mí la política es cómo mejoramos la vida de la gente. En la medida en que el tejido social se debilita, no se debilita Maduro, se debilita la gente. Maduro no se va a quedar sin gasolina, sin comida y sin medicina».

«Nadie quería confrontar la política de Trump. A mí como venezolano dentro de Venezuela, su gestión no significó nada, solo le funcionó a Trump para ganar políticamente en Florida».

«Yo creo que Maduro tiene gente alrededor que le demanda soluciones económicas y sociales. Por eso él hace gestos que pueden empezar a abrir las puertas de una discusión sobre un acuerdo, una solución política, que permita ir recuperando la democracia».

«Yo veo a una España comprometida en la solución de la crisis venezolana. Yo no debo ser mezquino en esto, ni estoy cuadrado políticamente con un partido u otro en España».

«Hay un problema de desconfianza generalizado. El tema político ha perdido mucho interés en Venezuela. Los liderazgos estamos completamente mermados».

«Yo no me he creído el CNE hasta que lo vi. En la medida que vayamos recuperando la institucionalidad, la gente va a empezar a creer otra vez. La gente ahora no cree ni en Maduro ni en nosotros».

«El nombramiento del CNE es un hecho que mueve el tablero. ¿Cuál es el siguiente paso? Vamos a construirlo, pero no podemos seguir con una retórica que pareciera como si estuviéramos en el año 2019. Ese plan se agotó».

«Se le engañó a la gente cuando se le dijo que todas las opciones estaban sobre la mesa. Aquí nunca estuvo planteada una solución de fuerza, pero se alimentó ante la frustración de la gente».

«Mi política fue la que venció para ganar la Asamblea Nacional en 2015, porque esa política que siempre ha estado rondando, fracasada, no fue la política para ganar la Asamblea».

«Conversar con Maduro no significa legitimar a Maduro. El adversario tiene poder y si yo no hablo con quien tiene el poder, ¿cómo cambio lo que quiero cambiar? Eso solamente es posible hablando, lo otro es a tiros. El que cree que es a tiros, que no me busque a mí».

«Es cierto que los procesos electorales se fueron descomponiendo, pero eso no significa que al autoritarismo lo vamos a vencer con otra posición autoritaria dentro de la oposición».

Puede leer la entrevista completa en El País