LA SELECCIÓN DE FÚTBOL VENEZOLANA ESPERA TENER UN PAPEL MÁS IMPORTANTE en este próximo torneo internacional celebrado el próximo verano en Brasil, en el cual quiere, como mínimo, igualar su sexto puesto en la última edición.

Venezuela apunta a la Copa de América del 2019, que se celebrará en Brasil, como su próximo gran objetivo. La Vinotinto quedó última clasificada en la fase de clasificación de Sudamérica para la Copa del Mundo de Rusia celebrada el pasado verano, y, por ello, está trabajando duro para que el papel del equipo sea mejor en el próximo campeonato internacional.

Esta supondrá la decimoctava participación de Venezuela en una Copa de América, todas ellas de manera consecutiva desde que en 1967 debutara en la competición. Precisamente ese año consiguió un meritorio quinto puesto, solo superado por el cuarto logrado en Argentina 2011. En su última intervención no pudo pasar de cuartos de final adquiriendo un sexto lugar muy meritorio también.

Estos son los mejores resultados de la Vinotinto en un campeonato en el que su resultado más repetido ha sido el décimo puesto, el cual ha alcanzado en seis ocasiones, todas ellas, además, de manera consecutiva.

Año de transición hasta la Copa de América

Es complicado cambiar todo de la noche a la mañana, pero su eliminación en la fase de clasificación para la Copa del Mundo de 2018, quedando décimos, hizo reflexionar al seleccionador. De ahí que Rafael Dudamel se haya tomado este año intermedio como uno de transición para tratar de subir a las nuevas generaciones, subcampeones del mundo de la categoría sub20’, a la absoluta, donde han de convivir con futbolistas mucho más veteranos y con mayor caché a nivel nacional e internacional.

Todas estas razones dan esperanza a la selección Venezuela de poder competir con los mejores y romper con algunos pronósticos que le colocan, quizás, demasiado abajo. Aunque, será complicado superar a equipos como Argentina o Brasil, que poseen un poderío de plantillas muy superiores, lo que les coloca como los favoritos según las apuestas de Betway para ganar la Copa de América, con unas respectivas cuotas de 3.50 y de 2.87, a día 29 de octubre del 2018. Pero la idea no es esa, sino la de continuar con el trabajo comenzado hace unos meses por Dudamel para ir integrando a esa generación de jóvenes tan destacada que podría dar un soplo de aire fresco a la selección absoluta, algo lógico viendo los últimos resultados obtenidos.

Desde su último partido de clasificación para Rusia, en el cual la Vinotinto venció a Paraguay por 0-1 demostrando que una nueva era comenzaba para ellos, Venezuela ha disputado cuatro encuentros amistosos en los que ha sacado dos victorias y dos derrotas. En todos dejó muy buenas sensaciones, incluso cuando perdió, ya que lo hizo por la mínima ante Irán y Colombia, dos conjuntos muy bien preparados que ya demostraron su fortaleza en Rusia el pasado verano.

El salto a la absoluta

Todo ello devuelve la ilusión a una hinchada que sabe que su selección suele sacar mejores resultados de los esperados en la Copa del América, un campeonato que precisamente cambia en esta edición de empresa. Anteriormente sus derechos pertenecían a MP&Silva, mientras que de ahora en adelante estos serán propiedad de Dentsu, sociedad japonesa que se encargará de vender los partidos de televisión referentes a esta competición.

El siguiente amistoso de los de Dudamel permitirá a la Vinotinto medir sus posibilidades de cara al campeonato del que formarán parte 12 selecciones en esta ocasión. Se enfrentará a Japón, una de las revelaciones de la pasada Copa del Mundo, uno de los dos equipos invitados por la CONMEBOL junto con Qatar para participar en Brasil. En este duelo se podrá comenzar a analizar a un combinado que ya cuenta con varios de los jóvenes en su plantilla instaurados como el futuro futbolístico del país. El seleccionador es optimista y en recientes declaraciones, que recogen medios como el diario AS, habló sobre las muchas posibilidades del plantel en el futuro inmediato.

De entre todos los que el seleccionador ha probado, podemos destacar a Wuilker Faríñez, Adalberto Peñaranda, Nahuel Ferraresi, Sergio Córdova o José Hernández, entre otros muchos. Y es que, si Dudamel logra combinar a algunos de estos descarados y talentosos jugadores con los Salomón Rondón y compañía, parece que la mezcla podría ser igual de explosiva a la vez que satisfactoria para una Vinotinto que apunta a Brasil como su próximo gran objetivo.