Hechos y citas de hoy en el beisbol
El 8 de agosto es un día especial, en realidad todos los días los son, porque todos los días se juega pelota.
Vamos a recordar qué pasó el 8 de agosto en la historia del beisbol:
En 1915, Gavvy Cravath bateó 4 dobles e impulsó 8 carreras para liderar el triunfo de los Atléticos de Filadelfia 14×7 sobre los Rojos.
En 1916, los Atléticos impusieron una marca de la Liga Americana y las Grandes Ligas de más derrotas en un período de 2 semanas, al perder 19 veces seguidas en la vía.
En 1920, Howard Ehmke lanzó el juego más rápido en la historia de las Grandes Ligas. Sólo duró 1 hora y 13 minutos, para que los Tigres derrotaran 1×0 a los Yankees.
En 1952, Pablo Morales y Oscar Prieto, le compraron la franquicia “Cervecería Caracas” a don Martín Tovar Lange y le cambiaron el nombre por “Leones del Caracas BBC”. Debutaron con el nuevo nombre en octubre en el recién inaugurado Estadio Universitario.
En 1954, los Dodgers anotaron 13 carreras en el octavo inning luego de 2 outs y derrotaron 20×7 a los Rojos.
En 1982, Doug Decinces bateó 3 jonrones por segunda vez en una semana y los Angelinos de Los Ángeles derrotaron 9×5 a los Marineros de Seattle.
En 1997, Randy Johnson impuso un récord en las Grandes Ligas al ponchar 19 bateadores por segunda vez en la misma temporada.
En 1998, Paul Molitor se fue de 5-5 y robó una base para convertirse en el 5to jugador con 3 mil hits y 500 bases robadas.
Y vamos con 3 citas para terminar estas líneas…
“No voy a comprarles una enciclopedia a mis hijos. Dejaré que caminen a la escuela como lo hice yo”. Yogi Berra
“”Todo gran bateador trabaja en el entendido de que el pitcher le tiene más miedo a él, que el que él le tiene al pitcher”. Ty Cobb”
Y esta, de monólogo inicial de Bull Durham:
“Creo en la iglesia del beisbol. He tratado con todas las religiones grandes y la mayoría de las pequeñas. He venerado a Buda, Alá, Brahma, Vishnu, Shiva, árboles, hongos, incluso a Isadora Duncan.
Sé un par de cosas. Por ejemplo, hay 108 cuentas en un rosario católico y hay 108 costuras en una pelota de beisbol. Cuando supe eso, le di una oportunidad a Jesucristo. Pero no funcionaron las cosas entre nosotros. El Señor ponía demasiada culpa sobre mí.
Prefiero la metafísica por encima de la teología.
Verás, no hay culpa en el beisbol y nunca es aburrido, lo que lo hace tan bueno como el sexo. Tener sexo se parece a batear una pelota, sólo tienes que relajarte y concentrarte.
He tratado con todas las religiones, lo he hecho. Y la única iglesia que verdaderamente me alimenta el alma todos los días, es la iglesia del beisbol.”