√ La desatención del Estado en las minas del sur del estado Bolívar cobró el viernes pasado cuatro víctimas fatales. Ante el pánico de los uniformados de la Guardia Nacional Bolivariana y de la Policía del estado Bolívar de velar por la seguridad en los yacimientos, a las bandas armadas les queda menos complicado disputarse el control de las canteras.

√ Familiares de uno de los mineros baleados el Viernes Santo aseguran que la GNB se desentendió cuando fueron a reclamar el cadáver; “Yo, en lo personal no metería dos policías dentro de una mina con unos familiares, porque es riesgoso para ambas partes”, sostuvo el director de la PEB, general Juvenal Villegas. 

No es la primera vez que se escucha sobre la violencia en las minas ubicadas al sur del estado Bolívar, pero pocos son los que se atreven a adentrarse en esa zona y a hablar sobre lo que ahí sucede.

Una llamada a los familiares de Juan José Carvajal Díaz, de 22 años, los alertó el sábado en la tarde. “Nos llamó gente que estaba allá adentro. Yo estaba en mi trabajo cuando me dieron la noticia de que a mi sobrino lo habían matado el viernes”.

En la mina La Catatumba, ubicada en El Manteco, municipio Piar, se registró un enfrentamiento entre dos bandas, la de ‘el Pollo’ y la de ‘el Guachos’, que operan en la zona y que están relacionadas con la minería. El choque armado dejó cuatro mineros muertos que, al parecer, quedaron en la línea de fuego.

La travesía de los dolientes hasta el sitio no fue nada fácil. “En cuanto recibimos la llamada nos trasladamos hasta El Manteco. Esa noche no pudimos hacer nada… la mañana del domingo nos activamos enseguida y nos trasladamos hasta donde queda la mina”, narraron familiares de las víctimas fatales.

“La Guardia Nacional Bolivariana (GNB) no se quiso meter con nosotros; más bien nos dijeron: ‘Vayan y saquen su familiares, porque nosotros no podemos entrar’”, relató con impotencia una tía de Juan José.

Mina adentro…

Explica la tía de esta víctima, que llegaron al sitio tras varias horas de travesía en curiara y caminando. Junto al cuerpo de su sobrino estaba el de Jean Carlos Silva Cruz, de 25 años y el de otros dos hombres: “Yo te puedo asegurar que solo vi cuatro, dos nos los trajimos, pero los otros dos allá se van a quedar”.

La tía de Juan José describió que el cuerpo de su pariente y el de Jean Carlos estaban totalmente descompuestos, al igual que los otros dos. “Esos quedaron ahí… agarrando sol”, comentó.

“Los envolvimos en sábanas y los cargamos con ayuda de algunos trabajadores de la mina y la gente de las curiaras, salimos de ahí como a las 2:30 de la tarde”, continuó la pariente de Juan José; aseguró que la GNB solo los custodiaron mientras esperaron que llegaran los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para practicar el levantamiento de los cuerpos.

Poco tiempo

Los allegados a Juan José indicaron que el joven tenía aproximadamente dos meses en la zona minera; se desempeñaba como caletero, “él se la pasaba de mina en mina, pero a esa había llegado el miércoles. Ellos no tenían armas, eran personas trabajadoras”. Agregaron que el joven vivía en Upata, capital del municipio Piar.

Los familiares de Jean Carlos no quisieron hablar con el equipo reporteril de Correo del Caroní.

“Debe ser mancomunado”

El general Juvenal Villegas, director de la Policía del Estado Bolívar, explicó que se mantiene un despliegue de funcionarios policiales en la zona sur del estado, “pero nosotros no estamos dentro de las minas. Yo, en lo personal no metería dos policías dentro de una mina, con unos familiares, porque es riesgoso para ambas partes”.

“Son áreas de difícil acceso, pero estamos en el deber de prestar la colaboración de ser necesaria”, afirmó Juvenal Villegas.

Reseñó en particular que por tratarse de la zona minera y lo difícil que es el acceso, es necesario grupos de inteligencias tales como: Regiones Estratégicas de Defensa Integral (REDI), Zona Operativa de Defensa Integral Bolívar (ZODI) y Áreas de Defensa Integral (ADI).

“Esto no es un tema policial, va más allá de eso. Debe ser mancomunado, un trabajo entre la Policía y la GNB”, acotó.

Una lucha

“El oro se sigue explotando pero las reservas no van para nuestro país… a este Gobierno lo que le conviene es el caos y que continúen este tipo de mafias, pero sobre todo que no haya control sobre la explotación aurífera”, reclamó el 2 de marzo de este año, Rachid Yasbek, diputado de Primero Justicia al Consejo Legislativo del Estado Bolívar.

En la rueda de prensa de entonces, Yasbek responsabilizó al gobernador Francisco Rangel Gómez de la anarquía en las minas del sur del estado Bolívar.

En entrevista para Correo del Caroní, el diputado por el circuito 3 del estado y secretario general de Causa R, Américo De Grazia, enumeró las iniciativas infructuosas sobre el control de la minería: tres decretos presidenciales sobre la nacionalización del oro; dos planes Piar; la Reconversión Minera; el Plan Caura; la última Comisión Presidencial para la Protección, el Desarrollo y Promoción Integral de la Actividad Minera Lícita en la Región de Guayana. “Todos han fracasado”, agregó.

Las promesas para resolver el problema minero han ido y venido por parte de los entes gubernamentales. En 2014, el 12 de junio, la ministra de la Región de Defensa Integral de la Región Guayana (Redi-Guayana), Nicia Maldonado, instaló lo que definió como otro intento por reordenar la minería al sur del país.

A la misma asistió el gobernador del estado Bolívar, la gobernadora de Delta Amacuro, Lizeta Hernández; los alcaldes de los municipios del sur, Manuel de Jesús Valles, José Alejandro Martínez (Piar) y Carlos Chancellor (Sifontes); el alcalde de Caroní, José Ramón López, y el jefe de las Regiones Estratégicas de Defensa Integral (REDI) N° 6 Guayana, mayor general del Ejército Pedro Alfonzo González Salmerón, entre otros integrantes de la comisión.