Luego del secuestro a uno de sus empleados, la embajada de Estados Unidos publicó un nuevo alerta de seguridad a los ciudadanos norteamericanos residentes en Caracas.

En el comunicado instan a no desplazarse por determinadas calles adyacentes a la sede diplomática, además recomiendan no involucrarse en marchas o concentraciones por más pacíficas que sean.

Aumento de las Restricciones a la Política del Movimiento Diplomático Estadounidense (25 de septiembre de 2017) 

La Embajada de los Estados Unidos en Caracas informa a todos los ciudadanos estadounidenses en Venezuela que se ha actualizado la política relativa a los movimientos de los diplomáticos ciudadanos estadounidenses y sus familiares en Caracas y en otras partes de Venezuela. Como siempre, la Embajada alienta a todos los ciudadanos estadounidenses que viven y viajan por Venezuela a permanecer atentos en todo momento y a practicar una buena seguridad personal.

A partir de ahora, la Calle A (a través del barrio de La Alameda, la intersección de la Calle B / Calle A con el Centro Comercial Santa Fe) es una zona prohibida para todo el personal diplomático hasta nuevo aviso, desde el crepúsculo hasta el amanecer.

El viaje en grupo es muy recomendable. Entre las 9:00 p.m. y las 3:00 am los viajes deben realizarse en vehículos blindados o en grupos que utilicen al menos dos carros. Los viajes en grupo pueden realizarse con vehículos no blindados.

Esta decisión se tomó debido a la creciente preocupación por el reciente secuestro de personal de la Embajada que viajaba en un vehículo diplomático en esta carretera y en vista de otros incidentes. Esta política está sujeta a revisión en 30 días.

Una lista completa de restricciones de movimiento está disponible en la página web de la Embajada.

La Embajada advierte fuertemente a todos los ciudadanos de los Estados Unidos para que eviten las áreas de protesta; incluso las manifestaciones destinadas a ser pacíficas que pueden convertirse en conflictivas y escalar a la violencia. Recientes protestas han tenido una notable presencia de fuerzas de seguridad, el uso de gases lacrimógenos y a veces balas de goma. Se insta a los ciudadanos estadounidenses a que tengan precaución, si inesperadamente se topan con grandes reuniones o protestas. Las áreas afectadas a menudo experimentan interrupciones del tráfico.