Los titulares de varios gremios del sector privado del país se encuentran evaluando la situación que atraviesa Venezuela, mientras se busca un posible nuevo esquema económico.

Las declaraciones de los voceros gremiales de Consecomercio, Fedecámaras, Fedeagro, Fedenaga, Conindustria, entre otros, fueron emitidas en el marco de la celebración número 37 del Día Nacional del Comercio y los Servicios.

Cipriana Ramos, presidenta de Consecomercio, indicó que se reunirá con representantes de la Banca para analizar los problemas que se han generado con los puntos de venta y el impacto que su reducción en los comercios ha producido en el mercado. «Los puntos de venta son equipos que utilizan repuestos importados, cuando se daña uno se saca de circulación porque no hay cómo emplearlos. Esto entorpece las operaciones comerciales».

Además, coincidió con los principales representantes de los gremios empresariales, industriales y ganaderos en sus intenciones de «enmendar la caída de los principales índices económicos, mejorar el abastecimiento, la calidad de vida e impulsar la economía nacional”, para lo que es necesaria una rectificación urgente de la política económica del país y el reordenamiento de las metas planteadas para lo que resta del año 2016 y el próximo 2017, aseguró.

La presidenta gremial afirmó también que la llegada de nuevos billetes con denominaciones más altas son necesarias para resolver los problemas que el uso excesivo de efectivo produce, mientras que el presidente de Conindustria, Juan Pablo Olalquiaga, explicó que la falta de efectivo en la calle responde a la grave inflación que estamos padeciendo “se ha destruido el bolívar como mecanismo de intercambio comercial»

Por su parte, el presidente de Fedecámaras, Francisco Martínez sostuvo que “hasta que no se haga un abordaje estructural a los problemas, será difícil que tengamos solución a la crisis. El año 2016 está cerrando con inventarios en el borde del colapso, con los peores números. Hemos roto el récord el 2015. Tenemos 35 % de operatividad de la capacidad instalada en las industrias y hubo una disminución del 45 % en  las importaciones de alimentos al país. No se vislumbran, por ahora cambios positivos para 2017”.

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