Petroguía, autor en Runrun

Pdvsa deja a Venezuela sin gasolina por fallas en refinación
En promedio la capacidad de procesamiento en Paraguaná disminuyó en 39%

El nivel de consumo de gasolina en Venezuela se ha reducido en 63% en siete años de gobierno de Nicolás Maduro, pero aún frente a esa circunstancia la coyuntura de 2020 ha llevado a su administración a restringir aún más la distribución –al incluir a la propia capital Caracas- debido a las fallas que afrontan los complejos de refinación, las restricciones para importar combustibles que afronta la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y las medidas de seguridad que se adoptan debido a la pandemia del COVID-19.

“Las sanciones que se tomaron contra filiales de Rosneft complican que una compañía extranjera le venda a Pdvsa por temor a medidas similares, los bajos precios del crudo restringen la importación de combustibles por los problema de caja que afronta la empresa; y ahora, el coronavirus impone que todos los países asuman estrategias y políticas para la distribución y manejo de sus inventarios de gasolina”, explica una fuente oficial.

A lo anterior se agrega que la estatal solo tiene operativa menos de la mitad de gandolas que son propiedad de la Empresa Nacional de Transporte, la cual fue creada en 2009 tras la estatización de las empresas mayoristas que se encargaban de la distribución de combustibles en este país sudamericano.

El consumo de gasolina en Venezuela en 2012, último año de gestión del fallecido Hugo Chávez, alcanzó un pico de 301.000 barriles diarios y esa cifra se ha reducido a un tercio: un promedio de 110.000 barriles por día, de acuerdo a lo que indica la fuente. “El complejo de Paraguaná en el mejor de los casos nos aporta un tercio del consumo porque las otras plantas tienen fallas y el resto hay que importarlo a menos que se tuviera plenamente operativa El Palito y Puerto La Cruz”, dijo la fuente.

Fallas en Amuay

La capacidad de refinación de Pdvsa en Venezuela alcanza 1,3 millones de barriles al día, de los cuales las dos cuartas partes corresponden al complejo de Paraguaná –conformado por las plantas de Amuay y Cardón- pero después de la explosión ocurrida en la primera de estas en agosto de 2012 la operatividad ha ido en descenso al punto que está entre 20% y 30% de su nivel máximo.

En promedio la capacidad de procesamiento en Paraguaná disminuyó en 39% la ubicarse en 391.000 barriles diarios de acuerdo a la data que se tiene en Pdvsa entre 2012 y 2017. La estatal no ha presentado sus informes de 2018 y 2019, pero la data extraoficial indica una disminución a niveles por debajo de 200.000 barriles diarios.

“Pdvsa no solo importa gasolina terminada, sino también componentes de alto octanaje como el MTBE, nafta catalítica y pesada, lubricantes y buena parte de esto se hacía desde Estados Unidos hasta que entraron en vigencia las sanciones que se impuso el gobierno de Donald Trum en enero del año pasado”, comenta la fuente.

Las importaciones de combustibles por parte de PDVSA desde Estados Unidos durante el año 2018 alcanzaron récord de 124.000 barriles por día, de los cuales 22,5% (28.000 barriles por día) se corresponden a gasolina y ese volumen atendió 15% del consumo interno de combustibles para vehículos.

Con información de Petroguía

Irán prevé elevar producción en 800.000 barriles diarios tras acuerdo nuclear

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El gobierno del presidente de Irán, Hasan Rouhaní, contempla que una de las consecuencias del acuerdo nuclear sea que su país pueda elevar su producción en al menos 800.000 barriles diarios, para alcanzar un nivel por encima de los 3,6 millones de barriles al día que se corresponde a la capacidad y que fue el volumen que extraía antes de que la Unión Europea suspendiera las compras de crudo y combustibles a ese país en 2012.

Los datos que suministra la OPEP y la Agencia Internacional de Energía indican que la producción petrolera iraní cayó en más de 25% y la baja en las exportaciones estuvo en 56% al caer de 2,5 millones a 1,1 millones de barriles al día principalmente por el cierre de despachos hacia el mercado europeo y por una reducción en las órdenes de compra por parte de naciones asiáticas.

No obstante, ambos organismos vienen destacando que en 2014 y durante el primer semestre de, Irán ha incrementado la producción dando un salto de 2,6 millones a más de 2,8 millones de barriles al día.

 

Esta tendencia podría elevar la actual sobre producción de la OPEP a casi 2 millones de barriles diarios con respecto a la cuota acordada por la organización de no más de 30 millones de barriles, lo que podría ocasionar una baja en los precios del crudo en caso que no se logre recuperar el consumo.

Lo que sí no está planteado a corto plazo es la posibilidad de Irán de reiniciar sus exportaciones a Estados Unidos, que están suspendidas desde hace 24 años. Antes de la Revolución Islámica de 1979, esa nación llegó a exportar más de 800.000 barriles de petróleo al mercado estadounidense, volumen que se redujo en los año 80 y los últimos despachos se hicieron en noviembre de 1991 cuando se envió un promedio de 64.000 barriles diarios, de acuerdo a las cifras del Departamento de Enegía.