Inés González Agarra, de 31 años de edad, vive una complicada etapa en su vida desde el último 8 de octubre, fecha en la que fue encarcelada en el Sebin (Servicio Bolivariano de Inteligencia) bajo los cargos de instigación pública, ultraje violento y ultraje contra funcionario por sus escritos en Twitter, según Alfredo Romero, presidente del Foro Penal.
El proceso contra @inesitaterrible se inició con una acusación de la Fiscalía, que argumentó la violación a la Ley Resorte, la misma que estipula que es un delito los mensajes que incitan al caos, vandalismo, racismo, se realice apología al delito y desconozcan a las autoridades elegidas.
Esto por estar en contra del régimen de Nicolás Maduro y ser muy crítica de las funciones del Sebin, institución que le dejó un citación en su casa el año pasado, el 3 de octubre, para que se presente un día después ante las autoridades.
Ante la justicia, González confesó su arrepentimiento solo por un tema: el celebrar la muerte del diputado Robert Serra, asesinado días atrás.
Aquella vez, Celia Dao, su abogada, dijo que ella pidió perdón por haberse extralimitado por la muerte del político y solicitó a la jueza la oportunidad de pedir perdón a la familia del fallecido.
“Ella cometió ese delito, pero el tribunal se extralimitó al dejarla detenida”, aseguró Dao.
Ahora, la joven, quien fue detenida en Maracaibo el mismo día de su declaración, se encuentra en Caracas desde el ocho de ese mes y sin posibilidad de comunicación y sin recibir luz natural.
Por su parte, Alfredo Romero reclama que con la celeridad con la que se le castigó a Inés González, lo mismo ocurra con los funcionarios que incurren en el mismo delito y no solo en redes sociales, sino, además, en televisión como Nicolás Maduro en ‘Aló, Presidente’ y Diosdado Cabello en ‘Con el mazo dando’.
