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8 hallazgos sobre la situación de las mujeres venezolanas en la Encovi 2023

La Universidad Católica Andrés Bello (Ucab) presentó este miércoles, 13 de marzo, la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi) 2023, la cual reflejó la situación de las mujeres venezolanas en varios aspectos.

 

El estudio «Radiografía de la vulnerabilidad social de Venezuela y propuestas de políticas públicas», detalló que la brecha de género sigue aumentando en temas como el nivel de actividad económica, responsabilidades de cuido en el hogar y diferencias salariales. 

Además, en el informe también se exponen los problemas que sufren las féminas en cuanto al acceso a la salud y los métodos anticonceptivos. 

La Encuesta Nacional de Condiciones de Vida se levantó entre marzo y mayo de 2023. Más de 16 mil hogares en varias ciudades del país como: Gran Caracas, Valencia, Maracay, Maracaibo, Ciudad Guayana, San Cristóbal, Barquisimeto, Maturín, Barcelona y Puerto La Cruz fueron consultados mediante entrevistas personales. 

A continuación, los 8 hallazgos más relevantes sobre la situación de las mujeres en Venezuela: 

Problemas de salud

Los problemas de salud identificados en la Encovi 2023 reflejan que la frecuencia es mayor en las mujeres que en los hombres, siendo la tos, resfriados y gripe (25%) los problemas más frecuentes; seguidos de tensión y problemas cardiovasculares (19%), sistema óseo y articulaciones (6%), diabetes (3%) y afecciones respiratorias (3%). 

En cuanto al acceso a la salud, 60% de los encuestados consultó con un médico, 40% no consultó, 24% se automedicó y 10% no tenía dinero para pagar. 

Fecundidad

Sobre la fecundidad, el estudio arrojó que la misma persiste en la cúspide temprana, es decir28% se concentra en el grupo de 20-24 años y 45% si se considera el tramo de 15 a 24 años.

En Venezuela, según estos datos, 72% de las mujeres son madres antes de los 24 años. Sin embargo, se reporta un leve descenso.

La Encovi señaló que «la caída de la fecundidad ha transversalizado el espectro social y las brechas se han reducido, pero todavía el promedio de hijos por mujer es más alto entre las mujeres más pobres».

Otras cifras demuestran que 15% de las madres adolescentes tienen dos o más hijos y solo 16% de ellas concilian la maternidad con la vida escolar.

Según el estudio, en Venezuela para el período estudiado, casi se duplica el riesgo de ser madres en la adolescencia entre las mujeres pobres (30%) en comparación con las no pobres (18%).

Anticoncepción

Los hallazgos del estudio en anticoncepción son reveladores. Tomando en cuenta el segmento de 15 a 19 años, 75% asegura conocer alguno pero solo 43% asegura usarlos.

La esterilización femenina se mantiene como el método de regulación de los nacimientos reportado con mayor frecuencia entre usuarias de anticonceptivos (28%).

La píldora se ubica en el segundo lugar de preferencia (22%), siendo el implante el método más usado entre los años 2021 y 2023 (de 8 a 12%).

El uso de la vasectomía reportó un incremento (de 1 a 6%) como método en uso por parte de la población masculina. 

«88% de las mujeres del quintil más rico usa anticonceptivos en comparación con 47% del quintil más pobre», señaló la Encovi.

El uso de algún anticonceptivo se limita a 43% entre las adolescentes, 71% entre 20 y 24 años, 80% en más de 25 años.

Leve reducción de migración femenina

Un hallazgo importante de la Encovi 2023 es la leve reducción de la migración femenina, lo que puede deberse a las crisis económicas y políticas en países de la región, un clima social adverso, xenofobia y endurecimiento de medidas de permanencia, reorientación de flujos hacia Estados Unidos y España por efecto de reagrupación familiar.

6% de los migrantes recientes retornaron, mientras que 18% de quienes residen en el exterior tienen planes concretos de regresar.

Reducción del nivel de actividad económica

La Encovi reportó por cuarto año consecutivo que Venezuela tiene un nivel de actividad económica bajo y muy bajo para sus mujeres.

Recalcaron que es de suma importancia la inserción de la mujer en el mercado laboral dado el impacto directo que esto tiene sobre el ingreso familiar.

«Superar las barreras de acceso de la mujer al trabajo es una manera de combatir la pobreza de ingreso y las condiciones de vulnerabilidad de los hogares», recomendaron.

Mujeres que no trabajan por responsabilidades de cuido

La composición de la fuerza laboral en el país demostró que 8.9% de las mujeres consultadas no trabajan por asumir las responsabilidades del cuidado del hogar. 

Desigualdad de género y brechas salariales

La Encuesta de Condiciones de Vida afirmó que la apertura económica “de facto” que ha tenido lugar en la economía venezolana, a partir del año 2019-2020, ha hecho que se amplíen las diferencias sociales, especialmente en el acceso de las oportunidades.

La encuesta además señaló las principales características de la desigualdad entre hombres y mujeres venezolanas. Baja inserción laboral, pocas horas de trabajo por responsabilidades de cuido, discriminación para cargos altos, desvalorización de los empleadores, discriminación en “ámbitos masculinos”, autominusvaloración y “protecciones” legales discriminatorias.

Perfil de pobreza

La Encovi señaló el perfil de la pobreza en Venezuela para el año 2023. Con respecto a la educación, la privada continúa siendo la mejor opción frente a la opción pública. 

Sobre la actividad económica, manufactura y finanzas son las opciones que generan la mayor probabilidad de ser «no pobre multidimensional». 

En el perfil de pobreza, las mujeres que no trabajan por cuido tienen un 69.2% de mayor probabilidad de ser «pobre multidimensional».

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Venezuela en el 2023: tendencias y escenarios en economía, seguridad y migración

Runrunes realizó, la noche del 31 de enero, un Twitter Space en el que reunió a los analistas Mauricio Phelan, María Gabriela Ponce y José Luis Fernández Shaw, quienes hicieron una radiografía del panorama social de Venezuela, en cuanto a pobreza, seguridad, migración, para este 2023.

El espacio, llamado «Panorama 2023: tendencias y escenarios», fue moderado por el editor de Runrunes, Luis Ernesto Blanco, y Héctor Fuentes, de EstadoLab.

A continuación, un resumen de las intervenciones de los tres expertos:

José Luis Fernández-Shaw, sociólogo e investigador en ciencias sociales, describió a la Venezuela actual como «un país donde la noción misma de sociedad se encuentra en disputa».En este sentido, se preguntó: «¿Hay algo que podamos llamar una meta nacional? ¿Sobre qué base podemos crear un pacto institucional?».

A su juicio, mientras los venezolanos no resuelvan «el tema de fractura societal», no podrán gozar de «un crecimiento económico sustentable y una institucionalidad política verdaderamente democrática (…) Tenemos una sociedad fragmentada, dividida y con poca confianza en el devenir».

Por otro lado, analizó la situación económica en el país en relación con la violencia y pronosticó que, si el crecimiento sigue como en la atualidad —explicó que «la reactivación económica se ha dado hacia los sectores con más capacidad de consumo»—, «traerá más desigualdad, factor clave al analizar los distintos tipos de violencia. Hoy la violencia predominante es organizada y vino dada por un control precario del armamento».

Fernández-Shaw se preguntó «qué hace que la violencia se manifieste» y reiteró como una de las causas la desigualdad, que «no es solo económica, sino también de género, regional, étnica, por edad, etc». En este sentido, enfatizó que «la desigualdad crea inequidad y esta que lleva a la conflictividad social».  

Habló, además, de una «violencia cultural» que reina en el país. Este tipo de violencia, añade, «tiene muchísimo tiempo desatendida. El ‘chalequeo’ es una forma de violencia del fuerte contra el débil y nos parece gracioso (…) Además de ser organizada, esta violencia es descentralizada; es decir, está fuera de la urbanidad».

María Gabriela Ponce, especialista en condiciones de vida, pobreza y desigualdad, abordó el tema de la educación en el país. Señaló que hay aproximadamente un millón y medio de niños fuera del entorno escolar. «No pareciera que fuera a observarse mejora en esta área a corto plazo. La razón principal para dejar los estudios es la poca pertinencia, para ellos, de las ofertas escolares».

A esto se le suman «las inequidades», que «también se expresan territorialmente, pues las mayores oportunidades se encuentran en Caracas y los entornos más urbanizados». No obstante, aclara, «Caracas solo concentra entre el 16 y el 20% de los hogares del país. Caracas no es el país».

Respecto a la salud, precisó que, según la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) de 2022, «10% de la población declaró estar afiliado a algún seguro médico», mientras que «en 2021 tan solo el 3% se encontraba afiliado». Esto se debe, explica, «al aumento de ingresos». Aclara, sin embargo, que la Encovi se realizó en julio, por lo que no incluye la situación de los últimos meses.

«Básicamente lo que hemos venido viendo desde Encovi es que la política social del gobierno se ha centrado en dos programas: el CLAP y los bonos —recibidos en 69% de los hogares—. Pero los bonos y transferencias monetarias, así como los CLAP, son meras políticas compensatorias: no son mecanismos para salir de la pobreza».

En su criterio, «es necesario crear programas sociales con verdadero impacto».

Mauricio Phelan, sociólogo, docente e investigador en ciencias sociales, considera que, en la actualidad, Venezuela «sigue siendo un país de expulsión principalmente en grupos de edad productiva, pero eso se está ralentizando».

Sostuvo que «Venezuela pasó de ser un país de expulsión tras la explotación del Barroso II y la muerte de [Juan Vicente] Gómez, convirtiéndose en un país receptor hasta los 80, donde comienza un proceso discreto de expulsión, creciendo en el 99 y volviéndose masiva en 2017».

En opinión de Phelan, existe una «relación alta entre migración y desarrollo sostenible» y «Venezuela fue un ejemplo de ello»: «Si bien hemos perdido una parte de la demografía, la diáspora es un bono que posiblemente haga grandes aportes para la reconstrucción del país».

Asimismo, apunta, hoy «hay una prudencia ante la migración, que se realiza de forma más meditada».

Por otra parte, indicó que «se observa también un retorno en gotas —son personas que han estado fuera por las de un año—» y «entre los factores de este regreso es interesante el de la xenofobia».

«Sin embargo es importante aclarar que no hay cifras, las que hay son de los países de acogida y organizaciones internacionales», agregó.

Encovi 2022 | Casi la mitad de niños y niñas de 3 a 5 años está excluida de la educación inicial
La situación de pobreza en Venezuela aumenta los riesgos de exclusión educativa, afirmó la coordinadora de Encovi

 

 

Este jueves, 10 de noviembre, fue presentada la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Encovi) 2022, la cual reveló que casi la mitad de niños y niñas de 3 a 5 años están excluidos de la educación inicial. 

La encuesta también reveló otros datos alarmantes sobre la educación en Venezuela y determinó que existe una reducción de la cobertura educativa que se centra especialmente entre la población de los 3 a los 17 años

«Casi la mitad de niños a niñas de esas edades no están contando con el apresto de la educación inicial. Vamos a tener generaciones que van a ir avanzando en su trayectoria con los déficits de antes y después de la pandemia», señaló Anitza de Freitez, coordinadora del Proyecto Encovi y una de las vocera en la presentación de resultados.

De Freitez indicó que hubo una reducción en la matrícula, 550.000 inscritos menos en el año escolar 2021-2022 con respecto a 2020-2021. Por lo que se estima que en el último año escolar, hubo un millón y medio de niños, niñas y adolescentes desescolarizados.

Pobreza y exclusión escolar

La coordinadora de la Encovi señaló que la educación en el país es deficiente, pues mientras el sistema educativo en otros lugares del mundo está avanzado, en Venezuela “seguimos anclados a la oferta escolar de hace décadas que solo se centran en formar bachilleres en ciencias y humanidades»

La situación de pobreza en Venezuela aumenta los riesgos de exclusión educativa, afirmó la coordinadora de Encovi, quien añadió que la probabilidad de estar fuera de la educación formal es más alta cuando los hogares están en situación de pobreza multidimensional.

«Seguimos monitoreando el rezago escolar, es uno de los indicadores de privación sobre la dimensión educación utilizado en la medición de la pobreza multidimensional», aseguró.

La Encovi 2022 indicó también que en Venezuela no hay una iniciativa fuerte en favor de la retención y reinserción escolar que integre medidas de reforzamiento pedagógico, alimentación, transporte, con la meta de incorporar a ese millón y medio de niños, niñas y adolescente desescolarizados. 

 

Otros datos sobre la situación de la educación 

Los abuelos están surgiendo como miembros del hogar que acompañan a los escolares en el desarrollo de las tareas, con las consecuencias que eso puede traer en reproducción de deficiencias en procesos de aprendizaje.

Más de la mitad de los estudiantes que asisten a una escuela donde funciona el Programa de Alimentación Escolar (PAE) no están recibiendo los beneficios alimentarios a diario.

Existe una problemática en el desarrollo del aprendizaje de los niños, niñas y adolescentes a raíz de que las madres se ausentan en el hogar para trabajar.

 Existe un desfase entre la edad del estudiante y la edad que corresponde al grado o año cursado.

¿Será suficiente el crecimiento económico entre comillas para reducir la pobreza en Venezuela?
A juicio del sociólogo Luis Pedro España, este crecimiento que no será sostenido, concentrado en pocos sectores específicos y con capacidad de efecto derrame muy reducida podría permitir a algunos hogares abandonar la categoría de pobreza de ingresos
El experto advierte que el país atraviesa un proceso de sincerar precios «a lo salvaje». Seguirá pasando con la gasolina y podría ocurrir con el precio de servicios como la electricidad y el agua

Luis Pedro España, sociólogo y profesor de la UCAB, comentó que si en 2002 se mantiene el crecimiento económico «entre comillas» que experimenta Venezuela, algunos hogares podrían abandonar la categoría de pobreza de ingresos.

«Si este 2022 continúa ese crecimiento económico con mil y unas comillas, que no será sostenido concentrado en sectores específicos y cuya capacidad de efecto derrame será muy reducida por los temas de inmensa desigualdad, aún con todo y eso, habrá una reducción de la pobreza. Ese 18% de hogares que tienen vehículos, una parte importante de los cuales estaba en condición de pobreza de ingresos, en 2022 podría estar fuera de esa categoría», explicó en entrevista con Unión Radio. 

A juicio del sociólogo, el país atraviesa un proceso de sincerar precios «a lo salvaje», pues el gobierno mantiene el mismo discurso de hace 25 años, pero aplica reformas de facto.

«Vamos a una sinceración de todos los pecios, entre ellos el de la gasolina, para que haya abastecimiento  de combustible que satisfaga a los niveles de movilidad. Y el próximo capítulo de sinceración de precios será el de a electricidad y el de otros servicios públicos», acotó. 

¿Aumento de la gasolina tendrá impacto?

El experto recordó que la encuesta Encovi 2021 levantó datos hasta el mes de mayo, cuando aún la movilidad en el país estaba bastante reducida, por lo que será en 2022 cuando en realidad se evalúe el impacto del aumento de la gasolina, principalmente en el transporte público. 

Aún así, recordó que solo 18% de los hogares venezolanos tiene al menos un vehículo. En ese sentido, remarcó que los gobiernos han tenido precaución de que el precio de la gasolina no incida en el aumento del pasaje en el transporte público. 

«Todos los gobiernos han tenido cuidado de que el aumento de la gasolina no impacte el costo del transporte público. Actualmente, el impacto al transporte público no tiene como costo más importante al combustible, sino lo asociado con repuestos, lubricantes, entre otros», agregó. 

OVF pronostica un largo camino de recuperación

El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) aseguró que si no hay cambios substanciales en la política económica, el camino a la recuperación será largo.

A través de su Índice de Actividad Económica Trimestral Preliminar, del cuarto trimestre de 2021, indicaron que en los últimos meses, el gobierno chavista pudo sortear mejor las sanciones, lo que ha permitido «cierta recuperación económica».

Sin embargo, el colapso de los servicios y la caída en los ingresos laborales han generado efectos adversos que no se pueden cuantificar fácilmente.

El OVF reportó tímidos crecimientos del sector financiero, petrolero y público. Aún así, todos acumulan caídas de entre 60% y 90% entre 2013 y 2021. 

 

Los efectos de la crisis en la juventud
No necesariamente los jóvenes sin afinidad con alguna corriente son indiferentes a la crisis política. Creo que muchos sí son opositores en el sentido literal del término

 

@AAAD25

Cada vez que uso las palabras “jóvenes” o “juventud”, me siento viejo. No sé por qué.  En un mes cumpliré 30 años. Ya no me sentiré tan ridículo cuando intente racionalizar este raro efecto dialéctico. Sobre todo cuando hable de adolescentes y de adultos que rondan las dos décadas de vida. Qué bueno, porque entonces me será mucho menos incómodo redactar artículos como este, que tiene por foco el grupo etario del cual Cronos, el Padre Tiempo, está a punto de expulsarme para siempre.

Recientemente dediqué esta columna a la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida. Hoy haré lo mismo con otro estudio estadístico de la Universidad Católica Andrés Bello: la Encuesta Nacional de Juventud (Enjuve). Además de la categoría temática repetiré la modalidad. Es decir, tomaré algunos datos llamativos de la encuesta para intentar darles contexto de manera relevante para nuestra situación nacional.

El fondo

El fondo

Comencemos. Con una muestra de individuos entre 15 y 29 años de edad, la encuesta halló que 44 % de los consultados dice que no se iría del país en este momento. Este fue el primer cálculo que me llamó la atención, pues no esperaba que fuera tan alto.

No es por fortalecer la narrativa de que «Venezuela se arregló», pero resalta que la permanencia confirmada sea una respuesta considerablemente más frecuente que «no dudaría en irme» (28 %). Tal vez la estabilización en el foso redujo la ansiedad sobre el futuro y el incentivo a emigrar. Cada vez más personas se dan cuenta de que en términos económicos ha habido un cambio en Venezuela y que el presente, aunque a años luz de lo ideal o siquiera de lo normal, es menos angustiante que el pasado de tres o cuatro años.

Pasemos ahora a algo que alarmó a muchos lectores de la encuesta: la identificación política. De los entrevistados, 37,0 % se manifestó afín a la oposición; 31,1%, afín al chavismo; y 31,9%, sin afinidad con alguna corriente

He visto a personas preocupadas porque los bloques no se diferencian mucho en tamaño. Creo que el detalle está en el término «oposición”. Una metonimia confusa. Probablemente, los consultados lo leen y no piensan en el acto de oponerse al régimen en sí mismo, sino en la dirigencia opositora. Lógico que pocos se identifiquen con ella. Así pasa en todas las edades, pues hay una crisis de representatividad, precisamente porque el liderazgo ha sido incapaz de lograr el objetivo opositor por antonomasia: el cambio político.

Entonces, no necesariamente los chamos sin afinidad con alguna corriente son indiferentes a la crisis política. Creo que muchos sí son opositores en el sentido literal del término. Solo que se oponen al régimen sin simpatizar con Juan Guaidó, Henrique Capriles, María Corina Machado, etc.

En cuanto a los jóvenes identificados con el chavismo, tampoco necesariamente apoyan todos al régimen hoy. Aunque nos cueste entenderlo, lo cierto es que hay personas que apoyaron a Hugo Chávez hasta el final, se consideran chavistas, pero retiraron su apoyo a Nicolás Maduro debido a una catástrofe humanitaria que ellas también padecen. Son los que creen, sincera pero erróneamente, que Maduro se desvió del camino de Chávez para desgracia del país.

Yo no me preocuparía tanto, entonces, por las identidades políticas. Mucho más inquietante es esto: 50 % de los consultados por la Enjuve dice que la democracia es el sistema político preferible. En 2013 ese porcentaje fue de 68,8 %. En cambio, 22,1 % dice que un régimen autoritario es mejor, cifra que en 2013 estuvo en 8,3 %.

¿Cómo pudo ocurrir esto? Quizá las generaciones más jóvenes, al no haber conocido nunca la democracia, ignoran que casi siempre es más eficaz estimulando una calidad de vida alta.

También las decepciones con una dirigencia opositora que se identifica como «democrática» pudieron contribuir. Muchachos que creen que la única solución al daño que hizo el chavismo es otra dictadura. La orfandad de liderazgo suele favorecer las tendencias autoritarias. Esto es cónsono con el surgimiento de comunidades, sobre todo digitales, de admiradores de autócratas como Marcos Pérez Jiménez, Francisco Franco o Augusto Pinochet. Quien las haya visto seguro habrá notado un alto componente de adolescentes y adultos muy jóvenes.

No creo que este problema se solucione si no se vuelve a entusiasmar a las masas por una política nacional que resalte los valores cívicos, cosa a su vez difícil mientras el chavismo gobierne y la oposición se quede estancada. Supongo entonces que nos toca a los ciudadanos comunes hacer un esfuerzo por mantener vivas las virtudes republicanas y democráticas, de manera que estén listas para florecer en un hipotético poschavismo. Eso sí se puede.

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Por ahí se llega al Infierno...
¡No me vengan a decir que la pobreza hay que celebrarla! Mucho menos que la celebre uno de los estados más ricos del mundo, como lo es el Vaticano

 

@cjaimesb

El próximo 14 de noviembre “celebrarán”, una vez más, la Jornada Mundial de los Pobres, como si la pobreza fuera algo digno de celebrar. Quienes “celebran”, seguramente estarán de nuevo encabezados por el papa Francisco: “Los pobres nos facilitan el acceso al Cielo. Ya desde ahora son el tesoro de la Iglesia. Nos muestran la riqueza que no se devalúa nunca, la que une la Tierra y el Cielo y por la que verdaderamente vale la pena vivir: el amor”. ¡La pobreza hay que erradicarla! Y eso no es una utopía. Hay países en el mundo donde no hay pobres.

Según el papa, los pobres son “la riqueza que no se devalúa nunca”. Los pobres no son riqueza, su Santidad. Todo lo contrario. Que existan pobres en el mundo es una calamidad. Y más calamidad es que lo celebre usted, que es la cabeza de una de las instituciones más ricas de la tierra. Su prédica es la misma de los comunistas: hipócrita, contradictoria, farsante.

Y hablando de esa prédica, el domingo 24 de octubre la simpatía abierta que el papa ha demostrado por el comunismo volvió por sus fueros, cuando la policía vaticana rodeó a un joven peregrino cubano quien, de rodillas, oraba por la libertad de su pueblo y le quitó la bandera, según denunció Félix Llerena, un activista cubano, por su cuenta @FelixLlerenaCUB.

Video, por cierto, que se volvió viral en pocas horas. El joven era parte de una delegación que venía a pedirle a Francisco que intercediera por las crecientes violaciones a los derechos humanos en Cuba. A sus compañeros no les quedó más remedio que enrollarse en las banderas cubanas y acostarse en plena vía della Conciliazione, una de las que llega a la plaza San Pedro.

La Iglesia católica ha pifiado con ese discurso de apología de la pobreza. Y encima, la malinterpretación (me imagino que adrede) de los llamados libros sagrados, donde repiten como un mantra las mismas estupideces desde hace dos mil años: “Es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja, que un rico entre en el reino de los cielos (Mateo 19,20-30)”. “Bienaventurados los pobres de espíritu porque de ellos es el reino de los cielos (Mateo 5, 1-3)”. “Si quieres ser perfecto, ve y vende lo que posees y da a los pobres, y tendrás tesoro en los cielos; y ven y sígueme (Marcos, 10:20)”. “Así pues, cualquiera de vosotros que no renuncie a todas sus posesiones, no puede ser mi discípulo” (Lucas, 14:33).

La historia del camello pasando por el ojo de una aguja ha sido ilustrada con agujas de coser, cuando se sabe que el ojo de la aguja al que se refirió Jesucristo es un tipo de puerta estrecha que todavía hay en Jerusalén, donde un camello pasa, pero con dificultad. Lo de la bienaventuranza es peor, porque si la pobreza es mala, los pobres de espíritu son aun peores.

Encima, ahora con Francisco a la cabeza, no solo es la apología de la pobreza sino la conchupancia con los comunistas.

Luis Alberto Machado, que era un católico devoto, repetía que “los pobres son pobres porque no han aprendido a dejar de ser pobres”. Pero los pobres de espíritu son responsables de su estado. ¿Por qué Jesús no habrá dicho más bien “bienaventurados los ricos de espíritu?”.

A la Iglesia católica –exceptuando la ortodoxia– le cuesta admitir que el dinero que proviene del trabajo honesto no solo es bueno, sino deseable. La desvalorización del trabajo es un arma muy peligrosa, utilizada por los populistas a lo largo y ancho del mundo. Verbigracia, el discurso chavista: “Somos un país rico, no tienes que trabajar porque el gobierno te dará todo. Lo que tú no tienes, es porque otro te lo quitó”.

Todos tenemos que trabajar –o deberíamos– para erradicar la pobreza en el mundo. Una persona que está sobreviviendo no puede ni siquiera soñar. Los sueños le están vedados por la pobreza. ¡No me vengan a decir que la pobreza hay que celebrarla! Mucho menos que la celebre uno de los estados más ricos del mundo, como lo es el Vaticano.

La idea de que haya que tener millones de pobres en el mundo para que “nos faciliten el camino al cielo” es una de las cosas más espantosas que he leído últimamente. Entonces, ¿qué o quiénes facilitan el camino al cielo a los pobres? ¡Serán sus sufrimientos, sus carencias y sus necesidades no resueltas!… Y no me vengan a decir que no importa una vida de sufrimiento si luego habrá una eternidad de felicidad, porque eso habla de otra terrible injusticia: la certeza de que hay seres más importantes que otros, más privilegiados que otros, o como decía Orwell en su Rebelión en la granja: unos más iguales que otros. Entre ellos, la nomenklatura cubana por quien Francisco se derrite.

Yo paso, su Santidad. No tengo nada que celebrar el Día de los Pobres y me siento indignada por la actuación de su policía, tan hipócrita como usted. Prefiero seguir educando para cambiar paradigmas y enseñar a mis alumnos a que sean trabajadores, honestos e independientes. Si el Cielo existe, estoy segura de que el mío es un camino mucho más idóneo que el suyo. Y si su camino es mandarle la policía a quitarle la bandera de su país a un peregrino que ora por la libertad, apoyando abiertamente a un régimen comunista asesino, creo que se equivocó de ruta: por ahí se llega al Infierno.

Las opiniones emitidas por los articulistas son de su entera responsabilidad y no comprometen la línea editorial de RunRun.es

Envejecer en Venezuela es una sentencia de muerte
Informes de la ONG Convite y los resultados de la Encovi reflejan que envejecer en Venezuela es una situación dramática para todos los adultos mayores
El Estado ofrece muy poca protección a los ancianos, que cada vez más sobreviven con más penurias y gracias a las remesas de descendientes y otros familiares

 

@yeannalyfermin

 

Maritza Fernández es una adulta mayor, tiene 68 años y vive en Petare, municipio Sucre del estado Miranda. Durante su juventud trabajó para grandes empresas dedicadas a la confección de ropa. Comenta que con su trabajo le fue bien hasta que llegó “el peor año para todos los venezolanos”: el 2017. 

Fernández narra que la crisis económica obligó a su único hijo a tomar la decisión de emigrar a Chile para trabajar y ayudarla con los gastos de las dos enfermedades que padece: hipertensión y diabetes. Desde entonces, ha tenido que estar sola porque no tiene familiares cerca. Ella insiste en que de no ser por su hijo que la ayuda mensualmente, su situación sería totalmente distinta y muy complicada. 

Matilde Berrios es otra adulta mayor, tiene 76 años, vive con sus dos hijas y sus tres nietos en Filas de Mariches, municipio Sucre, estado Miranda. La abuela, como todos le dicen, padece de asma y no puede costear su tratamiento. Sus hijas no trabajan y su esposo falleció hace ocho años, por lo que solo cuenta mensualmente para sostenerse con la pensión, la caja del Clap y los bonos del gobierno.

Por otra parte, Antonio Rosas, de 71 años, usa un bastón para caminar porque en su pierna derecha tiene una várice que se le inflama y le produce dolor. Antonio pasa el día buscando qué hacer para mantenerse. A pesar de que es jubilado del Ministerio de Educación, afirma que el dinero no le alcanza para comprar las medicinas que debe tomar a diario. 

Las historias de Maritza, Matilde y Antonio, son una pequeña muestra de la realidad que viven los adultos mayores en Venezuela, país que según la ONG Help Age International, en 2015 se ubicó en el segundo lugar con las peores condiciones para envejecer en América Latina. 

Un estudio de la organización Convite realizado en el mes de agosto, que evaluó las condiciones de vida y de salud de las personas mayores en Venezuela, arrojó que a 94% de los consultados sus ingresos no cubren todas sus necesidades médicas, alimenticias y de traslado. 

Varios informes de la ONG Convite y los resultados más recientes de la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi), reflejan que envejecer en Venezuela es una situación dramática para todos los adultos mayores y en muchos casos una sentencia de muerte.

La buhonería como esperanza

Según el estudio de Encovi del año 2021, la pobreza total por ingresos alcanzó 94,5%, mientras que la pobreza extrema se ubicó en 76,7%, un aumento del 10% en comparación con la medición anterior. 

Para el mes de abril de 2021, Convite señaló que para ese momento, 72% de los adultos mayores encuestados no trabajaba y que aquellos que aún lo hacen, por lo general se dedican a oficios de la economía informal, especialmente servicios técnicos a domicilio y la buhonería. 

De acuerdo con estimaciones del Banco Mundial, la pobreza extrema se define por ingreso diario de 1.90 dólares. En Venezuela el valor de la pensión es equivalente al salario mínimo mensual, lo cual es mucho menor a ese indicador, pues con la nueva reconversión, ahora se ubica en 1.5 dólares aproximadamente. 

Sin proteínas no hay paraíso 

Sobre el acceso a la alimentación, Convite señaló en su informe que 56 % de los adultos mayores encuestados comen tres veces al día, 31.6% dos veces al día y 2.7% una sola comida. Solo un 8.8% de los que comen sus tres comidas pueden incluir las meriendas. 

49% de los encuestados también indicaron que consumen proteína animal de dos a tres veces por semana y no diariamente como desearían; 20% solo come carne una vez cada 15 días.

La Encuesta de Condiciones de Vida reportó que el porcentaje de hogares sin inseguridad alimentaria (situación en la que las personas carecen de acceso seguro a una cantidad de alimentos suficientes para su desarrollo y para poder llevar una vida activa y sana) se redujo de 6,6% a 5,8%. Otro dato alarmante es que la inseguridad alimentaria leve en 2021 se ubicó en 34,5%.

El estudio subraya que, aunque todos los estratos redujeron su gasto en alimentos, el más afectado ha sido el más humilde, pues este ha desmejorado su consumo de alimentos en 13.3%.

Los altos precios de los alimentos afectan de manera importante a los adultos mayores, pues la mayoría de ellos ya no pueden trabajar y dependen directamente de familiares. 

Según la última actualización que presentó el Centro de Documentación y análisis para los Trabajadores (Cendas), la canasta alimentaria para un grupo familiar de cinco personas en el mes de agosto tuvo un costo de $232,80. Un incremento de 17.8% con respecto al mes anterior. 

Según las estimaciones que se hacen a través de la  «Cesta Petare»,  (que realiza semanalmente la Asamblea Nacional electa en 2015 para medir la inflación en el aumento de los precios de ocho alimentos: huevos, harina de maíz, queso blanco, carne, aceite, azúcar, arroz y café) precisa que para la semana del 10 al 16 de octubre, se necesitaron 28.88 dólares para adquirir los productos antes mencionados. 

El lujo de estar sano

El alto precio de las medicinas es otro problema frecuente entre los adultos mayores, pues estos se debaten entre comprar el tratamiento médico o comprar la comida. En el estudio de Convite, 78% de los adultos mayores encuestados usa algún tipo de medicamento, pero solo el 5% dice que puede adquirirlos con facilidad. 48% los compra con dificultad y 17% adquiere solo algunos de los medicamentos recetados. 

Sobre el precio de las medicinas, Antonio Rosas asegura que el tratamiento para la enfermedad de su pierna, más la hipertensión que padece, tiene un valor aproximado de 15 dólares mensuales, dinero que rara vez tiene. 

 Los olvidados del Estado

Los adultos mayores son quienes más dependen del Estado, principalmente porque ya no pueden trabajar. El informe de Convite señala que 48.05% de los encuestados reciben la caja del Clap. Un 59% de los encuestados indicó que los productos le duran menos de 15 días, mientras que 28% afirmó que le alcanza para 15 días y otro 13% un mes. 

La Encovi afirma que 86% de los encuestados señalaron que el promedio de recepción de la caja o bolsa es de cada seis semanas. Estas cajas o bolsas cuenta menos de un dólar al mes pero, con suerte, traen poco más de nueve productos de alimentación. 

Desde hace varios años, las pensiones de vejez dejaron de ser una ayuda para todos los adultos mayores. El servicio que ofrecía el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales en materia de salud ya no es ni la sombra de lo que era hace 20 años. Según las mediciones de Convite, 31% de los consultados tienen acceso a los CDI, 30% a los hospitales, solo 13% a los Barrio Adentro y otro 26% a ambulatorios. 

Sobre la entrega de los bonos del gobierno, la Encovi señaló que 2 de cada 3 mayores de 18 años dicen haber recibido al menos un bono temporal durante el último año, siendo 5 dólares, el valor promedio de los bonos por hogar.

La migración venezolana ha afectado directamente a los adultos mayores, pues estos han quedado solos luego de que sus familiares tomarán la decisión de salir del país en busca de mejores condiciones de vida.

Según las cifras del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), 5 millones 667 mil 835 personas han huido de la grave crisis económica que afecta a Venezuela.

Convite señala que 79% de los encuestados no vive solo, mientras que 10% afirmó que se encuentra en soledad. 17% señalaron que viven solos porque sus familiares se fueron del país.

A merced de la violencia

El pasado 14 de octubre, la ONG Convite presentó su más reciente informe “victimización: vejez en riesgo”, el cual registra las muertes violentas de las personas mayores en Venezuela desde enero hasta junio de 2021. 

El informe contabilizó 102 decesos de personas de la tercera edad en circunstancias violentas, de ellos, 24 fueron asesinados para robarles sus pertenencias, 12 murieron en medio de una riña, 7 fueron asesinados por ajuste de cuentas, 1 fue por sicariato y otro por venganza. 

De las muertes violentas registradas, 3 fueron perpetradas por los propios hijos, 4 por los nietos, 3 por hermanos, sobrinos u otros familiares, 9 por vecinos o amigos y 1 por la pareja.

Convite señaló que el 26.5% del total de las muertes violentas se concentraron en el Área Metropolitana de Caracas (17), y en los estados Aragua (15) y Lara (10). Los victimarios mayormente son familiares directos, vecinos o amigos que conocen el estado de vulnerabilidad en el que viven las víctimas.

Reconversión monetaria sin reconversión de salarios y pensiones
Tras la tercera reconversión, que le quitó otros 6 ceros al bolívar, no se conoce ningún anuncio en materia de salario mínimo, de pensiones y jubilaciones

 

@froilanbarriosf

En realidad es un abuso de poder la política monetaria del régimen que, sin miramiento alguno, elimina ceros, fabrica conos monetarios, hace caso omiso ante la inflación, es indiferente ante la devaluación carituresca del bolívar ante el dólar; ya que, en definitiva, no le roza ni por un pelo ninguna de las calamidades que martirizan a un país

En su plácida vida de dictador, capaz de regodearse decretando la felicitad popular, se comporta como un Nerón tropical. Aquel disfrutaba del incendio de la Ciudad Eterna, este se regocija del holocausto de un pueblo obligado a sufrir sus dislates e intemperancias con su sobresaliente declaración: “la anterior reconversión de 2018 duró 3 años y 2 meses, aunque algunos apostaron a que no durara tanto”. Ante tan brutal opinión uno no sabe si reír o llorar, o creer definitivamente que, así como el miedo es libre, la ignorancia también lo es, cuando no hay propósito de educarse, aunque sea por correspondencia.

Lo cierto del caso es que Venezuela ha vivido desde 2008 hasta el presente 2021 una danza de conos monetarios, de emisión de múltiples versiones de papel moneda, que han puesto a prueba la salud mental de un pueblo incrédulo del valor de la moneda nacional. A tal extremo que ha buscado refugio en divisas extranjeras que le dan un verdadero poder adquisitivo. 

El salario de mal en peor

En otras latitudes ha habido reconversiones monetarias desde el siglo XX. La más representativa, el euro, que involucró inicialmente a una docena de países en 2002; en Brasil del cruzado al real; en Perú del inti al sol; Argentina llevó su austral al peso; en Ecuador del sucre al dólar. Y en todas se estableció equidad con el salario al momento de sus procesos de reconversión. 

Acá vamos de mal en peor. En 2008, al momento del paso del bolívar al bolívar fuerte, hubo un aumento de 15 euros al salario mínimo; en 2018, con el invento del petro, se estableció un salario mínimo de 30 dólares equivalente a medio petro, para agosto de 2018 el salario mínimo de 1800 bolívares equivalía a medio petro, y este a 30 $. 

¿Pues bien en que terminó la historia? Luego de 3 años y 2 meses de duración, se desenmascaró una vez más la farsa. El salario mínimo acorde con la reconversión monetaria de 2018, debiendo ser 120 millones de bolívares, cerró la rueda con un salario mínimo de Bs. 7 millones y una canasta alimentaria próxima a los US$ 300.

¿De quién es la culpa de esa inmensa brecha entre salario y poder adquisitivo? Directamente de un gobierno oligofrénico en política económica. Y al mismo tiempo inmensamente hábil para esquilmar el erario nacional.

Henos hoy ante el nuevo escenario de una nueva reconversión monetaria, esta vez en peores condiciones que las sufridas en 2008 y 2018. En esta oportunidad, luego de iniciarse la era si se puede llamar así del bolívar digital el pasado 1 de octubre, no se conoce ningún anuncio en materia de salario mínimo, de pensiones y jubilaciones que corren al mismo ritmo del salario mínimo constitucional.

La dramática realidad es que al eliminar los ceros, el salario mínimo y las pensiones no alcanzan los 2 dólares, y la pobreza se extiende a la cuasi totalidad de la población venezolana. Situación que no se compadece con el video de un tirano mostrando pesebres y renos e imágenes del primer mundo para aparentar que todo está bien. Mientras, la vorágine sucumbe a nuestro país y la población está en la peor miseria de su historia.

*Movimiento Laborista.

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