DE SEGUIR LA SITUACIÓN como arrancó esta semana- con promedio de apagones diarios con 5 o más horas de duración- la llamada zona norte del estado Anzoátegui (Barcelona, Puerto La Cruz, Lecherías y Guanta) pudieran entrar en una crisis que afectaría, aún más, la abatida economía del estado oriental.

La historia de los apagones en esta zona se remonta a muchos tiempo antes de que estallara la crisis eléctrica nacional pero ésta la a agudizado a niveles alarmantes.

Desde el domingo en la tarde la luz falla por horas provocando paralización de servicios fundamentales-como suministro de agua por ejemplo- y perturbando la actividad de pequeños, medianos y grandes empresarios y comerciantes; así como oficinas oficiales que detienen la atención al público.

Lo más delicado es que Eleoriente y la Gobernación del estado no ofrecen razones a la ciudadanía del porque de tan severos apagones y mucho menos de las salidas que se le pueden dar al problema.

Un elemento preocupante, que dibuja un cuadro más agudo, es que problemas similares ya se están repitiendo en regiones vecinas como Monagas, Sucre y Nueva Esparta.

Dicho panorama revela un dejo irresponsable, por parte del gobierno nacional, ya que debemos recordar que tanto el Presidente Chávez, como su ministro de electricidad, Alí Rodríguez, anunciaron olímpicamente que la crisis de electricidad había terminado.

En la voz de algún poblador de Anzoátegui se podría acuñar la frase popular que reza: que tanto el Presidente como su ministro viven alumbrados en materia de crisis eléctrica.