Fue Albert Einstein quien dejó la sabia expresión de “…si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo…” Visto el reconocido esfuerzo que el liderazgo de la oposición democrática ha venido realizando y la concreción inconstitucional, violenta, asesina y corrupta que llevó a cabo el régimen de Maduro el pasado domingo, estimo que la lección de Einstein merece cierto análisis y mucha reflexión, con algo de urgencia. ¿Insistimos en más trancazos, marchas en la Fajardo, barricadas en urbanizaciones sin ningún significado político, en ruedas de prensa para anunciar próximas reuniones y agendas? ¿O se visualizan o se ejecutan acciones distintas? Con el tremendo significado que tiene para la destrucción de la vida republicana de nuestra nación el inconstitucional referendo rojo del domingo debería servir para que del lado democrático surjan no solo nuevas propuestas sino verdaderas acciones de carácter político que permitan detener esta inmerecida robolución destructora de todo lo que somos como sociedad. Mientras que el régimen ignora y se burla (Jorgito ridere) del saldo de 150 muertes que ha dejado este írrito evento, el hambre, el desempleo, la inseguridad, el desabastecimiento, la violación de los derechos humanos, la destrucción del núcleo familiar, la fuga de talento, la destrucción de nuestra industria petrolera y de nuestro tejido industrial y productivo, así como una corrupción abierta y descarada, son los signos más evidentes que suben y bajan las escaleras de nuestras barriadas y urbanizaciones. Mas naciones se unen cada día en sus críticas al considerar que Maduro y su gobierno no tienen perdón por el daño a Venezuela. Ni las sanciones les importan. Veremos.