La Fuerza Armada Nacional (FANB) consideró que EEUU viola «flagrantemente elementales principios del derecho internacional» al sancionar al vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, con el «maquiavélico» propósito de minar la imagen del Gobierno de Nicolás Maduro.
En un comunicado, la FANB afirmó que el Gobierno estadounidense, a través del Departamento del Tesoro, que acusó a El Aissami de supuestos vínculos con el narcotráfico, «atenta de manera vil» contra el vicepresidente, a quien «injustamente pretenden mancillar en su honorabilidad, formulando señalamientos absolutamente carentes de fundamento y legalidad».
Las FANB señalan que EEUU se toma «atribuciones extraterritoriales que violan flagrantemente elementales principios del derecho internacional», con «maquiavélico» propósito de minar la imagen del Gobierno de Nicolás Maduro en un «nuevo acto de injerencismo».
El ministerio de Defensa cuestionó además la Administración del Control de Drogas, DEA (por sus siglas en ingles), cuya «amoralidad», aseguró, «no tiene parangón en el mundo entero, pues su nefasta estructura, sistemáticamente es empleada de manera criminal para afectar estados y gobiernos progresistas».
Con las acusaciones contra El Aissami se hace uso de «un falso positivo, del vilipendio, la intriga y la desinformación para con alguien que ha enfrentado valientemente las distintas formas de criminalidad, entre ellas el narcotráfico», indica la FANB.
Asimismo, afirma su «apoyo incondicional» al vicepresidente y sostiene que defenderán «con estoicismo y estricto apego a la Constitución y las leyes, la soberanía e independencia de la patria, así como el pundonor de todos los hijos e hijas de Bolívar y Chávez».
El Departamento del Tesoro de EEUU aseguró este martes que El Aissami, el cargo más alto del Gobierno venezolano sancionado nunca por el país norteamericano, «supervisó o poseyó parcialmente envíos de narcóticos de más de mil kilogramos desde Venezuela en múltiples ocasiones».
Además, «facilitó, coordinó y protegió a otros traficantes de narcóticos que operaban en Venezuela», y «está vinculado a la coordinación del envío de drogas al cartel mexicano Los Zetas», según explicó un alto funcionario estadounidense.
