Estos son los escenarios de la MUD si logra o no recoger el 20 % para el revocatorio - Runrun
Estos son los escenarios de la MUD si logra o no recoger el 20 % para el revocatorio

A PESAR DE LAS CONDICIONES ADVERSAS a las que se debe enfrentar, la MUD seguirá el camino hacia el referendo revocatorio y, en ese andar, debe superar la prueba más inmediata: la recolección de 20 % de las huellas de los votantes por cada estado.

Una vez hecho el proceso, que se desarrollará entre el 26 y 28 de octubre, se sabrá si la oposición puede continuar con la idea de remover al presidente Nicolás Maduro del poder. Queda, entonces, saber lo que pasará en ambos escenarios: ¿qué sucede si se logra el 20%? y ¿qué pasará en Venezuela si por un puñado de firmas no se puede ir al RR? En Runrun.es consultamos a los expertos para que respondieran ambas interrogantes:

Campo minado

De lograr la recolección de 20 % de las firmas del electorado (3.894.584) para solicitar el referendo revocatorio contra Nicolás Maduro, a la oposición aun le queda remontar un trecho lleno de obstáculos para finalmente ejecutar la consulta nacional sobre la rescisión del mandato del presidente venezolano.

“La oposición todavía tendría que atravesar un campo minado, observa el  consultor político Oswaldo Ramírez. Considera que en el mejor escenario, el revocatorio presidencial se realizaría el primer trimestre de 2017 por los plazos planteados por el CNE: anunció que se tomará 90 días para analizar las firmas si son recogidas en octubre, luego declarar si son válidas o no y convocar a la campaña 21 días después.

Si se activa la campaña por el RR, la oposición tiene el reto de garantizar que los electores logren efectivamente ir a votar  y superar los 7,5 millones de votos que logró Maduro el 13 de abril de 2013 sin dejarse intimidar por las presiones del madurismo.

Entretanto, existen otras amenazas que podrían anular el proceso del revocatorio:  la demanda judicial del Psuv contra el RR por supuestas firmas falsas introducidas ante la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y las  denuncias por presunto fraude en la recolección de firmas ante el Ministerio Público. Alegan ilícitos electorales, como usurpación de identidad, utilización de menores de edad y personas sentenciadas, así como el uso de identidad de votantes fallecidos.

Realizar y ganar el RR en 2017 plantea varios escenarios en un entorno cambiante, según Ramírez.  Al salir Maduro del gobierno, se formaría un nuevo ejecutivo que seguiría siendo chavista (al asumir el vicepresidente la presidencia). También podrían plantearse acuerdos y proceder a una elección presidencial luego de que el vicepresidente renuncie. Otra posibilidad es formar un gobierno de unidad nacional, convocar a una asamblea nacional constituyente que “resetee” el sistema o una junta de gobierno  en caso de producirse un golpe de Estado.

No hay que dejar a un lado los imponderables que pueden convertirse en catalizadores de la crisis que aceleren los procesos: el hambre, el alto costo de la vida, incremento de la violencia y aumento de la conflictividad social. “Llegar a un punto en que la gente rebasada por la situación ya no tenga miedo al monopolio de la fuerza del Estado generando estallidos sociales”.

Horcas caudinas

Con las condiciones presentadas por el CNE, luce cuesta arriba lograr la recolección de 20 % de firmas para la activación del referendo revocatorio, considera el politólogo Luis Salamanca. “Todavía falta un punto importante por aclarar y decidir: la distribución de las máquinas captahuellas en el territorio. Ese detalle técnico va a condicionar mucho la recolección de firmas por parte de la MUD”.

Al analista no le extrañaría que el CNE impusiera el modelo de recolección a través de las captahuellas de Jerry Manderin, es decir, colocar mayor número de máquinas donde haya menos votantes del partido de gobierno y viceversa. “Si la distribución de las máquinas respetara la proporcionalidad del voto, habría posibilidades de conseguir los votos. Son cuellos de botella que impiden un flujo rápido de votantes”.

Para Salamanca, sí existe la disposición para lograr 20 % de las firmas, pero no así las facilidades materiales y técnicas para alcanzarlo, como la distribución estratégica de captahuellas en centros con sitios de difícil acceso o alta criminalidad. También entorpecería el proceso el horario de oficina que impondría el  CNE a un proceso de carácter electoral.

Pero en el caso de que la oposición si lograra alcanzar su meta, deberá enfrentar varias horcas caudinas, es decir, soportar afrentas con demostración de fuerza.  Le seguiría inmediatamente una etapa de congelamiento del RR por parte del CNE, a criterio del analista político. “Sería el paso criogénico que utilizaría el organismo para que el revocatorio se postergue hasta el 2017. Primero se tomará días para decidir si las firmas son hábiles y anunciarlo a finales de noviembre. Luego correrían 90 días más para aprobar la fecha del revocatorio”.

El gobierno de Maduro no le ha dado un portazo definitivo al RR para mantener ante la comunidad internacional una cara pseudo democrática, considera Salamanca. “También está evaluando el comportamiento electoral opositor durante la postergación del RR: si se desmoviliza o desmoraliza abre el juego y aprueba el referendo, si el electorado mantiene la determinación de votar, cerrará el revocatorio”.

No se debe perder de vista que el gobierno no quiere elecciones, evalúa Salamanca.  El proceso político para evitar la remoción de Maduro continuará. Quizás algún sector del chavismo pretenda sacarlo, pero el costo de perder el RR es más alto que el costo de mantenerlo en el poder. En Venezuela está amenazado el principal componente de una democracia: que sus ciudadanos puedan elegir libremente a sus gobernantes. Si se niega ese derecho, estamos hablando de dictadura. Ya estamos navegando en las aguas turbulentas que separan la democracia y la dictadura”.

¿Y si no se llega al 20 %?

Frustración, desmotivación, rabia. De acuerdo con el analista Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, eso es parte de lo que se generaría en la población si la oposición no logra que 20 % del padrón electoral pueda declararse a favor del referendo revocatorio contra Nicolás Maduro.

En la misma línea va Héctor Briceño, jefe del área sociopolítica del Centro de Estudios del Desarrollo (Cendes) de la Universidad Central de Venezuela. Para él, una derrota de la oposición sería el peor escenario para el país, ya que estima que al menos 6 millones de venezolanos saldrán a la calle a apoyar la propuesta de revocatorio, que solamente necesita la mitad para llevarse a cabo.

Para el experto, sin la posibilidad de un RR Venezuela se expondría todavía más a la ingobernabilidad, que ya está presente y continúa su ascenso en el país a raíz de los problemas políticos y sociales por los que atraviesa. El hecho de que no se pueda recolectar el ansiado 20 %, por los obstáculos que se prevé que imponga el chavismo, podría ser el detonante de una reedición de “La salida”.

“Podría haber sectores que llamen a la calle y se repetirían exponencialmente las protestas de 2014. Si en aquel momento, la situación se presentó en 17 municipios del país, ahora podría hacerlo en 50 o 100 municipios”, advirtió.

Ante tal escenario, continuó Briceño, “no solo pierde la oposición, sino el país, y el chavismo muy especialmente puede seguir perdiendo por un comportamiento inaceptable”.

“En esas condiciones, la Fuerza Armada estarían en un aprieto aún mayor. Hasta ahora, la institución ha logrado resolver sus problemas dentro, pero la situación podría obligarlos a tener que resolver sus problemas afuera (…) Ya no es suficiente repartición de privilegios y dólares dentro de la FAN para solventar y acallar lo que pasa. Ahora hay mucho descontento”, indicó.

Advirtió Briceño que la oposición tiene vínculos débiles con los militares y que, ante un golpe de Estado, quienes actuarían serían los uniformados, los colectivos insatisfechos y los sectores del chavismo que no están contentos. Recordó que quienes adversan al gobierno, después de 2002, han hecho un esfuerzo por desvincularse de sectores antidemocráticos.

¿Renuncia?

La renuncia de Maduro también es una reacción posible, según el experto. El hecho de que el Presidente deba someterse a un referendo revocatorio, o esté en una situación de absoluta ingobernabilidad, sepultaría por completo al chavismo, que tomaría esta como una salida.

“La ventana para esa renuncia es muy pequeña, es la que tiene menor probabilidad estadística, y eso abre dos dilemas en la política: por un lado, el gobierno sabe que está perdido (…) Entonces, buscaría salir del poder sin perder la cabeza, sin terminar en La Haya o en Estados Unidos por juicios contra el tráfico de drogas. Por otro, la oposición tendría que gobernar a Venezuela en los próximos años asegurándose de no perder las elecciones de 2019. Todo eso lo resuelve un pacto político. Por ahora, el revocatorio no lo resuelve», apuntó.

El otro escenario, aún más improbable que el de la renuncia, es el aumento sin precedentes de la represión militar. Sin embargo, Briceño desestimó que la FAN quiera asumir ese papel.