Sin piedad. Los reclusos de la cárcel de Tocorón ordenaron doblegar a la familia Armas Castillo porque se negaba a pagar la vacuna correspondiente por la administración de un ciber en Tocorón. No cumplieron, se negaron y los reos le prendieron fuego a uno de sus hijos: Eglis Maylis, de 14 años.
Las amenazas contra la familia comenzaron hace un mes. «Siempre llamaban a la casa. Juraban que matarían a uno de nosotros sino pagábamos por tener el ciber», recordó un familiar en la morgue forense.
Los Armas no le creyeron a los reclusos y a comienzos de junio atacaron a la adolescente frente a su residencia. La raptaron y a las pocas horas la encontraron en llamas, en una zona aledaña al sector Tocorón, en el estado Aragua. Tenía 50% de su cuerpo con quemaduras.
Con ayuda de los vecinos, los familiares trasladaron a la jovencita hasta el Hospital de Maracay. Allí permaneció tres días hasta que le encontraron un cupo en la Unidad de Quemados del Hospital Universitario. Agonizó hasta el pasado viernes en la mañana, se complicó y falleció.
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