SE APAGA UNA LUZ DE HUMOR Y SENTIR VENEZOLANO - Runrun

CON LA MUERTE DE MANUEL GRATEROL SANDANDER, llanero de pura cepa de tierra criolla de Acarigua, se apaga una luz mas que de humor de venezolanidad. Un hombre con amplia experiencia creativa que lo llevo a surcar desde la poesía hasta el humor pasando por el periodismo y la publicidad. Lo conocí por los 60 cuando era una de las piezas claves de “El Gallo Pelón”, una revista de humor que cada semana con picardía recogía las firmas de Lumute, Fonseca, Sancho, Muñoz y Graterolacho por mencionar algunos de su equipo.

Manuel, que siempre gustó y disfrutó de la política, tuvo sus veleidades copeyanas y fue así que en las campañas de Caldera y Luis Herrera siempre colaboró con su ingenio  . Fue publicista en grande cuando hasta una agencia de publicidad montó con un par de amigos. Muchas son las piezas de televisión comercial que mostraron su verbo y sus rimas.

Nos topamos luego en Radio Capital cuando de la mano de Luis Muñoz Tebar, Pedro León Zapata y Juan Manuel La Guardia crearon el semanario de humor de El Nacional bajo el título El Camaleón. Luego ese proyecto fue llevado a Televen y gozó de popularidad por algún tiempo. Antes había estado Graterolacho en aquella importante Cátedra del Humor que en la UCV bastante aplausos captó y hasta llevo, en broma, un candidato presidencial en su nombre: Zapata, quien «luego se retiró de la contienda porque podía ganar»

Ingenioso y ocurrente llego a dirigir el diario El Nuevo País donde colaboraba con sus rimas así como en otras publicaciones que dejaron conocer sus ocurrencias.

Amigo de sus amigos, junto a Simón Díaz y otros creativos musicales, disfrutaba invitando a su casa en Tanaguarena que luego se llevó el deslave de 1999.

Jóven de alma y de galerones, buen hombre del humor, caballero de la amistad. Pocas palabras para tanta genialidad. A lo mejor nos manda sus twits desde el Cielo.

Adiós @Gaterolacho

-Foto cortesía de Estampas: El Universal