¿Recuerdan el vídeo de Mario Silva? Aquel en el que aparece “rindiéndole informe” a un coronel cubano, el que maneja (ba) el espionaje y la “contra-inteligencia” intervencionista del gobierno de Cuba en Venezuela. Mucho de lo que allí dice y confiesa tiene el valor de que fue dicho “en privado”. Sin saber que lo vería el país. No está “maquillado” para el consumo público. Le transmite a sus jefes extranjeros opiniones e informes. En fin. Hay un pasaje en el que le dice al militar cubano que “mi Comandante Fidel me dijo a mí en una oportunidad, que él no entendía por qué aún Chávez no había terminado con las elecciones burguesas porque el pueblo se equivocaba…”. En el lenguaje de ellos “elecciones burguesas” quiere decir: “elecciones populares, mediante voto universal, directo y secreto”. En otras palabras donde el voto de todos va directo a elegir gobernantes. Recordemos que en Cuba hay unas “elecciones” (¿?) de tercer grado, donde los votantes eligen a unos diputados pero todos los candidatos en cada circuito son preseleccionados previamente por el partido Comunista de entre sus militantes. Je je. O sea…
En la propuesta de reforma constitucional de 2007 (derrotada por el pueblo venezolano) existía un capítulo dedicado a crear “el poder popular” mediante consejos de fábrica, consejos estudiantiles y comunas. La clave estaba en el artículo que rezaba: “Este (el poder popular) no nace del sufragio ni de elección alguna, sino que nace de la condición de los grupos humanos organizados…”. Es decir, allí estaba Chávez tratando de implementar lo que Fidel exigía de “eliminar las elecciones” (burguesas) o sea el voto popular, universal, directo y secreto. Y ahora la vuelta viene por “las comunas”, es decir, grupos designados “a dedo” y “controlados” por el partido y el gobierno que sustituirían a las alcaldías aunque de forma progresiva. Porque las alcaldías, igual que las gobernaciones son electas por voto popular, universal y directo.
Allí están los hechos. Como en Cuba, como fue en la desaparecida URSS y los países satélites de Europa del este. Como aún es en China y Corea del Norte, la “fase final” de ese modelo atrasado, reaccionario y antidemocrático de “socialismo” es eliminar el voto popular, universal, secreto y directo para sustituirlo por el “voto entre grupos selectos del partido”. O el voto en asambleas vigiladas y controladas. Con el mayor descaro lo llaman “democracias populares” justo cuando eliminan el voto popular libre.
Ciertamente, las elecciones en la Venezuela de estos años no son justas ni se dan en condiciones de igualdad. Terriblemente desiguales. Inaceptablemente desiguales para calificar de “democráticas”. Y sin embargo, Fidel –junto con el grupito “enchufado”- exige eliminarlas, sustituyéndolas por un falso “poder popular” controlado y por unas “comunas” manejadas desde el poder. El viejo dictador se da cuenta que hay un ADN cultural democrático en el pueblo venezolano que brota a cada momento. Igual que él, cualquier observador nota el marcado descenso popular oficialista entre 2006 y 2013. Y el crecimiento sostenido de la alternativa democrática a pesar de tantos obstáculos, abusos y ventajismo. A pesar de las trampas con fallecidos votando, dobles cedulados, mesas donde a la fuerza desalojan testigos y “aparecen” “votos rojos como arroz” con casi cero votantes ausentes. Ha sido una hazaña de tenacidad de la alternativa democrática en clave de Unidad, luego de los graves errores y del retroceso de la abstención estéril de 2005, crecer hasta ser mayoría, en tales condiciones de desventaja. Compitiendo contra el rival súper rico y ultra corrupto. Compitiendo contra el CNE y todas las instituciones. Con cada vez menos medios de comunicación independientes. Enfrentado mas y mas censura. Claro, también hay que decirlo, “ayudados” por un gobierno tan malo, corrupto, abusador e ineficiente que ha desilusionado a millones de sus antiguos partidarios.
Lo sorprendentemente curioso es que hay un grupito –minoritario, inexistente en pueblos, barrios y fábricas, que está ausente de las luchas sociales (ni le interesan) pero muy activo en internet y redes- que siendo opositores, coincide con Fidel en despreciar la fuerza del voto popular. Piden “condiciones” a unos “no-demócratas” que obviamente nunca las darán. Y por ello reaccionan llamando a “quedarse en casa”. Entreguismo con disfraz de rebeldía. Nada más estéril. En cada elección se empeñan en ayudar a Chávez y ahora a Maduro con su abstencionismo estéril. Estimulan la “desesperanza aprendida”. Usan como palanca la frustración de los “no-triunfos”. Alientan la creencia en “salidas mágicas” para acusar de “come flores” a quienes luchan y construyen paso a paso. La oposición democrática, que tiene virtudes y defectos, logros y carencias, debe gastar muchas energías en neutralizar a esa siembra de derrotismo y desesperanza. Aunque siempre minoritarios, esos grupitos “radicales de cafetín y teclado” muchas veces teledirigidos desde Miami, pero también con gente “de buena fe”, a veces logran aprovechar la ola de tristeza para restar lo suficiente, como en la elección de gobernadores e impedir triunfos. ¡Cuán útil y valioso para estas luchas de hoy habría sido tener a Andrés de gobernador en Bolívar!. Intransigente contra la corrupción. Con todo y las trampas –que las hubo- perdió por menos de 10 mil votos pero dejaron de votar unos 40 mil opositores solo en Ciudad Guayana. Eso pesó más que las trampas.
Con el auxilio de un CNE parcializado, hay un brutal ventajismo en favor del gobierno. Uso corrupto e ilegal, pero permitido, de los dineros y recursos públicos, mientras se persigue con saña, criminalizándolo, el escaso financiamiento que logra la oposición democrática. Uso de “cadenas” para proselitismo. Brutal presión para la autocensura a los medios privados que quedan. Censura total en el latifundio de medios públicos. ¡Hasta colocan a inaugurar “obras” a candidatos que no son funcionarios!. Circuitos organizados calculando ventajas para el oficialismo. Ya vimos, además, que la “auditoría” del CNE prohibió tajantemente abrir los cuadernos de votación en los que se podía comprobar si habían votado los 50 mil o mas fallecidos. O descubrir donde hubo “votos planos”. La lucha política democrática de estos tiempos es vencer no solo a un rival partidista, sino al Estado, a la gran corrupción, al poder económico boliburgués, a las instituciones e incluso al CNE. Todo al mismo tiempo. Duro, pero ya se llegó a 7 millones de votos y al 50% o un poquito más.
TIP 1: Leído en twitter: 1.- @amoleiro El chavismo está muy lejos de estar en un buen momento. Por mucho que fastidien a vendedores y bajen unos precios 2.- @amoleiro Si la oposición hace lo básico Y LA GENTE VA A VOTAR el resultado del 8-D puede ser excelente 3.- @ChuoTorrealba El gobierno no busca votos que sabe inexistentes. Busca promover abstención para hacer valer la ventaja de la maquinaria 4.- @ChuoTorrealba “En la Alcaldía Metropolitana de Caracas la ventaja de @alcaldeledezma sobre @VillegasPoljakE ronda los 30 puntos… En Valencia @miguelcocchiola le lleva 25 puntos de ventaja al abanderado del PSUV; En Barquisimeto @alfredoaramos supera por más de 15 ptos. En CcsLibertador diferencia entre @ismaelprogreso y @jorgerpsuv es inferior al margen de error. Ismael asciende. Jorge baja 2 ptos semanales Doy estos resultados para que se entienda el tamaño de la derrota que el oficialismo intenta evitar con su actual estrategia de violencia…”.
TIP 2: Maduro, copiando la “Noche de los Cristales Rotos” de los nazis de 1938, intentó cambiar la tendencia electoral, creando un “enemigo” que sería culpable de la inflación y la escasez. Disfrazarse de Robin Hood para tapar sus culpas en el desastre económico del país, pero también para desatar el caos y la anarquía, cosa que logró parcialmente pero sin alcanzar un punto de caos suficiente que le justificara suspender las elecciones mismas. Ha hecho de todo y hará más. Es obvio que una derrota electoral en las municipales tendría un enorme significado político. Y todavía, con tanta evidencia, hay quien, con supina mala fe, cree que es “una tontería” esta batalla electoral y pretenden despreciarla hablando con suma falta de escrúpulos de “andan buscando unos carguitos de alcaldes”. Uff!.
TIP 3: El 8-D en la noche. El resultado político hay que medirlo. 1.- La votación totalizada nacional. ¿Quién obtuvo más votos populares? 2.- El triunfo en las alcaldías de más peso político y poblacional. 3.- La cantidad de alcaldías para uno y otro. 4.- Alcaldías cuyo resultado es significativo por algunas razones “cualitativas”.
TIP 4: Defender la voluntad popular. Un triunfo significativo, no solo tiene un hondo significado político, sino que crea la barrera de la voluntad popular contra el intento de imponer las “comunas controladas y manejadas” para liquidar al voto popular, universal y secreto para autoridades locales. Además, esos alcaldes y concejales serán arietes de lucha para ayudar a las comunidades que luchan y protestan. ¡Que nadie se quede en casa! Es mucho mas que “ir a votar”. Es el voto activo y la participación antes, durante y después. En el evento electoral y en las luchas sociales.
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