¿Y qué será de la vida del ministro Jesse Chacón? por Manuel Malaver
Sea porque no cumplió su promesa de superar el problema eléctrico nacional en 100 días, o porque el gran apagón del 3 de septiembre lo sorprendió en una visita (¿de placer?) en La Habana, o porque una semana después el presidente Maduro intervino Corpoelec dejándolo “técnicamente” sin trabajo, lo cierto es que el ministro para la Energía Eléctrica, Jesse Chacón, no ha vuelto a abrir su boca, como si se lo hubiera tragado la tierra o la revolución.
Actitud inusual en un político que, desde que fue llamado a la administración pública por el difunto presidente, Cháve, (por allá en los tempranos 2000), le tomó el gusto a lucirse frente a las cámaras, no siendo raras las oportunidades en que polemizó con opositores e insultó periodistas.
Fue el estilo que trajo a su estreno como flamante ministro de la Energía Eléctrica, minimizando la enorme crisis energética nacional diciendo que era más bien un problema de “tarifas” que “de producción y distribución”.
Pues bien, pareciera que fue la realidad de los apagones que no cesan -y más que cualquier otro, el del 3 abril-, lo que convenció a Chacón de lo contrario, quien luce ahora, quizá no tan empeñado en resolver la crisis eléctrica, como en diseñar un sistema de “cortes de luz racionados”.
En otras palabras: que si Jesse Chacón debe estar a alturas convencido de algo es que, con “el socialismo no se puede”, pero que como de trata de un dogma oficial, lo mejor es no contradecirlo y administrarlo tolerablemente.
Ya hay una suerte de “libreta de racionamiento de luz” en el país, como también sucede con los alimentos y pronto seremos otra Cuba donde la poca energía que existe se reparte de apagones bien distribuidos o de alimentos por pedacitos.
Por Manuel Malaver / El Diario de Caracas
@MMalaverM