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La Nación: “Pero tenemos patria”, el latiguillo para tapar errores y carencias

Zea
Hace 11 años

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Como si fuera un arma, el oficialismo y la oposición apelan cada vez más al concepto

 “Patria son tantas cosas bellas”, canta Rubén Blades en su famoso himno panamericano. “Son las paredes de un barrio, es su esperanza morena, es lo que lleva en el alma? La patria es un sentimiento”, prosigue el cantante panameño. Menos en Venezuela, un solo país que en su interior alberga, como pocos, dos patrias distintas.

La patria se convirtió en un objeto arrojadizo que se lanzan oficialistas y opositores sin contemplaciones y siempre que pueden. “Señora, no hay azúcar”, le anunciaba esta semana un vendedor del caraqueño barrio de Santa Mónica a su cliente. “¡Pero tenemos patria!”, contestaba con sorna la mujer, ironizando una de las frases más utilizadas por Hugo Chávez, convertida hoy en un símbolo por la revolución.

Tanto es así que la canción “Patria querida” (“patria, patria, tú eres mi vida, tú eres mi alma, tú eres mi amor”), cantada por el comandante antes de partir en su último viaje a Cuba, también se transformó en un himno para los bolivarianos.

Elías Jaua, canciller y gobernador paralelo en Miranda, a espaldas de Henrique Capriles, se atrevió incluso a jactarse con la frase que más se repite en las tiendas del país después del famoso “No hay”.

“¿Ustedes quieren patria o papel higiénico?”, retó Jaua ante su auditorio chavista, que no dudó en decantarse por lo primero. “La patria no se mide en un supermercado, sino en la conciencia de los hombres y mujeres que habitan una nación”, redondeó el canciller.

“¡Tenemos patria bolivariana, que nadie se equivoque!”, arenga Nicolás Maduro. “Estamos jodidos, pero tenemos patria”, le critica Capriles.

Los tomas y dacas con respecto a la patria y sus circunstancias están tan presentes en la Venezuela de la crisis que un nuevo programa, que “sale en el único canal que el gobierno no pudo comprar, cerrar o censurar [YouTube]”, según su presentador, se transformó en una joya mediática en sólo tres capítulos.

El nombre elegido por sus productores no podía ser mejor: Pero tenemos patria.

Fuente: La Nación

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