Cualquier persona que transite por las calles de Caracas se puede dar cuenta que los motorizados son realmente las personas que mandan en la capital. Estos señores son verdaderamente los amos de la ciudad. El estrés y las responsabilidades diarias nos han llevado a nosotros como ciudadanos a acostumbrarnos a situaciones que no son ni normales, ni legales ni mucho menos racionales.
En Caracas, por ejemplo, es absolutamente normal ver a un motorizado: manejar por la acera, manejar en contrasentido, irrespetar un semáforo, tumbar un retrovisor, discutir e insultar a los conductores, patear a un carro, hacer piruetas en plena calle y hasta ignorar a la policÃa.
Y ese es precisamente el problema: la impunidad. Un motorizado puede hacer en Venezuela lo que le da la gana y la respuesta de las autoridades es prácticamente nula. El clásico ejemplo lo vemos a diario en la autopista. Cambiarse de canal en la autopista francisco fajardo en hora pico es un reto complicado, debido a la cantidad de carros es muy probable que la persona que se está intentando cambiar quede en el medio de los dos canales y cuando esto sucede los motorizados se sienten ofendidos e irrespetados y en consecuencia viene un insulto y un golpe al carro.  Por si fuera poco, si alguna persona tiene la mala suerte de chocar con ellos la respuesta del motorizado será inminentemente violenta hasta que llegue la policÃa. Una vez que esto sucede, los motorizados siguen tranquilamente por su camino.
El ataque violento de un motorizado seguido por la incapacidad de las autoridades para hacer algo al respecto se vive a diario en Caracas. Esta pesadilla le tocó esta semana a una señora con su hija de 5 años en el Municipio Libertador, donde un grupo de motorizados estaba realizado una protesta. Para no quedar atrapada en la protesta, cosa que a cualquier persona le aterrarÃa, la señora aceleró su carro pero impactó en el proceso a 3 motorizados. En vista de eso, estos señores bajaron a la señora del carro y literalmente le destrozaron el carro.
El venezolano está tan cargado de noticias negativas que son pocas las cosas que nos sacan de nuestra zona de confort. Lamentablemente hemos perdido la capacidad de asombro y hechos como el relatado anteriormente son simplemente una noticia más del dÃa. Sin embargo, esto no quiere decir que lo ocurrido no sea grave.
Es inaceptable que las autoridades no utilicen todo el peso de la ley contra estas personas que cometen delitos las 24 horas del dÃa. Es lamentable que los caraqueños tengan que manejar y vivir con miedo porque las respuestas de estos señores son siempre violentas. Y es triste que las personas que manden en la calle sean unos individuos que desconocen la palabra respeto y se creen que están por encima de la ley.
Venezuela tiene muchos problemas, es verdad, pero este hace que cada vez que nos montemos en el carro nos sentamos más inseguros y más indefensos.
