Un billón de dólares. Eso es lo que algunos estudios calculan que recibió Venezuela durante los años de la bonanza petrolera, monto más que suficiente para que el país contara hoy con unas infraestructuras y unos servicios de primer mundo, pero eso no es así y por ello expertos en la materia aseguran que para que abrir las puertas a la reconstrucción física de la República es necesario revocar al presidente Nicolás Maduro.

“Los servicios públicos están en la crisis más profunda de la historia. Las empresas de servicios públicos han sido destruidas, han perdido su capacidad técnica para dar respuesta a las demandas de los ciudadanos y por ello se hace necesario reconstruirlas, pero ello no es posible con este Gobierno, quien ha sido precisamente el que las ha destruido”, afirmó José María De Viana, expresidente de Hidrocapital y de Movilnet.

En similares términos se pronunció el presidente del Colegio de Ingenieros de Venezuela, Enzo Betancourt, quien afirmó: “El revocatorio es la primera luz que señalará a los venezolanos que se puede reconstruir el país, dará confianza y fortalecerá la democracia, en fin puede ser el comienzo para hacer de este país una potencia”.

Consultado sobre el legado que dejarán los gobiernos de Hugo Chávez y de Nicolás Maduro en materia de infraestructura, el dirigente gremial no dudó en calificarlo de “desastre”.

“No se compaginan los ingresos recibidos frente a lo que se ha hecho”, dijo, al tiempo que aseguró que los fondos que manejaron las autoridades en estos años eran más que suficientes para que Venezuela tuviera hoy infraestructuras equiparables a países como los Emiratos Árabes Unidos, el cual en estos años ha levantado el edificio más alto del mundo, uno de los aeropuertos más grandes y su sistema de metro está totalmente automatizado, es decir no requiere de pilotos.

“Venezuela podría tener hoy infraestructuras incluso mejores que las de Dubai porque aquí había más personal calificado, pero en cambio hoy tenemos una red eléctrica deteriorada y no tenemos fuentes de energía alternas para enfrentar coyunturas como la actual sequía. También tenemos unas carreteras sin mantenimiento, hospitales derruidos y menos liceos y escuelas de los que se requieren”, se quejó el ingeniero, quien afirmó que una de las primeras labores del nuevo Gobierno será auditar lo que se hizo los miles de millones de dólares que supuestamente se destinaron a infraestructuras.

Por su parte, al consultarle a De Viana sobre los motivos de las actuales autoridades para querer destruir a las empresas de servicios públicos replicó: “Hidrocapital o Edelca eran símbolos de la república civil, con personal altamente cualificado y en su afán por borrar todo lo del pasado y controlar las purgaron y las destruyeron”.