No eres tú, soy yo, por Brian Fincheltub
No eres tú, soy yo, por Brian Fincheltub

Bolívares9

 

Tú eres el producto de esas relaciones arregladas que están condenadas al fracaso porque desde el principio empiezan mal. Yo quise seguir contigo porque mi padre así lo habría querido y bueno, como todo el mundo lo sabe, yo no soy capaz de asumir que él se equivocó, porque eso sería una traición a su memoria. Eso es lo que me dicen los demás y yo les hago caso. La seguridad no es una de mis cualidades, si es que tengo alguna.

En honor a la verdad la gente nunca te miró con buenos ojos, sabían que eras de esos galanes que no valen nada, que son pura pinta, pero yo también hice todo lo que pude para que tu fama empeorara. Te volví nada, acabé contigo, con la reputación que una vez tuviste, cuando ni siquiera te hacías llamar «el fuerte».

Te condené a muerte y ahora la gente menos te quiere, te rechaza, te mira con repulsión. Mientras tanto yo, que amenace que esto terminaría pronto, me empeño en seguir dándole largas al asunto, por cierto, luego que obligué a todo el mundo a que se despidiera de ti a la fuerza.  

Tú te preguntarás a qué se debe tanta palabrería y tengo la obligación de decirte que, más que labia, que sabes muy bien tengo menos que tú algún tipo de valor, esto es un acto de sinceridad.

No eres tú billete de cien, soy yo y te confieso algo… pasará lo mismo con quien venga, porque está probada mi completa incompetencia para hacer algo medianamente bien, con éxito, que se traduzca en resultados positivos. Por ahora le doy una oportunidad más a nuestra relación, sin saber en qué terminará porque en realidad yo tampoco sé lo que quiero.

Atentamente,

El destructor de la patria.