Matan a supuesto secuestrador de comerciante - Runrun
Matan a supuesto secuestrador de comerciante

José Oswaldo Mendoza Valero, de 47 años de edad, era un comerciante, de esos conocidos como “los gochos”, que se dedican a vender frutas y hortalizas cosechadas en las montañas de los estados andinos, particularmente en Trujillo.

A mediados de febrero pasado, tal como lo venía haciendo desde hace varios años, viajó desde el sector Montero, municipio Urdaneta del estado Trujillo, hacia Caracas, con su camión cargado de verduras para comercializarlas, pero, misteriosamente, sus familiares perdieron todo contacto con él.

El 18 de febrero de 2024, recibieron una llamada telefónica, en la que les informaban que había sido secuestrado y que sería liberado a cambio de 20 mil dólares. La familia esperó una segunda llamada que nunca llegó.

El 19 de febrero, denunciaron el secuestro ante el Cicpc. Ese mismo día, los familiares viajaron a Caracas para buscarlo. Pero recibieron la noticia que nadie quiere escuchar: el cuerpo sin vida de José Mendoza había sido localizado en una zona boscosa del sector Altos de Pipe, en el sector Telares de Palo Grande, Caricuao, y que sus restos estaban en la Morgue de Bello Monte.

Días más tarde, el 28 de febrero, Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, informó a través de su cuenta de Instagram (@DouglasRicoVzla) que el caso habría sido resuelto.

El jefe de la policía científica, a través de su canal usual de información en la red social, dijo que el secuestro fue planificado por una banda integrada por Robert Pineda (fallecido); Joandry Leonardo Contreras Machado (25), apodado ‘Junior’; Trista Asdrúbal Martínez Montilla (23) y otro hombre apodado ‘Brayan’.

Informó, además, que Robert Walfred Pineda Marcano, uno de los presuntos secuestradores, resultó muerto en una operación realizada por el Cicpc en el bloque 7 de la UD5 de Caricuao, donde residía.

Supuestamente, al percatarse de la presencia de las comisiones, Pineda Marcano se habría enfrentado a tiros y resultó herido, murió cuando era trasladado a un centro asistencial. Los funcionarios incautaron el arma de fuego usada en el enfrentamiento.

Sin embargo, familiares y vecinos de Robert Walfred Pineda Marcano negaron la versión de que fuese un secuestrador, así como de que se hubiese enfrentado a las comisiones del Cicpc.

La versión del Cicpc

Douglas Rico afirmó que la banda, además, contaba con la participación de una joven, a quien identificó como Francis Misel Hernández Terán (21), quien tendría una relación sentimental con Robert Pineda Marcano, y quien servía como señuelo para atraer a comerciantes. Luego, la joven los llevaba, supuestamente, a lugares apartados, donde eran dominados y secuestrados.

Rico dijo que en el caso de José Oswaldo Mendoza Valero, los secuestradores, al parecer, no consiguieron lo que querían, por lo que terminaron asesinando de múltiples disparos al comerciante de verduras.

Finalmente, el jefe policial informó que las pesquisas continúan con la intención de ubicar y detener a Joandry Leonardo Contreras Machado, Trista Asdrúbal Martínez Montilla, Francis Misel Hernández Terán y la persona de la que solo se conoce su apodo ‘Brayan’, quienes se encuentran en situación de fuga.

Poco común homicidios por secuestro

El asesinato del comerciante José Oswaldo Mendoza Valero y la muerte de Robert Walfred Pineda, uno de los supuestos secuestradores, se agregan a los 117 homicidios ocurridos en la parroquia Caricuao en los últimos siete años, de los cuales 11 ocurrieron en 2023 y uno, este año, según datos recopilados por Monitor de Víctimas.

Según esta data, la violencia policial ha sido la principal causa de muerte en la popular parroquia capitalina. De la cifra de muertos durante el período analizado, se observa que, por lo menos, 41 personas murieron en casos, calificados por familiares o allegados de las víctimas, como supuestas ejecuciones por funcionarios policiales o militares. A esas víctimas deben agregarse los 11 casos de presuntos enfrentamientos con policías. En total, al menos, 52 personas murieron en hechos vinculados con los organismos de seguridad.

“Las muertes a determinar” ocupa la segunda posición en el listado, con 26 casos, cuyo móvil no fue precisado por la policía o por familiares. Le siguen los robos, con 21 muertes, y los ajustes de cuentas ocupan la quinta posición, con 8 casos registrados.

Luego, están las riñas, con 3 casos; enfrentamientos entre bandas y abuso infantil, con 2 casos cada uno y, finalmente, crímenes de odio, violencia de género y sicariatos, con 1 caso cada uno.

El móvil de secuestro es uno de los menos habituales en la violencia capitalina. Un total de 16 personas fueron asesinadas bajo ese motivo, en los últimos siete años documentados por Monitor de Víctimas; ninguno había sido registrado en Caricuao.

@carlos_dhoy