La renuncia de Ramón Guillermo Aveledo a la secretaría de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) enciende un nuevo debate en el seno de la alianza opositora venezolana sobre su reemplazo. Aún se desconoce el método de escogencia, pero ya se barajan tres nombres para convertirse en el número uno de la oposición.
El primero es Henri Falcón, gobernador del estado Lara, quien tras abandonar las filas del chavismo en 2010 fundó su propio partido (Vanguardia Progresista) y pasó a ser la mano derecha del excandidato presidencial, Henrique Capriles Radonski en 2013.
El segundo es el alcalde del municipio Baruta del estado Miranda, Gerardo Blyde, quien milita en Un Nuevo Tiempo y es identificado con el sector más conservador dentro de la coalición opositora. Del otro lado figura el alcalde metropolitano, Antonio Ledezma, en representación del sector radical que encabezan Leopoldo López, coordinador de Voluntad Popular y la exdiputada María Corina Machado, quienes llevaron adelante la propuesta de “La Salida”, una serie de protestas políticas orientadas a sacar del poder a Nicolás Maduro.
De momento, Cristóbal Fernández Dalo asumirá la Secretaría Ejecutiva temporalmente. Algunas fuentes creen que debería escogerse una figura independiente, mientras que otros sostienen que sea rotativa, de períodos cortos, aunque algunos la descartan porque perdería mediador.
Esteban Oria, presidente de la Federación de Politólogos de Venezuela, señaló a Falcón como el nombre más razonable para sustituir a Aveledo, dado que la oposición busca una transición que guarde similitudes con el chavismo para minimizar la resistencia al cambio en el futuro próximo.
Por su parte, el analista político, Jorge Millán, cree que el perfil del reemplazo a Aveledo debe ser una persona capaz de consolidar las distintas fuerzas y visiones políticas que convergen en la MUD para avanzar en un proceso de consenso opuesto al Gobierno.
Presiones radicales
La renuncia de Aveledo desconcierta, porque se da días después de que los partidos que conforman la alianza realizaran una “encerrona” para limar las asperezas surgidas en los últimos meses producto de los diferentes puntos de vista que se manejan sobre el camino a seguir de ahora en adelante.
“En los últimos meses, una campaña sañuda se ha desarrollado contra la Unidad, y se ha escogido a fin de golpearla, disparar contra la credibilidad de su vocero. Empezó en los laboratorios del poder arrogante y la insensatez la acogió”, dijo Aveledo en su alocución tras agregar que no quiere contribuir a la discordia dentro de la MUD.
Henry Ramos Allup, secretario general de Acción Democrática, apuntó que son conocidas las razones que motivaron la salida de Aveledo. “Hay factores que siguen destruyendo sin crear. Aveledo fue víctima de quienes le infamaron con un laboratorio sucio”, manifestó.
Una fuente vinculada a partidos opositores sostuvo que la salida de Aveledo fue impulsada por sectores radicales dentro de la MUD como María Corina Machado y Voluntad Popular. Oria confirma esta tesis al asegurar que el desplazamiento del poder del otrora secretario general unitario afecta a factores conciliadores como Primero Justicia o Acción Democrática.
Oportunidad y amenaza
Además, con la renuncia de Aveledo se pierde toda posibilidad de conexión entre la MUD y el Gobierno en un país polarizado, pues su perfil era el de un hombre conciliador, que buscar unir los puntos en común para lograr un entendimiento, señala Oria. “Muy pocos personajes están a la altura ideal para combatir la torpeza del Gobierno”.
El politólogo sostuvo que la oposición debe evitar cualquier división innecesaria por este asunto. “Si entran en una carnicería interna causará un daño estructural grave”, en un momento en que se abren las puertas para la renovación de sus instancias y la incorporación de nuevos sectores ajenos a los partidos políticos, que claman instancias donde sean escuchados.
Por su parte el gobernador de Miranda, señaló que frente a las diferentes visiones, la separación de Aveledo «nos llama a decidir qué tipo de política queremos hacer. La unidad entró en un proceso de debate y decisiones, que ya está en marcha». Capriles no descarta una reorganización y reagrupamiento de las fuerzas opositoras.
