Ramo Verde archivos - Página 4 de 25 - Runrun

Ramo Verde

Foro Penal denunció desaparición forzosa de 10 personas luego de masacre de El Junquito

foropenal

Directivos del Foro Penal denunciaron este jueves la desaparición forzosa de 10 personas en los últimos días tras la operación realizada contra el ex policía Óscar Pérez en la parroquia El Junquito en Caracas.

Los abogados Gonzalo Himiob y Alfredo Romero explicaron que manejan los casos de esta forma porque las autoridades no han informado el lugar de reclusión de estos ciudadanos en caso de que estén detenidos.

Aseguraron que al menos 21 personas fueron aprehendidas por el caso del ex inspector del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc). 7 ya fueron identificadas por el ministro de Interior Justicia y Paz, Néstor Reverol, en una rueda de prensa el 16 de enero y se encuentran privados de libertad en la cárcel militar de Ramo Verde.

Romero exigió que se permita a los familiares y abogados el acceso a las pruebas forenses realizadas para determinar si se realizó una ejecución.

«Para la certeza de la situación un experto independiente debe evaluar lo ocurrido», señaló el abogado.

Tribunal Militar dictó privativa de libertad contra fotógrafo Héctor Pedroza

fotografo

Un Tribunal Militar dictó este lunes privativa de libertad contra el fotógrafo Héctor Pedroza, quien fue detenido el pasado 27 de diciembre en Maracay por funcionarios del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas), luego de difundir imágenes de una protesta en el estado Aragua.

El reportero gráfico fue acusado por los delitos de supuesta instigación a la rebelión y terrorismo y será recluido en la cárcel de Ramo Verde, según el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa.

Transcendió que Pedroza fue sacado de su casa sin orden judicial alguna.

 

 

Privado de libertad el productor audiovisual Héctor Pedrosa

Ramo-Verde

 

El director de Foro Penal Venezolano, Alfredo Romero, informó que el productor audiovisual, Héctor Pedrosa, será recluido en la cárcel de Ramo Verde tras ser privado de libertad por el Tribunal Militar tercer de control de Caracas y acusado de instigación a la rebelión y terrorismo.

Pedroza fue detenido este martes por su presunta participación en la realización de la película Muerte Suspendida, en la que aparece el exfuncionario del Cicpc, Oscar Pérez, quien se sublevó contra el gobierno de Maduro.

 

Theresly Malavé: De no ser liberados policías metropolitanos pasarán 15 navidades presos y sin sus familiares
Ramo-Verde
Los funcionarios de la Policía Metropolitana, presos desde el año 2003, cumplirán este diciembre 15 navidades en la cárcel militar Ramo Verde.
“Los funcionarios de la Policía Metropolitana Marcos Hurtado, Héctor Robain, Arube Pérez Salazar, Luis Enrique Molina y Erasmo Bolívar llevan 14 años detenidos en la cárcel militar Ramo Verde. Tener todo este tiempo preso pagando una condena, algunos de 30 años y otros de 16 y 17 años, implica 14 navidades sin estar con sus familias”, denunció la abogada Theresly Malavé.
En el caso de Marcos Hurtados y Arube Pérez Salazar, ya tienen la pena prácticamente cumplida porque ellos durante todo este tiempo han trabajado y estudiado. “Lo que genera según nuestras propias leyes la redención de la pena. Ellos ya deberían estar en libertad, pero pareciera que será otra Navidad que estarán presos con condiciones de salud mermada”, denunció la abogada.
Malavé destacó que Venezuela espera para los funcionarios de la Policía Metropolitana no un regalo ni la piedad del gobierno sino el cumplimiento de la ley. “Si el gobierno cumple la ley todos los PM saldrían en libertad por las fórmulas alternativas del cumplimiento de las penas. Eso lo debe ejecutar el juez que lleva la causa que es el 1ero de ejecución del estado Aragua que hasta el momento no se ha pronunciado sobre todas las solicitudes que le hemos hecho por las libertades que les corresponden a los funcionarios de la policía metropolitana”, concluyó.

 

2017: el año en que más se ha pisoteado la libertad de expresión

OTRO MEDIO DE COMUNICACIÓN SE SUMA a la larga lista de los que han tenido que bajar la “santamaría” este año por presiones del gobierno, por problemas presupuestarios o incluso por ambos. En esta ocasión le tocó al diario Tal Cual, el cual despide a su versión en papel para quedarse únicamente con la digital.

Tal Cual es el quinto medio impreso que sale de circulación indefinidamente en 2017, luego que lo hicieran el Correo del Caroní, La Nación, El Impulso y La Verdad.

A este grupo de periódicos que dejan una considerable cifra de personas sin empleo, hay que agregar a otro tanto que han detenido su circulación parcialmente por escasez de material.

Según la organización no gubernamental Espacio Público, hasta finales de septiembre de este año 17 medios impresos han dejado de circular parcial o permanentemente, ocho canales de televisión salido del aire y 49 emisoras del espacio radioeléctrico han sido apagadas. Aunado a ello, doce portales de información han sido atacados y periodistas encarcelados, robados, hostigados y amenazados, especialmente durante las protestas contra el gobierno de Maduro que se produjeron entre abril y julio.

A continuación un recordatorio de los medios y casos más emblemáticos de violación a la libertad de expresión en 2017:

1- CNN en Español, allá vamos: En febrero de este año, el gobierno venezolano a través de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), decidió “bajar la cuchilla” de CNN en Español luego que la televisora estadounidense con sede en Atlanta transmitiera un reportaje de investigación sobre la presunta entrega de pasaportes venezolanos a miembros de células terroristas vinculadas al Hezbollah, donde estaría involucrado el vicepresidente de la República, Tareck El Aissami,

La entonces canciller Delcy Rodríguez acusó a la cadena de promover “una operación mediática imperial” contra la administración de Maduro.

El gobierno a través de la Fiscalía nunca abrió una investigación al respecto, solo optó por bloquear la señal del canal fundado por el magnate Ted Turner.

Luego de instaurada la asamblea nacional constituyente el 30 de julio, las televisoras colombianas Caracol, RCN y El Tiempo TV salieron de las cableras supuestamente por la cobertura que le dieron a la presencia de la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, en territorio neogranadino.

Por otro lado, Conatel decidió enviar al limbo a la Televisora Cultural de Tovar (TCT) tras una sola visita, en la cual las autoridades argumentaron que no poseían los permisos correspondientes de transmisión.

“Lo que alega Conatel es la falta de documentación. Toda esa burocracia opaca se presta como un brazo institucional para restringir líneas editoriales, no hay transparencia para adjudicar ni revocar concesiones”, dijo Marisabel Rodríguez, coordinadora de Libertad de Expresión de Espacio Público.

2 – Cien por ciento libre: El viernes 25 de agosto a las siete de la noche, una comisión de Conatel ingresó a las instalaciones de 92.9 FM en Las Mercedes,  sacó de frecuencia a la emisora juvenil, se adueñó de las instalaciones y encendió “Radio Corazón llanero”. “Cerraron una emisora como 92.9, con la irreverencia de la juventud, el gobierno quiere promover una ley contra el odio, qué más odio que el del gobierno contra los periodistas”, dijo Tinedo Guia, presidente del Colegio Nacional de Periodistas.

El mismo día también salió del aire Mágica 99.1, otra emisora critica al gobierno con programas de opinión conducidos por periodistas como Marianela Salazar y José Domingo “Mingo” Blanco. “Todo empezó con una entrevista que le hice al abogado Juan Carlos Sosa Azpúrua en ‘La Hojilla’, me acusaron de propiciar una invasión gringa; nos dijeron que en nueve oportunidades habíamos entrado tarde a la cadena, luego de eso llevaron a los gerentes al Ávila y en sus narices los sacaron del aire”, dijo Blanco.

No conforme con borrar a la radio responsable de programas como “Rockadencia” y “El Monstruo de la Mañana”, Conatel también abrió dos procesos administrativos contra su hermana en la frecuencia AM, RCR, cuna de RCTV. La acción se produjo en vista de que la estación supuestamente no transmitió la cadena donde se hizo el lanzamiento del satélite Sucre y debido a que en el programa “La Linterna” se incitaba a emplear armas de guerra y arrojar excremento a las personas.

Hasta finales de septiembre de este año, 46 emisoras (44 en el interior y dos en Caracas) han sido afectadas de alguna u otra forma por Conatel según Espacio Público.También se han suscitado alteraciones en la programación de las estaciones por amonestaciones específicas, tal es el caso del espacio “Calma Pueblo” en La Mega 107.3 FM, que salió de circulación luego que sus conductores fueran amonestados por cuestionar a un menor de edad debido a sus preferencias políticas y llamarle homosexual, según lo expuesto por el ministro de comunicación, Ernesto Villegas.

Asimismo al periodista César Miguel Rondón, conductor de un magazine matutino en Exitos 99.9 FM, se le impidió la salida del país luego que el propio Maduro lo amenazara con meterlo preso y a Nelson Bocaranda de “La Cola Feliz” en la misma estación se le obligó a tomar unas “vacaciones”.

  1. Periodistas asesinados, heridos, encarcelados y robados: 2017 es el año con más agresiones a representantes de medios de comunicación en las últimas dos décadas. Hasta septiembre se habían contabilizado 145, teniendo el clímax en el marco de las protestas antigubernamentales, donde efectivos de seguridad fungían como los principales victimarios. Durante las marchas, 59 periodistas fueron detenidos por registrar o difundir información, además a 61 les robaron equipos o material, según se desprende de un informe de Espacio Público.

El periodista comunitario Carlos Julio Rojas fue apresado en julio y liberado mes y medio después de permanecer en la cárcel militar de Ramo Verde, acusándolo de portar presunto material explosivo. Tiene régimen de presentación cada 30 días y prohibición de salir del país.

En 2017 también han matado reporteros. Yolman Briceño, quien trabajaba en la emisora comunitaria Anamar 103.1 FM y con la diputada psuvista, Sumiré Ferrara fue asesinado en el estado Aragua. Previo a su homicidio había hecho denuncias sobre la muerte de su hermano, quien era funcionario de la Policía Municipal de Ribas.

A Alberto Cabrera y a Ángel Medina, periodistas de Voluntad Popular, les enviaron a la Penitenciaria Militar de Santa Ana en el estado Táchira por los delitos de rebelión militar, menosprecio a la Fuerza Armada y ultraje al centinela a finales de agosto. Siendo civiles fueron juzgados por un tribunal castrense en el estado Zulia.

“Con las protestas de 2014 se vieron tuiteros detenidos, medidas privativas de libertad de tres meses a un año. Ahora en 2017 pasamos a robos a periodistas, detenciones arbitrarias por parte de Guardia Nacional y Policía Nacional Bolivariana, info ciudadanos aprehendidos, perseguidos u hostigados”, declaró Rodríguez .

Pero el espiral de incertidumbre para ejercer la profesión no es exclusivo de los periodistas venezolanos. También los extranjeros han sufrido en carne propia la censura del régimen. Hasta finales de septiembre, 14 corresponsales han sido expulsados del país o se les ha impedido el acceso a las fuentes de información, una práctica que parece no tener fin en la extraña concepción del periodismo del siglo XXI en Venezuela.

Infobae: Hambre, represión y realismo mágico en la Venezuela de Maduro

Hambre_2

-¿A qué se dedica?
-Soy licenciado.
-¿Y qué viene a hacer?
-Vengo a participar de actividades culturales.

En lo que va de 2017, ya suman una decena los periodistas extranjeros que fueron expulsados o a los que directamente se les negó el ingreso a Venezuela. El Sindicato Nacional de Trabajadores de Prensa denunció que 376 periodistas fueron agredidos y 33, detenidos ilegalmente durante las protestas de este año en las calles de Caracas. Infobae está censurado por el régimen de Nicolás Maduro desde octubre de 2014 y solo se puede acceder al sitio a través de una VPN y una IP extranjera. Por todo eso, parecía sensata la recomendación de colegas y amigos previa al viaje: «Si quieres estar seguro de que vas a entrar, di cualquier cosa, menos que eres periodista».

Viajar hoy a la República Bolivariana no es sencillo. Primero, hay que encontrar un pasaje con una combinación de escalas lógica y a un precio sensato, después de que una docena de aerolíneas dejaran de volar a Caracas en el último año. Y una vez en el Aeropuerto de Maiquetía, lo dicho: al periodista le conviene ocultar su identidad o al menos hacerse el tonto.

Ahí estaba, entonces, parado ante la oficial de migraciones con mis medias verdades que levantarían las sospechas hasta de un niño de 5 años. La joven de camiseta crema me clavó la mirada durante un segundo que me pareció eterno, tecleó algo en su computadora mientras yo rogaba que no pusiera mi nombre en Googleme hizo otro par de preguntas zonzas más y finalmente selló el pasaporte y me dio la bienvenida con una media sonrisa.

Unos minutos después, ya estaba montado a un automovil que me estaba esperando y saltaba sobre un asfalto lleno de pozos camino a la que hace 40 años era una de las capitales más prósperas y desarrolladas de América Latina. Entre los carteles y graffitis con imágenes de Simón Bolívar, Hugo Chávez y Maduro que se sucedían a los costados, me quedó grabada una foto gigante del Presidente, abrazando paternalmente a una señora mayor, rubricada por la leyenda «Venezuela, indestructible».

Ese mensaje triunfalista me volvería a la mente a cada instante durante los días siguientes, a medida que iba tomando contacto con un país colapsado en todos los sentidos posibles, en el que un gobernante que es rechazado por entre el 70 y 80 por ciento de la ciudadanía, según todas las encuestas, se las arregla para seguir gobernando con puño de hierro después de 126 días de protestas en la calles y otorgarle la suma del poder público a una Asamblea Constituyente que terminará de dar vuelta el Estado y barrer con los últimos vestigios republicanos.

Durante la última semana, Infobae estuvo caminando las calles de Caracas, conversando con políticos, analistas, periodistas, comerciantes, diplomáticos y gente de a pie, tratando de comprender cómo se llegó a esta crisis y cuál puede ser la salida.

Aquí, unos primeros apuntes de una realidad que oscila a cada paso entre el drama y el delirio.

El hambre

Los puestos de perros calientes son un clásico callejero de Caracas. Pararse a comer una salchicha a la que encima se le coloca una montaña de repollo, cebolla, papitas ruffles, maíz, queso amarillo, salsa de tomate, mayonesa y mostaza, con las piernas abiertas para evitar mancharse, es una experiencia imperdible. Una tarde cualquiera, quien se coma el suyo y arroje al cesto de basura la servilleta con los restos de salsa y algún último maíz pegado, verá a un niño salir corriendo a rescatarla para lamer el envoltorio y pedirle el último sorbo de la lata de bebida. El hambre ya hace estragos.

Al caer la noche, son centenares los que salen a reventar las bolsas de basura en busca de algún alimento.

Dos meses después del último incremento, el Gobierno acaba de aumentar la última semana otro 40% el salario mínimo. Lo que sería una bendición en cualquier parte del mundo, en Venezuela es un drama. A fin de agosto, la inflación de 2017 ya había alcanzado un 366%, según los datos recopilados por el Parlamento desde que el Poder Ejecutivo dejó de difundir los datos mensuales en 2015.

Con este último aumento, el salario mínimo —que cobra el 75% de los venezolanos— llegó a 136.544 bolívares (6,8 dólares al cambio paralelo, que es la única manera de acceder a la divisa estadounidense) más otros 189.000Bs (USD 9,45) en tickets para la compra de alimentos a precios regulados (si es que se consiguen), lo que ubica a Venezuela, con el segundo peor salario mínimo de la región, solo por encima de Cuba.

Lo único absurdamente barato en Venezuela sigue siendo la gasolina, a 6 bolívares el litro. Con un centavo y medio de dólar (sí, USD 0,015) se puede llenar el tanque de un automóvil grande. Se sabe, el petróleo es la bendición y la condena de este país. En el subconsciente del venezolano está afincado que la gasolina es casi gratis. Maduro la aumentó algo el año pasado y fue un escándalo. Hoy no se animaría a hacerlo de nuevo.

hambrevzla1

Colas en cada esquina, sin garantía de nada

«No soy muy del arroz pero voy a ver si consigo algo», cuenta una señora de piel canela al final de la cola de unos 30 metros de largo que se formó en la puerta del supermercado Luz de Chacao, una zona de clase media. Es martes, y como su documento termina en 2, está habilitada para comprar alimentos a precios regulados. Pero no hay ninguna garantía. Si tiene la suerte de que el camión distribuyó algo hoy y aún queda algo cuando llegue su turno, podrá comprar un kilo de arroz a 6.000 bolívares (USD 0,3). Si no, deberá recurrir al mercado negro de los «bachaqueros», donde cotiza a 20 mil bolívares. «Venezuela está en la miseria. Antes no era así. Si se te acababa tu pasta dental, ibas y comprabas otra. Ahora ya no». La última la consiguió «en treinta mil bolos (bolívares)», pero no sabe qué va a hacer cuando se le termine: «Veremos. Yo tengo ya 67 años y vivo al día».

Todas las mañanas, se forman largas filas en la puerta de cada supermercado y farmacia de Caracas. La gente se junta para ver si ese día entregaron alguno de los alimentos y medicinas que vienen faltando hace meses. Las estanterías vacías son una constante aun en las cadenas administradas por el Estado, como Abasto Bicentenario, donde la escasez es supervisada desde lo alto por las gigantografías omnipresentes de Maduro, Chávez y Bolívar.

Por la tarde, las colas se trasladan a los cajeros automáticos. Con una moneda hiperdevaluada y una inflación galopante, el último faltante en la economía venezolana es el dinero en efectivo. Cada banco impuso su propio «corralito», que habilita a sus clientes a retirar un máximo de entre 10 mil y 25 mil Bs (USD 0,5 y 1,25) por día de los cajeros y otro tanto en las taquillas internas.

«Hoy cambié un cheque por 30 mil bolívares, retiré 25.000 con una tarjeta y ahora voy a sacar aquí otros 10 mil más en este cajero», contó a Infobae Delvis Reina en la puerta del Banco Venezuela. A ese ritmo, deberá recorrer bancos durante 4 días para juntar los 240 mil bolívares que debe pagar para la inscripción de sus hijas en la escuela. Unos pasos más allá, en la misma cola, Gladis Morán no tiene dudas: «A mí no me vengan con cuenticos. La culpa de todo esto es del Presidente y sus funcionarios. Hay que cambiar el Gobierno porque está visto que son gente incapacitada. La única capacidad que han tenido es la de destruir al país. Ni siquiera han sido buenos robando. Han acabado hasta con la gallinita de los huevos de oro».

Paradoja de un Gobierno que se dice revolucionario y a favor de los más pobres, los únicos privilegiados en este entuerto son las élites burocráticas y empresariales con acceso a las divisas: quien tiene unos dólares en el bolsillo, hoy puede vivir en Venezuela como millonario.

Aguas que sobran, aguas que faltan y una fuga incesante

El asfalto de la autopista Francisco Fajardo que atraviesa la ciudad de este a oeste aún está salpicado por los restos de pintura y de las bombas molotov y lacrimógenas que se arrojaron durante los 126 días de protestas entre abril y agosto que dejaron un saldo de 157 muertos por la represión.

Aquella movilización opositora convocada con la ilusión de ponerle fin al régimen terminó, sin embargo, con la instalación de una Constituyente que parece consolidarlo. La gente rumia su desazón, pero la calle, militarizada en cada cuadra, brinda una apariencia de tranquilidad.

«Al final, estos venezolanos resultaron unos cagones», descarga su bronca Alfredo Bustamente al volante de su Chevrolet del año 80 que apenas se mantiene en pie, mientras evade lentamente junto a una fila de autos una laguna que la tormenta tropical armó en pocos segundos en uno de los descensos de la autopista. Mientras en algunas zonas la falta de drenajes forma ríos espontáneos que arrastran la basura acumulada en las calles, en otras, los vecinos sufren por la falta del servicio de agua de red durante semanas enteras.Hay quienes aseguran que los cortes del suministro se ensañan con particular crueldad con los barrios opositores. La infraestructura urbana, insuficiente, descolorida y vencida, parece detenida en los años 80. «La ciudad está toda rancheada«, describen con tristeza los caraqueños.

«En mi país y cualquier otro de Sudamérica, cuando la gente sale a pelear a la calle, no se vuelve a su casa tan mansita sin lograr nada», sigue Bustamante, que llegó del Perú hace 35 años junto con su hermano y dice que ya está grande para dejar su taxi. Pero sus dos hijos y sus sobrinos ya hicieron el camino inverso y partieron a Lima.

Más de 1.800.000 venezolanos viven en el exterior. Más de la mitad de ellos se marchó en la última década, de acuerdo con el Laboratorio Internacional de Migraciones de la Universidad Simón Bolívar. Los profesionales de las clases acomodadas fueron los primeros en marcharse, pero la aceleración de la fuga es exponencial y ya no hay cortes sociales. En los últimos dos años, se duplicó la cantidad de venezolanos en Colombia y ocho de cada diez poseen solo estudios primarios o secundarios, informó el diario El Nacional.

Maiquetía2

Presos y desaparecidos

El miedo domina la vida cotidiana de los barrios más pobres y más ricos. Medio centenar de personas muere cada fin de semana en Caracas a manos de la delincuencia. Venezuela se ha convertido en el segundo país más violento del mundo contando los que no están en guerra.

El mismo Estado que no controla a las pandillas y promueve los grupos parapoliciales, conocidos como «colectivos», es el que persigue a los opositores.

«Nunca en nuestra historia republicana habíamos tenido una crisis en materia de derechos humanos tan grave. Desde la absoluta ausencia de políticas coherentes y efectivas para garantizar la vida y la salud de la ciudadanía hasta la sistemática política de persecución judicial injusta contra todo el que se atreva a disentir o a oponerse al gobierno», le dijo a Infobae el abogado Gonzalo Himiob, del Foro Penal Venezolano (FPV), que defiende al 80% de los 566 presos políticos que hay hoy en Venezuela. «Desde enero de 2014, llevamos registrados casi 12.000 casos de arrestos arbitrarios por motivos políticos. También registramos decenas de torturas y tratos crueles, inhumanos o degradantes y más de 130 asesinatos por la represión del Estado o de grupos paramilitares que obran bajo la más absoluta impunidad, de la mano y con la complicidad de las fuerzas de seguridad del Gobierno».

No es extraño que los familiares de los detenidos pasen días y semanas sin información oficial sobre su lugar de detención. Le pasó hace poco nada menos que al ex general Raúl Baduel, un ladero de Hugo Chávez caído en desgracia, que estuvo 23 días desaparecidohasta que las autoridades informaron de su detención en el penal militar de Ramo Verde.

La situación se agravó este año, porque los detenidos comenzaron a ser imputados de delitos más graves, como «rebelión» y «traición a la patria». Desde abril, 738 civiles fueron acusados ante tribunales militares, y 418 continúan privados de su libertad. Uno de los que logró salir fue Carlos Julio Rojas, un periodista y activista social que pasó 49 días detenido en Ramo Verde. «Ellos creían que me jodían, pero yo los jodí a ellos. Fui el primer periodista que entró allí y ahora puedo contar al mundo todo lo que se vive allí», le dijo a Infobae. Los detalles de ese calvario en el que perdió 12 kilos se publicarán en los próximos días.

Firme y pleno

Mientras se acumulan la condenas y las sanciones de organismos regionales e internacionales contra los abusos del régimen de Maduro, la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), integrada exclusivamente por chavistas, vive su realidad paralela y va por más: creó la orwelliana «Comisión de la Verdad» para investigar las responsabilidades de la violencia política desde la asunción de Hugo Chávez en 1999, amenaza con pedir el encarcelamiento por «traición a la patria» de los políticos opositores y perseguir las «instigaciones al odio» en las redes sociales.

Para celebrar el primer mes del funcionamiento de la ANC «y los cuatro primeros años de su exitoso Gobierno», la presidente de la Constituyente, Delcy Rodríguez, inauguró en la sede de la Cancillería una exposición en homenaje a la vida de Nicolás Maduro Moros titulada «Firme y pleno». La muestra fotográfica, que repasa la vida del mandatario desde el biberón hasta el Palacio de Miraflores, aún no ha sido abierta al público, pero se anticipa que recorrerá las plazas Bolívar de todo el país.

«Hay mucho amedrentamiento y discurso ficticio. [La filósofa política] Hannah Arendt decía que cuanto más ficticio, más efectivo. Ficciones ideológicas que cuanto más absurdas, tienen más efectividad. Todo eso genera una vulnerabilidad en el individuo que lo hace más sometible. Esta no es una dictadura cualquiera. La de [el dictador de los años 50, Marcos] Pérez Giménez fue una cosa tecnocrática. Pero esta es una dictadura con vocación totalitaria», dijo a Infobae la historiadora Margarita López Maya, ex simpatizante chavista y una de las mentes más lúcidas para analizar la actualidad venezolana.

En este contexto, recién esta semana se confirmó que el 15 de octubre se realizarán finalmente las elecciones regionales que fueron suspendidas el año pasado.

¿Cuán transparentes serán los comicios? ¿El Consejo Electoral dejará que se presenten todos los candidatos opositores o muchos serán inhabilitados? ¿Aceptará mansamente el oficialismo perder muchas de las 20 gobernaciones que hoy ostenta (sobre un total de 23)?

Todos esos interrogantes dominan la escena política hoy. Porque, además, estos comicios serán un indicio de en qué condiciones se votará el año próximo para Presidente.

«Ojo, que un Presidente impopular no significa un Presidente débil», advierte un diplomático que lleva años en Venezuela.

Las comparaciones con Cuba, Corea del Norte y el Zimbabue de Robert Mugabe rondan todas las conversaciones. Pero el chavismo se escurre de las simplificaciones con su propio modelo totalitario.

«Solo espero que estemos viviendo un purgatorio y no un infierno«, ruega Nelson Bocaranda, el periodista que reveló con más ahínco las facetas más oscuras del chavismo.

Gilber Caro inició huelga de hambre para exigir traslado

GilberCaro

 

Gilber Caro, diputado a la Asamblea Nacional, inició una huelga de hambre este lunes para exigir al tribunal militar que lleva su caso que lo trasladen a la cárcel militar de Ramo Verde.

En una carta publicada en la cuenta de Twitter del partido Voluntad Popular, Caro asegura que permanecerá en huelga hasta que respondan su solicitud.

“En mi caso en particular, dado que soy un preso político para este gobierno, me discriminan del resto de la población, como si no tuviera derecho a ser tratado con respeto. Me aíslan con el propósito de producir en mi psiquis un grado de tortura tal que anule sistemáticamente mi personalidad”, denuncia en el texto.

Caro, quien se encuentra recluido en la cárcel 26 de julio, fue detenido el 11 de enero junto con su pareja, Steyci Escalona, cuando transitaban por la autopista Regional del Centro.

El parlamentario fue imputado por “traición a la patria y sustracción de efectos militares”. No hay una sentencia firme sobre su caso.

 

¿Qué cuenta pendiente tiene Baduel?, por Edward Rodriguez

Rbaduel1

 

Yo odio, tú odias, él odia, ellos odian, nosotros odiamos, todos odiamos (menos el régimen, no, ellos “serían incapaces”). El verbo odio, en todas sus conjugaciones, está de moda en Venezuela según el Gobierno, tanto, que a través de su brazo ejecutor, entiéndase ANC, redactarán una Ley contra el odio.

Me imagino que el estatuto se trata de sanciones contra la catarsis natural afectiva de querer o no querer a alguien, esto respondiendo a las constantes increpancias que viven los funcionarios del régimen en el exterior por parte de alguno de los dos millones de venezolanos que han salido del país en el período de la “Revolución bonita”.

Sin traspasar las fronteras y ante la saña pública y notoria demostrada en las últimas semanas, yo pregunto: ¿quién odia tanto al general Raúl Isaías Baduel?

Resulta sorprendente que después de 20 días de haberlo sacado de la cárcel de Ramo Verde sus familiares y abogados no tengan noticias del paradero del ex ministro de defensa del fallecido Hugo Chávez.

Conversando y leyendo el trabajo de cuatro colegas para ilustrarme un poco de lo que encierra Baduel, todos coinciden en sus apreciaciones: hombre llanero como Hugo, amigo suyo desde la Academia militar, compadres de sacramento y con quien participó en el primer pacto de la Revolución conocido como el “Juramento del Samán de Güere”, del que hoy sólo pueden dar fe el ex director de la extinta Disip, Jesús Urdaneta Hernández, desaparecido de la escena pública como los dos primeros.

El general no participó en el golpe de Estado del 4 de febrero de 1992 como tampoco lo hizo en el “Carmonazo” del 2002, lo que lo muestra como un hombre alejado de esas tesis de irrumpir en el poder por la fuerza militar.

Fue quien rescató a Chávez en La Orchila el 13 de abril del 2002, lo llevó a Miraflores, lloraron juntos e iniciaron un segundo capítulo, puesto que el mismo Hugo Rafael llegó a pensar antes del 11 de abril que el movimiento golpista que se gestó en su contra lo lideraba su compadre, pero se equivocó.

Mi colega y ex compañera de Rctv, Anahís Cruz, a quien Baduel le prohibió la entrada a la Guarnición militar de Aragua en plena rueda de prensa, lo describe como un hombre amable, callado, místico, organizado y devoto de la Virgen de la Milagrosa.

De los años en la cárcel a la que fue a parar por la “apropiación indebida de 3,9 millones de dólares” mientras fue ministro; dos colegas lo describen como un hombre respetuoso, conocedor de la Constitución, admirador de Mandela y asiduo oyente de música sacra. En la prisión vivió torturas y castigos para desmoralizarlo y enloquecerlo.

El mismo Raúl Isaías llegó a decir en su momento que fue Fidel Castro quien pidió eliminarlo, pero Fidel ya no está, ni Hugo tampoco, entonces volvemos a preguntarnos: ¿quién odia tanto a Baduel?, ¿Con qué funcionario del régimen tiene una cuenta pendiente?.

Lo que sí demandamos, sin tener ninguna afinidad con el general, es el respeto a los derechos humanos, esos que tanto pregona el régimen; por años nos han machacado la historia del macabro asesinato político de Alberto Lovera ocurrido en 1965, yo ni había nacido, pero igual lo deploro. El Gobierno es responsable de la vida del general Baduel; esperemos que no se les pase la mano y termine como Lovera encadenado de brazos y piernas en una playa de Lechería.

@edwardr74