Después del decreto de la ANC en la que se atribuía la función legislativa de la Asamblea Nacional, la reacción de la comunidad internacional condenando la acción no se hizo esperar.
El presidente del parlamento, Julio Borges, informó que jefes de gobiernos, presidentes y líderes democráticos del mundo lo han llamado para manifestar su preocupación por la decisión.
“Pretenden disolver la Asamblea Nacional electa por 14 millones de venezolanos. Ni Venezuela, ni la comunidad internacional, reconocen el “fraude” constituyente instalado con trampa. Todos los gobierno democráticos del mundo están con el pueblo de Venezuela, y me han pedido que haga saber su mensaje de solidaridad”, dijo Borges.
Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), condenó el decreto emitido por la Constituyente y advirtió se profundizará el golpe de Estado en Venezuela. El secretario general recordó que la AN fue electa por el pueblo venezolano e insistió en que la disolución es ilegitima e inconstitucional.
Recalcó que ante las últimas decisiones es más urgente que se realice un Consejo Permanente extraordinario en la OEA para tratar la crisis que atraviesa Venezuela
Laura Chinchilla, ex presidenta de Costa Rica, aseguró que la medida eliminó el «último vestigio de democracia» que quedaba en Venezuela. Hizo un llamado a la comunidad internacional a tomar acciones contundentes. «OEA debe sesionar y los gobiernos romper lazos diplomáticos y acentuar sanciones», puntualizó.
José Miguel Vivanco, Director de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), también se pronunció y aseguró que con esta nueva medida «se formaliza dictadura plena en Venezuela», sentenció.
El Gobierno de España también expresó su firme condena por la decisión de Constituyente. Aseguraron que es una decisión que no contribuye a la reconciliación ni al «futuro democrático» del país pero constituye un grave desconocimiento de la voluntad del pueblo venezolano expresada en las elecciones legislativas de 2015.
Indicaron que no reconoce la decisión de la Asamblea Constituyente y pide al gobierno nacional que garantice la independencia y separación de los poderes del Estado.
Explicaron que, junto a sus socios de la Unión Europea, promoverá la aplicación de medidas restrictivas de carácter individual apropiadas para dar respuesta a la gravedad de la situación.
Por su parte, el Gobierno de Panamá expuso su “rotundo rechazo a la disolución de la Asamblea Nacional Venezolana, a través de un decreto de la ilegítimamente constituida Asamblea Nacional Constituyente”
“Panamá condena el irrespeto a los principios democráticos y la paz social, y el actuar contra la voz del pueblo, que solo agrava la crisis en el país suramericano”, indicó un comunicado de tres párrafos del Gobierno del presidente panameño, Juan Carlos Varela.
Asimismo, agrega el comunicado, “Panamá reitera que las decisiones que tome la ANC”, integrada únicamente por oficialistas, “y sus resultados no serán reconocidos” por el país centroamericano.
El Gobierno de Chile condenó hoy que la Asamblea Constituyente haya disuelto el Parlamento, de mayoría opositora, y asuma sus facultades en medio de la crisis que vive el país caribeño.
El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, utilizó su cuenta oficial de Twitter para condenar la iniciativa de la Asamblea Constituyente en ese país.
«Gobierno de Chile condena que Constituyente de Venezuela haya asumido facultades de Asamblea Nacional elegida democráticamente», precisó en su tuit.
