Justicia Roja, País Paralizado y Vivienda Fallas - Runrun
Justicia Roja, País Paralizado y Vivienda Fallas

COMO DEMOSTRACIÓN DEL INTERÉS del mundo ante la situación creada en Venezuela —donde el presidente Hugo Chávez tras 14 años de gobierno fue reelecto el pasado 7 de Octubre por seis años más -periodo 2013 a 2019- debiendo asumir el poder para este lapso hoy 10 de Enero en una nueva juramentación ante la Asamblea Nacional  y para la cual no estará presente debido al agravamiento de su estado canceroso en el CIMEQ de La Habana— los medios internacionales han desplegado en Caracas a corresponsales, reporteros, articulistas y enviados especiales para cubrir periodísticamente los acontecimientos de este dia.

El prestigioso diario español El País (www.elpais.com) es uno de los medios globales que mas interés ha puesto en la noticia venezolana desplegando a tres de sus colaboradores para describir minuto a minuto lo que suceda en Venezuela.

La edición de hoy trae tres reportes, a cual mas noticioso, escritos por los periodistas Ewald Scharfenberg, venezolano; la colombiana Diana Calderón de la Cadena Caracol y el español Francisco Peregil.

El primer articulo se refiere a la decisión del Tribunal Supremo de Justicia; el segundo a un análisis sobre la paralización del paìs y el tercero a las ofertas de vivienda no cumplidas por el gobierno de Chávez.

Ante lo importante de los tres temas los reproducimos en nuestro portal:

 

La justicia avala que el chavismo se mantenga aferrado al poder

por EWALD SCHARFENBERG

El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) ha dado este miércoles el paso que faltaba para celebrar el 10 de enero la apoteosis de un ausente. En un fallo al que han llegado los magistrados de su Sala Constitucional, leído por la presidenta del alto tribunal, Luisa Estella Morales, ha respaldado la tesis del Gobierno de “continuidad administrativa” ante la ya oficial ausencia del presidente, Hugo Chávez, enfermo en Cuba, a su cuarta toma de posesión como jefe de mandato presidencial, previsto para este jueves.

En resumen, la decisión determina que se puede postergar el juramento de Chávez hasta que el propio mandatario “dé constancia del cese de los motivos sobrevenidos” que forzaron su ausencia. No habría condiciones para declarar ni la falta absoluta del presidente ni la temporal. También establece que el vicepresidente, ministros y demás integrantes del actual “poder ejecutivo seguirán en cumplimiento cabal de sus funciones”.

Por su parte, Henrique Capriles, el último candidato de la oposición en las presidenciales de octubre, declaró ayer en conferencia de prensa que el tribunal se había prestado para resolver “un problema que tiene el Gobierno». “Es lamentable, porque las instancias no deben responder a un partido», añadió. Cuando le preguntaron si iba a llamar a la movilización de sus seguidores ante la jornada del 10 de enero respondió. “Yo no voy a convocar a nuestro pueblo a que vaya a un escenario de confrontación pueblo con pueblo. Eso es lo que quiere el Gobierno. Conmigo que no cuenten para eso. “No les extrañe que haya algunas acciones aisladas alentadas por el propio Gobierno, diciendo que es la oposición”.

Nicolás Maduro, vicepresidente de Venezuela, compareció en televisión junto a los ministros de Exteriores de 20 países pertenecientes a las organizaciones PetroCaribe y la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y los invitó a celebrar un acto de homenaje el 10 enero en el palacio presidencial de Miraflores.

En cuanto al oficialismo, dejar todo igual hasta que sea inevitable cambiarlo: tal parece la consigna definitiva del oficialismo ante los retos que la gravedad del presidente les presenta día a día. Tal también es el espíritu de la sentencia del Supremo. Responde a lo que se anticipaba, después de que el vicepresidente de la República, Nicolás Maduro, y el Presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello —ambos, pretendientes al liderazgo vacante del chavismo— defendieran una interpretación de la Constitución que aseguran el continuismo del actual Gabinete. La propia Luisa Estella Morales había adelantado su criterio el pasado 20 de diciembre, cuando aseguró en declaraciones públicas: “Aquí hay un hecho muy importante, que es la continuidad por la reelección del presidente”.

Sin embargo, el documento —emitido en respuesta a una solicitud de interpretación del artículo 231 de la Constitución, que define las ausencias del presidente de la República— parece ir más allá de las pretensiones hasta ahora expresadas por el Gobierno y el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). El Supremo no “encuentra méritos” para convocar a una junta médica que certifique el verdadero estado de salud de Chávez, pues considera que el Ejecutivo ha venido informando al respecto de manera oportuna. Y como colofón: no se definen condiciones, ni de modo ni de tiempo, para que el presidente electo jure su cargo.

Así se le tiende una alfombra roja jurídica a la situación que, de facto, impera desde que hace justo un mes, cuando, el presidente Chávez dio a conocer una recidiva de su cáncer y su determinación de que, en caso de que la operación a la que se iba a someter en La Habana le impidiese regresar al poder, sus partidarios consideraran a Nicolás Maduro como sucesor.

La jornada previa había sido de intensa actividad política en ese mismo sentido. La noche del martes, la Asamblea Nacional, ampliamente dominada por el oficialismo, había acordado instar a los demás poderes del Estado a regirse por la interpretación oficialista del artículo 231 de la Constitución. El Parlamento hizo la exhortación —votada sólo por los diputados del PSUV y sus partidos aliados— después de recibir una carta firmada por el vicepresidente Maduro en la que este, en nombre del presidente Chávez, daba a conocer que la convalecencia del primer mandatario en Cuba se extendería más allá del 10 de enero, fecha prevista para su toma de posesión.

Solo surgió en Venezuela una inesperada voz disidente. La Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, suscribió la tesis de que se debía declarar la falta temporal del presidente electo. Por anticipado que fuese el contenido de la decisión del Supremo, no por ello quedó atenuada la expectativa que había en torno a su anuncio.

La intervención de la magistrada Morales ha sido televisada en directo y en cadena nacional. Para encontrar un antecedente semejante en la historia reciente venezolana, hay que remontarse al 20 de mayo de 1992, cuando una ponencia de la entonces Corte Suprema de Justicia dio lugar a una investigación contra el presidente Carlos Andrés Pérez por acusaciones de malversación. Pérez renunció al cargo.

Los medios estatales han convocado para el jueves un acto de masas en Caracas. Se anuncia la participación de un verdadero desfile de presidenciales, que incluye no sólo a Maduro y Cabello, sino a otros líderes chavistas.

Fuente: http://internacional.elpais.com/internacional/2013/01/09/actualidad/1357752086_864963.html

 

 

Todo se retrasa en Caracas

por DIANA CALDERÓN

 

En Caracas todo se retrasa estos días. Para empezar, la aplazada toma de posesión del presidente Hugo Chávez. Hasta el programa de viviendas gratuitas, de las que se construyeron 200.000 el año pasado, está retrasado. Ya dijo recientemente el ministro de Vivienda, Francisco Sesto, que ha estado dedicado a construir un enorme mausoleo para los restos de Simón Bolívar, porque aquí en Venezuela los muertos gobiernan, y como el Cid Campeador se coronan muertos sobre el caballo. No confundir caballo con Cabello Diosdado, el presidente de la Asamblea venezolana, quien también anda atrasado en sus planes para posicionarse como la figura heredera del chavismo porque, por ahora, el turno lo tiene Nicolás Maduro, el vicepresidente, de quien se dice que es menos radical dentro de la fuerza roja. Al reelecto jefe de la Asamblea, Diosdado Cabello, no le preocupa estar atrasado, porque aquí como en Colombia también se reeligen, aunque sean investigados, estén señalados o se los identifique con alias, que para este caso es el de Ojitos lindos o El Padrino.

Para quienes no han entendido: Maduro y Cabello pertenecen al chavismo, como Adán, el hermano de Chávez; como el exvicepresidente Elías Jaua; como Ricardo Menéndez y José Arreaza, nombres de la única fuerza que gobierna esta nación llena de petróleo y bolívares, que en el mercado negro de los maleteros en el aeropuerto se cambian a 14 por dólar mientras la tasa oficial es 4 por dólar, y oficial aquí es todo. Y lo que no es oficial hay que conseguirlo con dificultad, y por eso también se retrasan las ediciones de los periódicos, mientras llega cada mañana de la morgue un periodista que permanece la noche contando los muertos que llegan por la creciente delincuencia en las calles de Caracas, que pasan rápidamente de estar teñidas de rojo durante el día, a las fachadas grises de edificios expropiados en la noche, y que son refugio de mendigos y otros habitantes.

Se retrasa hasta el Tribunal Supremo, que debía pronunciarse muy temprano en la mañana y del que, durante horas, solo se vieron las sillas vacías de magistrados que desde hace nueve años no han sido capaces de emitir fallos contrarios al Gobierno de Chávez. Se retrasan los vuelos provenientes de todas partes del mundo, que llegaron ayer con cuatro horas de retraso.

Está atrasada la oposición, que obtuvo en octubre de 2012 el favor electoral de casi siete millones de votos y en diciembre recibieron del chavismo una lección política alzándose el caudillo con 20 de 23 gobernaciones, en 10 de las cuales puso a 10 de sus militares más cercanos. Y está atrasada la oposición porque pasa demasiado tiempo mirándose en el espejo, admirando la juventud de sus líderes Enrique Capriles, gobernador de Miranda, Henri Falcom, Pablo Pérez y Leopoldo López, entre otros… Todos parecidos a Peña Nieto, el mexicano que revivió al PRI, como en las telenovelas.

Las únicas que por ahora parecen no estar atrasadas son dos mujeres: Cilia Flórez, procuradora general de Venezuela, esposa del vicepresidente, Nicolás Maduro, y candidata desde ya al Consejo Nacional Electoral. La otra es una joven de los servicios de inmigración, quien no está dispuesta a que se le haga tarde: “Chica, espera el otro turno, que es mi hora de comer”.

Fuente: http://internacional.elpais.com/internacional/2013/01/09/actualidad/1357761716_883317.html

 

 

 

La revolución empezó por el tejado

por FRANCISCO PEREGIL

El lunes por la tarde decenas de personas hacían cola ante la puerta del Ministerio del Poder Popular para la Vivienda de Venezuela. Algunos solo pretendían informarse para solicitar una casa. Y otros, como Vanesa Amatima, trabajadora social de 29 años, apuraban los últimos trámites para recoger las llaves. “La solicité hace seis meses. Está en Playa Grande, cerca del aeropuerto de Caracas, en una zona de puros ricos donde el Gobierno ha construido 17.000 viviendas. Es un apartamento de cuatro habitaciones y dos baños. Enfrente se ve el mar a la luz de la luna. Los iraníes están a punto de terminarla. ¿Sabes cuánto costaría eso en el capitalismo? Mientras en España sacan a la gente de las casas porque la crisis allí es arrechísima, aquí, gracias al presidente Hugo Chávez a los pobres se les da casas”.

Amatima es “patrullera socialista” en el Estado de Vargas, de las que salen en su zona a buscar votos y a defender “al comandante Chávez cuando quieren joderlo”. Explica que muchos pisos se entregan amueblados, pero al pueblo hay que concienciarlo de que esas viviendas “no llegaron del aire”, sino de “un sistema revolucionario que instauró Chávez”. Mientras habla, recibe una llamada de teléfono.

—Sí, sí. De España, sí. Chao.

Un funcionario del Ministerio le acaba de preguntar si está hablando con un periodista. A su lado, otra solicitante cuenta que las llaves se le entregan siempre a las mujeres y que el título de propiedad, también. “Chávez ha creado un Ministerio de la Mujer y le ha dado dignidad. Ahora hay mujeres ministras y más diputadas que nunca. Ya no se calan que los hombres las caigan a palos”, añade Amatima.

Detrás de ella hay otra mujer. Cuando se asegura de que nadie la escucha cuenta que vive en un “cuartico” que era un “basurero”, con su hija de siete años, incapacitada física. Lleva cinco años solicitando casa. “Pero el Gobierno solo ha empezado a hacerlas ahorita”.

Consciente de que la escasez de casas era uno de los grandes déficits en los 14 años de “revolución bolivariana”, Chávez promovió en 2011, un año antes de las elecciones presidenciales, la Gran Misión Vivienda. “Para vivir viviendo, para la vida plena”, anunció. El objetivo era construir tres millones de viviendas en los próximos cinco años. Desde 1999, el Gobierno solo había edificado 406.000, un 17% de lo que pretende edificar en el próximo lustro, según publicaba esta semana el diario El Universal citando fuentes oficiales. Con ese último impulso, acometido en plena lucha contra el cáncer, Chávez logró solucionar el problema de miles de damnificados por las lluvias torrenciales de 2010, gente que llevaba un año malviviendo en refugios. Habían pasado de la miseria y la violencia de los barrios más pobres de Caracas, a la miseria aún más degradante de los refugios. Y de pronto, recibieron casas para estrenar. Unos tuvieron la suerte de que se las adjudicaran en zonas de la capital. Y a otros le tocó vivir en Ciudad Caribia, el gran sueño socialista del presidente.

Ciudad Caribia nació en la mente de Chávez cuando en uno de sus vuelos avistó un terreno a dos kilómetros y medio de la autopista que une la capital con el aeropuerto. Así que varios ingenieros cubanos comenzaron en 2007 el proyecto de levantar 20.000 casas para 100.000 personas. En agosto de 2011 ya estaban listas las primeras casas para 600 familias que provenían de las “zonas de peligro inminente”. “Cuba y Venezuela abrimos el camino donde había puro monte y culebra. Ahora va a ser una gran ciudad, un ejemplo para el mundo. Está naciendo uno de los grandes proyectos del siglo XXI”, declaró Chávez por televisión.

Hoy en día, sin embargo, viven allí solo mil familias y Ciudad Caribia no parece el mejor ejemplo para el mundo. Del ferrocarril que Chávez pretendía hacer pasar por allí en un futuro no tan lejano nadie habla.

Sin embargo, Lorena Villegas, enfermera del centro de salud, llegó hace un año y está encantada. “Al principio había electricidad y gas. Y ahora nos han puesto televisión por cable”. Otros habitantes se muestran más críticos. “Cuando llegamos había una panadería, un supermercado, una ferretería y una arepera [pequeño restaurante]. Eso ya era insuficiente para las 600 familias”, explica un vecino.

Aún quedan por construir 19.000 casas en Ciudad Caribia. El sueño de Chávez sigue en marcha.

Fuente: http://internacional.elpais.com/internacional/2013/01/09/actualidad/1357764406_790467.html