Cadivi o el karma bolivariano de estudiar en el extranjero
Cadivi o el karma bolivariano de estudiar en el extranjero

Lisseth Boon | @boonbar 

Adriana Nuñez M. | @AdrianitaN

LA APROBACIÓN DE DIVISAS PREFERENCIALES por parte del Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex) es la materia pendiente de cientos de estudiantes venezolanos en el extranjero. La incertidumbre empaña las navidades 2014 de quienes recibieron en noviembre la notificación masiva por parte del máximo regente del control de cambio en el país de que no continuaría asignando los montos correspondientes a los cupos estudiantiles. El retraso o cancelación de la asignación de dólares se convierte en una prueba de supervivencia para muchos jóvenes, que determinaría la interrupción de su formación académica en el extranjero. A lo largo de 2014, en el que Cadivi pasó a ser Cencoex, se han agudizado las irregularidades en la aprobación y asignación de los cupos para estudiantes, que no constituyen becas del Estado sino financiamientos propios en divisas preferenciales, supeditados al control de cambio que rige en el país desde 2003.

Ante la negativa en la aprobación de los llamados dólares Cadivi, los jóvenes en el extranjero han comenzado a organizarse de acuerdo a los países donde se encuentran, creando cuentas de Twitter, convocando a colectas, cenas solidarias y otros actos para reunir fondos para apoyar a los casos más críticos fuera del país y a su vez exigir sus derechos al Estado venezolano. No se conoce el número exacto de jóvenes a quienes Cencoex autorizó dólares para estudiar en el exterior. Una primera lista de 11.400 (noviembre) y una segunda de 11.340 (diciembre) estudiantes convocados por el organismo para verificar el uso correcto de divisas puede dar un número aproximado. “Sin recursos y con miedo no es fácil lograr contarnos”, comenta Yenai Avendaño, representante del grupo de estudiantes de Estados Unidos (@EstudVzlanosEUA).

Observa que entre los estudiantes hay temor de que el gobierno venezolano active la asignación de divisas y que por asumir una posición queden fuera, o bien que retrasen o nieguen los trámites en embajadas y consulados. También, hay miedo a que gobiernos como el de Estados Unidos tomen acciones contra los jóvenes por carecer de recursos y en consecuencia suspenden las visas de estadía. Entretanto, pasan los días sin dólares Cencoex, se vencen los plazos de pago y crecen los compromisos con las universidades extranjeras.

“La lista con nombres y apellidos que presentó el gobierno es un acto irresponsable”, considera Avendaño. “No es posible que las empresas de maletín, que el mismo Gobierno asumió que habían robado millones de dólares, no fueron publicadas para no exponerlas al escarnio público mientras que a los estudiantes nos tratan como delincuentes. Si hubo casos de estafas, habrían podido detectarlas a tiempo debido a que es obligatorio entregar consecutivamente todos los justificativos de consumo de las divisas asignadas, Consideramos que esta lista es la estrategia del gobierno para empañar la reputación de miles de estudiantes honestos”.

Vea a continuación una linea de tiempo de los momentos más importantes de esta guerra no declarada: