Lo Que No Se Puede Censurar Por Isolda Arango Alvarez - Runrun
Censura
Durante las últimas décadas no es la primera vez que Venezuela se ve llevada a estos límites, parece que sí es la primera vez que se sobrepaso el límite.

Los distintos frentes de oposición tienen años planteándose salidas constitucionales y por vías pacificas, el pueblo venezolano ha ido a muchas jornadas de elecciones por distintas razones. El resultado siempre es el mismo pero las consecuencias son cada vez peores. Capriles movilizó la gente alrededor del mundo y convoco mas allá de los que muchos suponían podría ser su alcance. Hoy Leopoldo ha sabido leer la complejidad y la rabia que inunda a los venezolanos, la desesperación y la angustia con la que le hacen frente a la vida cada día.

Mientras tanto, las Fuerzas Armadas no terminan de tomar posición. No se sabe si la policía es policía o es G2. El gobierno dictatorial de Cuba está instalado en Venezuela desde hace mucho tiempo y eso no es un secreto. Los niveles de corrupción son inadmisibles e inimaginables. Lo doloroso es que justamente, la corrupción e indolencia de algunos fue lo que trajo como consecuencia el fenómeno que vivimos hoy y que se consolido a finales de los ’90 como Chavismo. Habrá que esperar para ver el alcance de este chavismo sin Chávez, chavismo que se fundó bajo la base de una protesta radical contra la corrupción y que ahora, paradójicamente, saquea al país y exprime sin compasión a sus habitantes.

Maduro no es Chávez… eso es un factor determinante. Y el pueblo venezolano, de cualquier estrato y nivel socio-económicotampoco es el mismo que hace trece años.

Los presos políticos en Venezuela siguen aumentando y me pregunto ¿Dónde están las entidades internacionales cuya existencia supone la vigilancia de estos sucesos?

Mucho pueden prohibir… pero jamás podrán prohibir pensar, ni podrán prohibir que la gente desee un país donde lo básico funcione, ni podrán acallar esas voces que se levantan y se hace oír sin fronteras.  La censura sin medida ha sido siempre cobarde y siempre ha generado todo lo contrario a lo que pretende. Lo indecible no puede ser censurado. La fuerza de la que se agarran muchos venezolanos hoy no es censurable.

¿Qué nos queda entonces a los venezolanos en el extranjero? Varias opciones son posibles en el siglo XXI. Las redes sociales, más allá de su papel social, se han ido consolidando  como un medio de información y de protesta más importante de lo que muchos creen. Si no pregúntenle a OFA (Organizing for Action)la organización que se armo a partir de la campaña de re-elección de Obama y que principalmente funciona convocando e informando vía redes sociales (twitter, facebook, etc)

Comenzar una petición, organizar acciones pertinentes a este momento venezolano, escribir al respecto, informar y comunicar son algunas de nuestras opciones… no las únicas, siempre hay más. El objetivo principal: hacernos oír y escucharnos entre nosotros podría cambiar el rumbo y el destino de esa Venezuela que nos han robado y que extrañamos tanto.
Isolda Arango Alvarez