Mitzy Capriles, esposa del dirigente Antonio Ledezma, dijo que desearía que el presidente Nicolás Maduro «se quedara en el país cumpliendo condena por crímenes de lesa humanidad», cuando cese su mandato.

En un desayuno informativo celebrado en Madrid y organizado por Nueva Economía Fórum, Capriles denunció las condiciones en las que detuvieron a su esposo en febrero de 2014 y su posterior encarcelamiento «por algo que no está demostrado».

Capriles, quien manifestó que «convertir tu casa en una cárcel es doloroso», aseguró que su marido insiste en la unidad del pueblo y en que «no hay nada peor que el exilio», porque lo que quiere es poder quedarse en su país.

Además, manifestó que Venezuela pasa actualmente por una «crisis humanitaria» debido a la precariedad de los servicios y a la falta de productos en algunos establecimientos como farmacias, donde pro cada diez artículos que se desean sólo se consiguen «uno o dos».

La transición hacia un nuevo gobierno se tiene que hacer «de la mano de la mayoría de venezolanos» y recuperar así «el espíritu y el orden democrático», dijo Capriles, quien también declaró: «estamos hablando de la reconciliación del país».

Capriles indicó que en Venezuela no existe un diálogo institucional, porque Venezuela «no tiene poderes separados».

También manifestó que la Mesa de Unidad Democrática (MUD) logrará la ley de amnistía para los opositores venezolanos a pesar de las trabas del Gobierno de Nicolás Maduro.

La ley es «una promesa de nuestros diputados», matizó.

Sobre la MUD, que está compuesta por 27 partidos, Capriles reconoció diferencias internas y apostó por la unión de la oposición para llegar a acuerdos.

La esposa de Ledezma se refirió además a la política española y afirmó que el partido Podemos, Maduro y Hugo Chávez «parecen salidos del mismo vientre».