En medio de la turbulencia económica y financiera mundial, Venezuela se encuentra expuesta al riesgo de una forma que muchos todavía no han caído en cuenta. La economía está en estos momentos a merced de la volatilidad de par de protagonistas que bien son conocidos por la variabilidad de sus precios: el oro y el petróleo.

Ya es bien sabida nuestra dependencia del petróleo, pero en los últimos años esa dependencia se hizo más específica y en nuestra dinámica económica actual necesitamos que el precio de éste crezca de manera importante año tras año. Vamos un poco más allá, el precio del petróleo no es importante sólo para generar los petrodólares necesarios para hacer crecer nuestra economía (95% de las divisas que entran al país provienen del petróleo), sino que ahora necesitamos precios altos para poder endeudarnos, es decir, para mejorar la percepción entre los inversionistas que tenemos capacidad de pago para cumplir con nuestros compromisos.

Por otro lado, en estos días la sociedad venezolana se percató de la gran proporción de Reservas Internacionales que se encuentran en oro. De hecho, en la reciente escalada del precio del oro, el gobierno ha extraído sistemáticamente las reservas operativas (las más líquidas), para así dejar las Reservas Internacionales en el “nivel óptimo” fijado por las autoridades (cerca de US$ 28.000 millones), es decir, la revalorización del oro permitía que las Reservas superaran esos US$ 28.000 millones y que el excedente generado por dicha revalorización fuese redirigido al FONDEN. Esta dinámica conllevó a que la proporción de oro en nuestras Reservas haya llegado hasta 63%. Lo anteriormente descrito deja a las Reservas Internacionales vulnerables al comportamiento futuro de los precios del metal dorado.

Hoy día Venezuela tiene variables económicas de suprema importancia dependiendo de precios muy volátiles. En finanzas el riesgo es medido a través de la variabilidad de los precios (desviación estándar), y como el sentido común indica a mayor riesgo más defensivos debemos ser. En mi opinión Venezuela está exponiéndose innecesariamente a niveles elevados de riesgo, esto puede esconderse por un tiempo, mientras los precios del oro y del petróleo suban, pero como siempre digo, las cosas pueden cambiar mucho y en muy poco tiempo si los precios del oro y del petróleo comienzan a bajar. ¿Estamos preparados para ello?

Henkel García

Analista e Instructor en Finanzas.

Presidente de Visión de Inversión

Director de @Econometrica IE C.A.

Maestría Administración, mención en Finanzas UNIMET

Twitter: