Foro Económico Mundial... ¿De salvación? por Omar Hernández - Runrun

En medio de la crisis económica internacional y la deblace financiera de algunos rincones, hay quienes han puesto en entredicho no sólo la connotada premisa de que las crisis son cíclicas sino que además, han tratado de revivir modelos o sistemas de comprobado fracaso. Lo anterior sin embargo, no oculta el hecho de que la estructura internacional tal como la conocemos -padecemos, dirían ciertos analistas- amerita cambios y reformas.

Suiza es símbolo de estabilidad y prosperidad. Su polémica neutralidad política en cuanto a los conflictos internacionales convive con una percepción foránea acerca de la solidez de su banca, que también hemos de decir, recibe las críticas de quienes aducen que el secreto de sus cuentas sirve de aliviadero a los indeseables del mundo y sus dineros mal habidos.

Este país alpino, éxito en cuanto a la dotación de servicios públicos y que se yergue como un oasis en medio del continente europeo –no forma parte de hecho de la Unión Europea-, albergará dentro de pocos días un cónclave que reúne a jefes de Estado y de Gobierno de más de cuarenta países, junto con empresarios, personalidades, científicos y una pléyade de periodistas.

“La gran transformación: creando nuevos modelos” es precisamente el lema de este año, en la que se plantean cuatro temas de trabajo: crecimiento y modelos de trabajo; liderazgo y modelos de innovación; modelos de recursos y sostenibilidad; y modelos sociales y tecnológicos.

De la lista de dignatarios que asistirán destaca una sorpresa: Ollanta Humala de Perú. Resulta que el primer mandatario incaico no es tan radical como se pensaba y el aspecto dócil que mostró en la campaña electoral para la segunda vuelta no era simple cosmética.

Probablemente Humala (el mismo quie vino recién a Venezuela y anduvo con Chávez en la Faja Petrolífera), no comparta ideológicamente el espíritu y propósito del Foro Económico Mundial de Davos. Pero sí, aunque suena pragmático, está consciente de la importancia del mismo y de la salvaguarda de los intereses de su país, llamado a ser potencia emergente de Sudamérica gracias a su potencial comercial devenido entre otros, de su industria textil.

Davos puede servir para la foto y reuniones bilaterales de importancia. Si servirá o no para crear «nuevos modelos» está por verse. «Urge una transformación global”, dijo Klaus Schwab, fundador y director ejecutivo del Foro. Esperaremos a ver.

Omar Hernández

Internacionalista

@omarhUN