Vista de la favela de Alemao en Río de Janeiro, que cuenta con dos funiculares. Los pobres de Brasil apoyan abrumadoramente la reelección de la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre por considerar que su situación mejoró considerablemente durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Una residente de la favela Mare de Río de Janeiro sostiene un perro en sus brazos junto a un arroyo de aguas contaminadas el 20 de octubre del 2014. Los residentes de las favelas tienden a apoyar a la presidente Dilma Rousseff con miras a las elecciones del 26 de octubre.

Carlos, de tres años, fotografiado en la puerta de su casa en una favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. En las paredes su madre escribió: «Si Dios cambió mi vida, también puede cambiar mi hsitoria. Dos vidas felices». Los pobres de Brasil tienden a apoyar a la presidenta Dilma Rousseff con miras a las elecciones del 26 de octubre.

Leandra Lopes duerme en su vivienda de la favela Mare de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Lopes, de 12 años, vive allí con su madre y cuatro hermanos en una casita de un ambiente. Los residentes de las favelas tienden a apoyar a la presidenta Dilma Rousseff con miras a las elecciones del 26 de octubre.

María Eduarda, de siete años, sotiene en sus brazos a su hermanita Kauania, de dos, mientras otra hermana, Joyce, de cuatro, juega con una pelota en su vivienda de una favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Los habitantes de los barrios más pobres son quienes más se han beneficiado con los 12 años de gobierno del partido de los trabajadores y podrían ser clave en las elecciones presidenciales del 26 de octubre.

Vista del barrio de clase alta de Ipanema desde la favela de Cantagalo en Río de Janeiro, en foto del 21 de octubre del 2014. Los habitantes de los barrios más pobres son quienes más se han beneficiado con los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores y podrían ser clave en las elecciones presidenciales del 26 de octubre

Ivani Delfino posa para una foto en su vivienda de una favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Delfino, quien vende material descartado para su reciclaje y hace algunos trabajos en la construcción, dice que votará por la presidenta Dilma Rousseff en las elecciones del 26 de octubre ya que, si bien todavía le faltan muchas cosas, siente que su situación mejoró bastante durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Un niño juega con un neumático junto a un arroyo contaminado en la favela Mare de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Los pobres de Brasil apoyan abrumadoramente la reelección de la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre por considerar que su situación mejoró considerablemente durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Silmara Felizardo prepara un café en su vivienda de una favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Los pobres de Brasil apoyan abrumadoramente la reelección de la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre por considerar que su situación mejoró considerablemente durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Isnaria Souza sentada junto a dos perros en una favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Souza, de 38 años, dice que todavía no decidió por quén votará en las elecciones presidenciales del 26 de octubre.

Un cerdo camina frente a algunas viviendas de una favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Los pobres de Brasil apoyan abrumadoramente la reelección de la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre por considerar que su situación mejoró considerablemente durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Silmara Felizardo sonríe desde la cocina de su modesta vivienda en una Favela de Río de Janeiro el 20 de octubre del 2014. Felizardo trabajó temporalmente en la Copa Mundial jugada este añoen Brasil y ahora toma clases de culinaria. Dice que votará por la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre.

Tres niños comen algo en la favela Mare de Río de Janeiro el 15 de octubre del 2014. Los residentes de las favelas apoyan abrumadoramente la reelección de la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre por considerar que su situación mejoró considerablemente durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Un niño come pan mientras cruza un precario puente sobre un arroyo en la favela Mare de Río de Janeiro el 15 de octubre del 2014. Los pobres de Brasil apoyan abrumadoramente la reelección de la presidenta Dilma Rousseff en los comicios del 26 de octubre por considerar que su situación mejoró considerablemente durante los 12 años de gobierno del Partido de los Trabajadores.

Una niña sonría para la cámara en la favela Mare de Río de Janeiro el 15 de octubre del 2014.

Un afiche proselitista colocado junto a una vivienda de una favela de Río de Janeiro. Foto del 20 de octubre del 2014. Los residentes de las favelas tienden a apoyar a la presidenta Dilma Rousseff con miras a las elecciones del 26 de octubre.