En mis Runrunes del pasado 12 de julio escribí: «Aunque todo el tratamiento se hará en Venezuela la evaluación periódica se hará en La Habana donde le sería aplicada la segunda dosis el mes próximo».
En ésta página, apenas el viernes 15, señalé las arduas conversaciones entre Chavez, Lula, Lugo y Fidel Castro para convencer al cubano de aceptar el viaje de «evaluación» del impaciente paciente venezolano al hospital Sirio-Libanés de la ciudad de Sao Paulo en Brasil.
Comentamos que a regañadientes Castro lo había aceptado. Sin embargo anoche supimos que el «arreglo» había sido hecho en base a una evaluación en La Habana tras la aplicación de la segunda dosis de quimioterapia – que por cierto es muchísimo mas fuerte que la primera y sus efectos en el enfermo pueden ser demoledores en los días siguientes ya que el organismo resiente el alto contenido de drogas antineoplásicas- y el chequeo adicional por parte de sus médicos venezolanos. Uno de ellos será llevado mañana domingo a La Habana para estar presente el lunes cuando se le inyecte dicha quimioterapia. Participará en el chequeo posterior junto a sus colegas cubanos y otros dos venezolanos que desde Caracas estarán presentes vía video conferencia.
En referencia a éste punto tecnológico debo señalar que desde la primera estadía en Cuba técnicos de CANTV y VTV montaron con sus pares cubanos una sala de videoconferencia para Chavez en la residencia presidencial asignada para él en La Habana desde hace mas de doce años. Es allí donde descansó con su familia tras las operaciones y la primera quimioterapia apenas fue dado de alta del CIMEQ.
La decisión del presidente de delegar, por primera vez en casi trece años, algunas funciones de gobierno en el vicepresidente Elias Jaua y en el ministro de finanzas Jorge Giordani indica la preocupación que tiene por el desarrollo de su enfermedad y su deseada recuperación, sabiendo lo traicionero que es el cáncer en cualquiera de sus manifestaciones.
En Cuba, apenas llegando y tras el recibimiento por parte del presidente Raul Castro, le espera una larga conversación con su mentor Fidel Castro quien seguramente le tiene ya listo el plan de tratamiento, los medicamentos para que los conozca, sus médicos de confianza para que los consulte y la acostumbrada dosis de recomendaciones políticas y de gobierno…las que sigue a pie juntillas el barinés.
Con el presidente viajan solamente sus hijas y dos edecanes. La posibilidad ya establecida de que tenga firma electrónica virtual en su poder le permitirá decirnos que «ya firmé esa orden desde aquí».
Al no hacer los cambios requeridos en el gobierno ni en el estamento militar, como lo había planeado, demostró que su primera prioridad es curarse, dedicándole todo el tiempo necesario a seguir el tratamiento al pie de la letra, y así no teniendo que preocuparse de reacciones a esos movimientos o barajos de nombres y cargos las que son naturales al afectar intereses. Ya hace unos años el fallecido general Müller Rojas había etiquetado al Palacio de Miraflores como un «nido de alacranes».
Un detalle importante de su cadena de hoy desde el Salon del Gabinete fue la orden impartida al vicepresidente Elias Jaua de «recomendar a ese poder judicial que es independiente» la posibilidad de que los presos políticos enfermos puedan seguirse tratamiento en clínicas u hospitales y tener sus casas por cárcel. Chavez dijo haber escuchado a Monseñor Mario Moronta, quien le hizo esa petición, pero no quiso revelar que fueron sus hijas Rosa y Gabriela las que apenas supieron que su padre tenia un serio caso de cáncer se lo recomendaron en la propia Habana. Cuando Noam Chomsky envía su petición por la liberación de la Jueza María Afiuni es que decide montarse en la propuesta de sus hijas. La preocupación del caudillo, como lo dejo ver en su alocución hoy sábado, era que se sintiera globalmente que el poder judicial dependía de su palabra. Por eso dejó el tema en manos de Jaua. Ojalá que la medida beneficie a todos los enfermos, sin distinción de las razones esgrimidas por la justicia roja rojita para sus detenciones y penalizaciones exageradas. Esperemos.
Mientras tanto, aunque el viaje a Brasil no ha sido del todo descartado, cada vez pareciera mas lejos.
La diferencia en el tratamiento no es la clave. La diferencia en la información pública si.
El hospital paolense ya tuvo como paciente al presidente de Paraguay Fernando Lugo. Cada vez que se sometía al tratamiento anti canceroso las autoridades del nosocomio emitían sus partes médicos e informativos a los diferentes medios agolpados a sus puertas. Información veraz y oportuna. He allí el quid del asunto.