Banco Nacional de Costa Rica confirma cierre de cuentas de CVG Alunasa tras acusación de EE UU por lavado de dinero
Banco Nacional de Costa Rica confirma cierre de cuentas de CVG Alunasa tras acusación de EE UU por lavado de dinero

 

San José.- El Banco Nacional de Costa Rica cerró las cuentas a la estatal venezolana Alunasa, que opera en territorio costarricense, tras una alerta emitida por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sobre la presunta utilización de la firma para el lavado de dinero, informó este martes un diario local.

La empresa funciona en Esparza, una comunidad ubicada a 100 kilómetros al oeste de la capital, y emplea a 277 trabajadores.

El Banco Nacional cerró las cuentas de la firma extranjera, luego de que el Departamento del Tesoro alertase en mayo sobre el presunto uso de la firma para el lavado de dinero en presuntas operaciones que salpicaron a uno de los brazos derechos del presidente Nicolás Maduro, el constituyente Diosdado Cabello.

El cierre del 13 de junio pasado afectó cuatro cuentas de la estatal y dos del Ejecutivo venezolano, dijo el diario La Nación.

Debido a dificultades para obtener materia prima, dada la crisis que golpea a Venezuela, Alunasa incurrió en atrasos en pagos salariales y en el cumplimiento de sus obligaciones con la Caja Costarricense del Seguro Social.

No obstante, la firma hizo contactos con autoridades del Ministerio del Trabajo y del anterior gobierno, para tratar de buscar una salida a la crisis.

El responsable jurídico de la empresa, Carlos Peña, explicó que el canciller venezolano, Jorge Arreaza, le comunicó a los ejecutivos -cuando fue a Costa Rica al traspaso de poderes en mayo pasado- que Alunasa (Aluminios Nacionales, S.A.) se queda en Costa Rica a toda costa, pues es un proyecto del Estado venezolano, cuya misión principal es realizar una función social en la comunidad donde opera.

Según reseña el diario La Nación, de Costa Rica, el Banco Central le comunicó al presidente de Alunasa, Noel Martínez que, por esa misma razón, no tramitará más créditos ni a su nombre, ni de las empresas que él representa, pero hizo la salvedad de que esta decisión no exime a la compañía venezolana de seguir pagando los créditos que mantiene con el banco.

Tras el cierre de cuentas, la empresa mantiene una deuda con el Banco Nacional por una línea de crédito otorgada en el 2015, la cual permitía a la compañía endeudarse hasta por $2,5 millones.

Así lo confirmó Carlos Peña, encargado jurídico de Alunasa, quien no detalló cuál es el monto que está pendiente de pagar.

La garantía de ese crédito era la materia prima de la manufactura, dijo Peña, es decir, el aluminio.

Sin embargo, el abogado relató que debieron ofrecer el terreno de la empresa como garantía adicional, por un valor superior a los 3.000 millones de colones (más de 5,2 millones de dólares), cuando empezó a escasear el material por la caída en la fabricación de aluminio en Venezuela, durante la mayor parte del 2017 y lo que va del 2018.

Para ello, Alunasa constituyó un fideicomiso con el Banco Improsa, el 26 de abril pasado.

La firma del Gobierno de Venezuela, además, pretendía que el Banco Nacional le ampliara el tope del crédito hasta  $ 6 millones, con el objetivo de cubrir una deuda con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) por el impago de cuotas obrero-patronales.

Según Peña, el monto asciende a más de $1 millón. Por ese pendiente de pago, la CCSS ordenó el cierre de la planta de la empresa en marzo pasado por un plazo de diez días.