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137 privados del Cicpc conviven entre aguas putrefactas en Anzoátegui
Denunciaron que las tuberías de aguas negras de los cuatro calabozos del lugar se mantienen desbordadas

 

Rodeados de aguas putrefactas conviven 137 privados de libertad que se encuentran recluidos en los calabozos del Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalísticas de la subdelegación del municipio Sotillo, en la zona norte del estado Anzoátegui.

Así lo ha registrado el equipo de Una Ventana a la Libertad tras un recorrido realizado por el Centro de Detención Preventivo, donde se pudo conocer que 26 mujeres y 111 hombres han denunciado en reiteradas oportunidades que las tuberías de aguas negras de los cuatro calabozos del lugar se mantienen desbordadas desde hace 17 días.

Algunos familiares aseguran que los privados se han negado a recibir sus alimentos  por el hedor que emanan las cloacas. Además aseguran que se han visto en la obligación de hacer sus necesidades en bolsas para reducir el colapso del drenaje.

Quienes van a diario a las instalaciones del Cicpc para llevar alimentos a sus familiares aseguran que actualmente existe un brote de infecciones en la piel y ninguno de los internos ha recibido tratamiento para el ardor o la picazón.

“Para completar tienen 15 días con el servicio de agua potable intermitente y pasan días sin bañarse porque no les suministran el líquido para que por lo menos garanticen su aseo personal”, contó uno de los parientes de los privados.

En el Centro de Detención Preventivo tienen más de dos años con las visitas suspendidas y los privados solo se comunican con sus parientes a través de “cartas” que se hacen llegar bajo la supervisión de los detectives de guardia.

Muchos aseguran que conviven en condiciones deplorables y en completo hacinamiento, pues se encuentran en celdas de dos metros cuadrados y el espacio no es suficiente para albergar a más de 30 hombres  y mujeres por cada calabozo.

“La ventilación es mínima, por eso se ha desatado una sarna increíble y no dejan pasar pomadas o medicamentos para que ellos puedan controlar la erupción en la piel”, detalló uno de los familiares.

Los privados y sus familiares claman por el mantenimiento de los drenajes y por el suministro de agua potable. Amenazan con iniciar una huelga de hambre de continuar las condiciones deplorables en el interior de los calabozos.

Van cuatro fallecidos por consumir guarapita en Anzoátegui
María Alejandra Lunar / El Vistazo

TRAS INGERIR UNA BEBIDA ARTESANAL elaborada por unos jóvenes en una fiesta de 15 años en el sector Picas del Neverí en Barcelona, cuatro personas fallecieron y otras 14 se debaten entre la vida y la muerte.

Este trágico hecho se registró en horas de la tarde de viernes 11 de enero en una reunión familiar en la zona rural del municipio Simón Bolívar.

Unas 20 personas tomaron la bebida alcohólica y al día siguiente comenzaron a sentir fuertes dolores abdominales y a vomitar. 17 fueron ingresados a la emergencia del hospital Luis Razetti de la capital anzoatiguenses, sitio en el que murieron dos mujeres y dos hombres, por presunta intoxicación.

Las víctimas mortales de la “guarapita” quedaron identificadas como Grecia Josefina Yaguarán de 70 años y su hija Grecia Elizabeth Yaguarán de 40 años. La septuagenaria pereció a las 5:30 de la tarde del sábado 12 de enero y su descendiente hora y media después.

Al día siguiente fallecieron el vigilante Luis García de 45 años y un hombre de 40 años conocido como José. Este último se encontraba en situación de calle y ayudaba a García en sus labores cuidando un galpónen la Pica del Neverí.

Otros intoxicados: Ricardo Antonio Fernández (38), José Luis Carvajal (46), Celis Cruz Yaguarán (45), Luis Marcano Fuenmayor (42), Jesús Rafael Plaza (63), Enderson Carvajal Alcalá (25), Ana Guaricana Córdova (39), Julián Darío Yaguarán (67), Maikel Fernández Pastrana (18), Wendy Sayago Yaguarán (26), Luicelis Carolina Yaguaran  (23), Henry Guacara (18), Carlos Alberto Fernández (44) y un adolecente de 16 años.

Detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) se presentaron en el hospital e iniciaron las averiguaciones pertinentes para determinar que líquidos fueron utilizados por los jóvenes para elaborar la “guarapita” que afectó a tantas personas en la fiesta.

Una fuente extraoficial indicó que sospechan que mezclaron ron con alcohol absoluto o soda caústica. Los cuatro cadáveres fueron remitidos a la morgue  del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf), ubicado en la urbanización Tronconal III de Barcelona.

 

Fiscalía imputará a dos hombres por asesinato de joven manifestante en Barcelona

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Isael Jesús Macadán Aquino, de 18 años de edad, recibió un impacto de bala en la cabeza la madrugada de este miércoles, 28 de junio, mientras participaba en una protesta que devino en saqueo. El hecho ocurrió en el sector Boyacá IV, de Barcelona, capital del estado Anzoátegui.

Arelis Monagas, residente de la zona, contó a El Pitazo que Macadán tenía pocos minutos de haber llegado a la manifestación que se registraba en las adyacencias del Centro Comercial Peñón del Faro, en Lechería. “Él protestaba con los chamos de la resistencia, pero como fueron reprimidos ayer (martes) se regresó a su casa, ubicada en Boyacá V, y al ver que en el sector también protestaban se quedó a apoyar”, sostuvo.

Título de caja

Aseguró que los manifestantes opositores eran dispersados con gases lacrimógenos en la avenida principal de dicha zona, cuando unas 20 personas comenzaron a saquear el comercio El Empanadón y una panadería vecina.

Los habitantes del sector auxiliaron al joven y lo trasladaron al hospital Domingo Guzmán Lander de Barcelona, donde falleció en horas de la madrugada de este miércoles.

El Ministerio Público anunció la noche de este miércoles que imputará en las próximas horas a Rafael José Ramírez y Tomás Julio Martínez por su presunta responsabilidad en la muerte de Macadán. El fiscal 20º auxiliar de la referida jurisdicción, Luis Gonzalo Galindo, quedó a cargo del caso.

La Fiscalía determinó la presunta responsabilidad de ambos hombres por lo que fueron detenidos el mismo día por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas. Esta institución había asegurado a periodistas de la entidad que los culpables eran comerciantes de los negocios atacados.