El Mundo. Periodistas en Latinoamérica: riesgo y lucha contra el poder
El Mundo. Periodistas en Latinoamérica: riesgo y lucha contra el poder

La libertad de expresión y de prensa en Latinoamérica está en riesgo

 

La libertad de expresión y de prensa en Latinoamérica en innumerables ocasiones resulta deficitaria. Durante este último año, además, ha sufrido un importante deterioro debido al incremento de la censura y a los ataques que reciben los profesionales.

Hechos que continuamente son denunciados por la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), y en los que ha hecho hincapié durante su última asamblea general, celebrada el pasado mes de octubre en Santiago de Chile.

Cuando se habla de la falta de libertad de prensa en América siempre se piensa en la censura que se establece en Cuba. Sin embargo muchos son los sucesos que demuestran que, en mayor o menor medida, la independencia de los medios se ve coartada en casi todos los países del continente.

Ecuador

En el mes de junio de 2013, el Gobierno de Ecuador aprobó la Ley de Comunicación, una medida muy polémica que se había retrasado durante tres años.

A raíz de esta nueva legislación, se creó el Consejo de Regulación y Desarrollo de la Información y Comunicación (Cordicom) y la Superintendencia de la Información y Comunicación (Supercom), entes que monitorean diariamente televisiones, radios y periódicos.

Caricatura sancionada del dibujante ‘Bonil’, publicada en el diario ‘El Universo’.

Desde su establecimiento y hasta el 31 de agosto de 2014, la organización Fundamedios -encargada de proteger los derechos y libertades de la prensa y el periodismo independiente y de calidad- ya ha registrado 125 procesos en la Supercom.

Según sus datos, 25 medios y un caricaturista han sido sancionados. Entre ellos cuatro medios impresos han sido cerrados, otros cuatro han sido denunciados por no cubrir en profundidad la visita del presidente Rafael Correa a Chile y siete han recibido multas económicas. Además, medios como el canal Cayambe Visión o el diario Extra acumulan más de una pena con siete y tres sanciones respectivamente.

Ese férreo control por parte de las altas esferas también lo ha sufrido el diario Hoy. El 30 de junio fue el primer día en 32 años que no circuló su edición impresa. En ese momento, Jaime Mantilla, su director, dijo que le era imposible continuar «por el boicot comercial ocurrido cuando la Secretaría de Comunicación (Secom) pidió a las empresas públicas que se inhibieran de publicitar en el diario». Días más tarde la empresa fue intervenida y Mantilla relevado.

Y la vigilancia no se limita a los medios tradicionales. Como recoge la SIP en uno de sus informes, los días 24 y 29 de septiembre Facebook y Youtube dieron de baja el video ‘Lo que Correa no quiere que veas’. La grabación, que recogía imágenes de las protestas callejeras de septiembre en Quito, fue retirada a petición de la empresa Ares Rights argumentando razones de derecho de autor a pedido de la Secretaría de Comunicación y el canal público Ecuador TV.

Venezuela

La situación en Venezuela no difiere mucho de la de Ecuador. El Gobierno de Nicolás Maduro decretó en mayo de 2013 la creación delComplejo Editorial Alfredo Maneiro (CEAM). Esta sociedad dependiente del gobierno tiene por objeto «la producción, distribución y comercialización de diversos productos impresos destinados a la información (…) así como la fabricación, comercialización, importación, exportación, modificación y restauración de insumos, partes, piezas y equipos de impresión y reproducción».

Portada del diario Tal Cual cuando solo tenía papel para seis días.E.M.

Las funciones del CEAM son determinantes ya que es el único órgano encargado de procesar las importaciones de papel en el país y revenderlas después a los diferentes medios impresos. Un monopolio estatal que ha recibido innumerables críticas.

Ejemplo de ello es la denuncia realizada por el secretario del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa, Marco Ruiz, que hace tan solo unas semanas señaló que se trata de una forma de «institucionalizar el control del estado sobre la prensa». Y es que son numerosos los ejemplos de medios independientes que han tenido que dejar de circular o reducir considerablemente el número de sus páginas a causa de esta medida.

En los últimos doce meses han desaparecido el Diario de Sucre,Antorcha, El Expreso, El Guayanés, Revista M o Primera Hora. Asimismo, algunos medios -como la Revista Etcétera o Versión final– se han visto obligados a suspender temporalmente sus publicaciones, otros -como el periódico Tal Cual– han estado próximos a ello, y muchos –Notidiario, El Siglo o La Nación– han tenido que mermar su grosor.

Del mismo modo, habría que señalar el control estatal de diferentes medios de comunicación así como las continuas amenazas verbales que el presidente Nicolás Maduro realiza hacia los profesionales de la información advirtiéndoles con iniciar acciones legales contra ellos por promover campañas de «terrorismo psicológico» o «desinformación».

Todo ello sin olvidar el clima de inseguridad que sufren los periodistas al estar continuamente sometidos a presiones, detenciones e incluso agresiones y secuestros.

 

México

El mayor problema de México precisamente es el de la inseguridad. Hace apenas unos días salía a la luz un vídeo que mostraba cómo un grupo de policías amenazaba con armas a varios periodistas cuando estos se dirigían a grabar una fosa con restos óseos encontrada en el estado de Guerrero. Un hecho para nada puntual.

En septiembre, por ejemplo, la periodista Karla Silva de El Heraldo fue agredida por tres hombres armados en las oficinas de su propio medio mientras la advertían sobre sus notas críticas hacia el gobierno local.

Y no siempre la intimidación se limita a amenazas o golpes. Durante este año dos profesionales han sido asesinados en México a causa de sus publicaciones. El pasado agosto un grupo armado disparó al periodista Octavio Rojas mientras cubría un tema relacionado con el crimen organizado. Por su parte, la ciberactivista Mª del Rosario Fuentes Rubio fue secuestrada hace unas semanas y, posteriormente, en su Twitter apareció publicada una imagen suya, ya sin vida, junto a varias advertencias.

 

Bolivia

La censura en la prensa boliviana se ha podido comprobar durante la última campaña electoral. El Tribunal Supremo Electoral solo ha permitido a los medios de comunicación difundir propaganda de los candidatos a los comicios 30 días antes del día de las votaciones.

Un boliviano durante un acto de campaña de Evo Morales E.M.

Según el Régimen Electoral vigente en el país, los candidatos puedenaparecer en actos desde tres meses antes de las elecciones. Por lo que los medios no han podido hacerse eco de parte de estas acciones. Sin embargo, el presidente Evo Morales ha sido criticado por combinar su campaña electoral con las actividades oficiales, que normalmente son transmitidas por los medios estatales.

Asimismo, diferentes medios han hecho público su disgusto ante la obligación de registrarse ante el Órgano Electoral Plurinacional para ser habilitados legalmente y así poder difundir propaganda electoral como encuestas y estudios de opinión. La Asociación Nacional de la Prensa de Bolivia (ANP) que agrupa a los principales medios impresos, ha llegado a calificar esta medida de «censura previa», como recoge la SIP.

Por su parte, la organización independiente ‘Comité para la Protección de los Periodistas’ ha afirmado que Bolivia Tv «lejos de funcionar como un canal público, se ha convertido en un instrumento de propaganda sumamente parcializado a favor del gobierno de Morales». Y lo ha manifestado después de que Bolivia Tv decidiera no retransmitir el único debate público realizado durante la campaña electoral. Encuentro, celebrado el 28 de septiembre, al que no asistió el reelegido mandatario Evo Morales.

El deterioro de la libertad de prensa se extiende

La limitación del derecho a la libertad de prensa se extiende por más naciones. En Brasil, varios medios han sido acusados de «terrorismo electoral» por la presidenta Dilma Rousseff. Ha sucedido durante la campaña electoral tras publicar vínculos de miembros del Partido de los Trabajadores -entre ellos la propia mandataria- con una trama de desvíos de fondos de la petrolera estatal Petrobras. Además, algunos medios, como la revista Isto, han sido retirados de circulación durante un tiempo a causa de sus publicaciones.

Mientras, en Argentina , el grupo Clarín ha denunciado desigualdad en la aplicación de la Ley de medios audiovisuales cuando el gobierno ha rechazado su propuesta voluntaria de adecuación «mientras demora las propuestas de otras empresas».

Por otra parte, en países como Haití, Chile y Colombia existen leyes por las cuales el Gobierno puede interferir tanto en contenidos como en criterios electorales.

Además, a los dos periodistas asesinados en México, habría que añadir otros tres en Honduras, tres en Paraguay, uno en Colombia, otro en El Salvador, y un último en Perú.