El informe García, encargado por la FIFA tras la sucesión de acusaciones de corrupción, permitió al organismo sentenciar que no había nada grave y que no tenía sentido reabrir el proceso de atribución de sedes, confirmando a rusos y cataríes, los países elegidos en diciembre de 2010.

«Rusia llevó a cabo una campaña honrada (…) Así que sin sorpresa» por las conclusiones de la FIFA, declaró el ministro de Deportes ruso, Vitali Mutko.

El director del Comité de Organización ruso del Mundial-2018, Alexei Sorokin, se manifestó en términos similares.

«Estamos convencidos de que nuestro dosier era transparente. No cometimos ninguna violación», reaccionó por su parte el director del Comité de Organización ruso del Mundial-2018, Alexei Sorokin.

«Siempre estuvimos seguros de que no encontrarían nada ilegal» en la forma de actuar de Rusia en el proceso de elección, subrayó en una conferencia de prensa en Moscú.

En Catar, también se insistió en que estaban «seguros» de la limpieza de su proceso de elección.

«Estábamos seguros de que cualquier investigación neutra iba a mostrar que nuestro dosier era sólido y que no está manchado por ninguna irregularidad», declaró a la AFP Hassan Thawadi, presidente del Comité de Organización del Mundial de Catar-2022.

«Teníamos confianza en nosotros mismos y en el trabajo que habíamos hecho», insistió.

La conclusión positiva sobre Catar-2022 también fue bien recibida por la Confederación Asiática de Fútbol (AFC).

«Es un momento importante para Asia y estamos ante una oportunidad maravillosa para hacer historia», afirmó el bahreiní Sheikh Salman Bin Ibrahim Al Khalifa, presidente de la AFC, en un comunicado.

«Existen algunos problemas por resolver, entre ellos el calendario del Mundial, pero nos comprometemos a hacerlo. Me gustaría hacer un llamamiento a todos los países asiáticos para que continúen apoyando a Catar como lo han hecho desde que obtuvieron la organización» del Mundial, añadió.