¿Qué es una estafa nigeriana? Microsoft revela estudio sobre la “Estafa Nigeriana”
El también denominado “timo nigeriano”, conocido en círculos informáticos y policiales como 419, consiste típicamente en que un sujeto, generalmente nigeriano, pide un pequeño favor, que ofrece recompensar con varios millones de dólares. Este concepto básico tiene decenas de variantes, que van desde una acongojada viuda que necesita transferir una fabulosa herencia, a un funcionario bancario corrupto que ofrece donar decenas de millones (de dólares, euros o libras esterlinas) depositados en una cuenta abandonada luego del fallecimiento de su titular. Curiosamente, el fallecido magnate tenía el mismo apellido del destinatario del correo electrónico. “Usted podría reclamar los fondos, pretendiendo ser el familiar más cercano del fallecido”, escribe el supuesto funcionario, que apelando a la codicia inicia un proceso mediante el cual la víctima comenzará a hacer pequeños envíos de dinero “para cubrir gastos administrativos y legales”, para poder liberar el botín.
La mayoría de quienes reciben tales cartas las borran sin mayor trámite, quizás preguntándose “¿Hay quien crea estas cosas?”. Aunque parezca ilógico que las cartas sean tan absurdas, hay una razón real, fríamente calculada por los estafadores.
Al menos, tal es la conclusión de un nuevo informe de investigación elaborado por Comac Herley, experto adscrito al departamento de investigación de Microsoft.
“Buscan a los más cándidos”
Según el informe, los estafadores no intentan entrar en contacto con los usuarios con más sentido común, que por su sentido de lógica, o experiencia en el uso de Internet, pueden reconocer tales intentos de estafa.
Comac Herley indica que aunque este tipo de correo electrónico es ignorado por la mayoría, lo cierto es que hay usuarios menos preparados o más cándidos, que dan crédito a lo que leen. Las estafas están dirigidas precisamente a ellos.
No es gratis estafar
A pesar de ser gratuito para los estafadores enviar spam masivo, el proceso en sí requiere una inversión de tiempo y dinero. El experto explica que los estafadores deben, por lo general, sostener un laborioso diálogo por correo electrónico antes de comenzar a recibir dinero de la víctima.
Esto resulta, en consecuencia, que para los estafadores tiene un costo real, o pérdida, cuando las potenciales víctimas abandonan el proyecto a medio camino. Por ello, consideran importante descartar desde el comienzo a los usuarios más escépticos, y concentrarse en aquellos de buena fe.
Así, los estafadores suelen informar, desde el primer e-mail, que son nigerianos, lo que por lógica facilitaría identificarles como potenciales autores de un “timo nigeriano”. El tema es abordado en detalle por Comac Herley en su informe de 14 páginas que lleva el título “Why do Nigerian Scammers Say They are from Nigeria?” (o ¿Por qué los estafadores nigerianos dicen ser de Nigeria?).