Lo que les falta a los Yankees por Alejandro Betancourt
Nadie en el mundo del beisbol puede negar que los Yankees de Nueva York son, todos los años, candidatos a aspirar por lo más grande. A pesar de que el campeonato número 28 se les ha hecho esquivo en las dos últimas temporadas, los mulos siempre pretenden poner a producir cada uno de los dólares invertidos en la nómina más cara de la pelota mayor. Y este año vienen con muy buen ritmo.
Tanto en el picheo como en la ofensiva, el equipo ha demostrado tener lo necesario para pensar en grande esta temporada. Poseen hoy el mejor porcentaje de victorias en la Liga Americana (únicamente superado por los Dodgers en todas las mayores) con .619, lo que representa una franca recuperación luego de haber estado por espacio de casi un mes más cerca del sótano de la División que de su cima.
Los lanzadores han respondido bien ante los retos a pesar de las muchas dudas que se cernían sobre la rotación luego de que la firma más importante de la pretemporada, Michael Pineda, se lesionara y quedara fuera por el resto de la temporada; y que posteriormente una de sus piezas claves, el cerrador panameño Mariano Rivera, sufriera destino similar a su compañero.
Y es que el bullpen neoyorquino acumula porcentaje de carreras limpias de 2.63, el tercer mejor record de las mayores y segundo en la Liga Americana. La pérdida de Mariano Rivera ha sido bien contenida por la combinación de Rafael Soriano (13 salvados en 14 oportunidades, apenas 1 carrera limpia en las últimas 14 apariciones) y David Robertson, quienes contribuyen a que el equipo tenga marca de 36-2 al ir arriba después de la 8va entrada.
A la ofensiva, son cuartos en el joven circuito en promedio de bateo y carreras impulsadas, pero lideran todo el beisbol profesional en jonrones lo que contribuye a ponerlos de segundos en slugging con .453. Pero es esa jonrón-dependencia la que hoy cubre la mayor deficiencia de los Yankees: el bateo oportuno.
El equipo tiene el peor promedio de bateo de toda la Liga Americana con corredores en posición anotadora (122-558, .219) y el segundo peor con las bases llenas (.183). Esto les ha pasado factura en recurrentes ocasiones haciéndoles llevar record negativo cuando anotan 3 o menos carreras y haber perdido 6 juegos en lo que va de temporada por la mínima diferencia.
Paradójicamente son los mejores bateando con las bases limpias lo cual habla de lo crítico que resulta entonces para el equipo que el poder de sus bateadores responda con cuadrangulares. Esta temporada apenas tienen 1 victoria en partidos donde no la sacan del parque, contra 12 derrotas en situación similar. Pero cuando logran vuelacercas son realmente implacables (39-13).
Sin embargo, la dependencia de los jonrones los hace más vulnerables a los slumps ofensivos en los que se han visto varios de sus jugadores esta temporada, el más destacado siendo el receptor Russel Martin. De no corregir esta tendencia y enfocarse en producir carreras cuando hay hombres en amenaza de anotar, ganar se vuelve una lotería y descansa únicamente en los chances de conseguirse con una bola franca para mandarla a las gradas.
Seguimos de cerca esta y muchas más estadísticas para Ustedes. Con el juego de las Estrellas a la vuelta de la esquina casi despedimos la primera mitad de la temporada. Los invitamos a continuar en contacto con nosotros via Twitter a través de @Baseballnotes. Saludos y será hasta la próxima.