Los trabajadores gremiales piden a distintas instituciones como la Asamblea Nacional, Cámaras Industriales, entre otras; fijar posición sobre las denuncias
Trabajadores gremiales del Colegio de Ingenieros de Venezuela (CIV) apoyaron la denuncia presentada por trabajadores de la industria del aluminio, sobre el desmantelamiento de 360 celdas destinadas a la producción de aluminio.
A través de una nota de prensa difundida a los medios, la Sociedad Venezolana de Ingenieros de Minas y Metalúrgicos (Svimm), señaló que, tras desmantelarse las celdas, se vendieron como chatarra y las mismas tienen un valor de «varios miles de millones de dólares americanos».
Destacaron además que esta acción que denuncian se hizo «sin que se conozca proyecto alguno para sustituir dichas celdas donde se produce el aluminio».
«Tampoco se ha realizado bajo ninguna ‘licitación pública’, ni ha sido designada ninguna comisión de licitación como lo ordena la ley. Por lo tanto, se trataría de un desfalco a la nación», alertaron en el comunicado.
En tal sentido, y en su condición de ingenieros metalúrgicos, hicieron varias advertencias al país:
«Para producir aluminio, la materia prima fundamental e indispensable es la electricidad, porque el otro elemento o insumo es la bauxita que puede transportarse de cualquier parte del mundo, como lo hacíamos de Jamaica y Australia, antes de la entrada en operación de Bauxiven».
«Es conocido por el país entero las serias deficiencias eléctricas que padecemos los venezolanos, quienes sufrimos de cortes eléctricos en todo el territorio nacional, por lo tanto, emprender la recuperación de la producción de aluminio, sin concluir las etapas del desarrollo hidroeléctrico de Rio Caroní, como lo es Tocoma (Odebretch) y poner al día el sistema interconectado nacional es, por decir lo menos, un exabrupto susceptible de dejar a oscuras al territorio nacional».
«Tal cual lo hemos venido informando públicamente en los últimos años, para salir de la crisis social, económica, política y moral en la que se encuentra la nación a través del rescate de la institucionalidad democrática es impostergable un cambio político y los consecuentes planes integrales sectoriales».
Tras los planteamientos anteriores, los trabajadores gremiales de la CIV solicitan a instituciones como la Asamblea Nacional, la Academia de Ingeniería y el Hábitat, Fedecámaras, Cámaras Industriales, entre otras, fijar posición al respecto.
