Los turistas que vuelan a Canaima tras una larga cuarentena por el COVID-19 se encontrarán con magníficas cascadas e imponentes tepuyes, pero también con un pestilente servicio público deteriorado. La reactivación de los vuelos a partir del 26 de diciembre de 2020 hacia uno de los principales destinos turísticos de Venezuela no ha reparado el colapso de las aguas servidas que afectan a la comunidad y espantan al turismo.
No se trata de un problema nuevo. El 9 de diciembre de 2020, una semana antes del anuncio de la reapertura de los vuelos al parque nacional, la Asociación de Operadores Turísticos de Canaima envió una carta al Instituto Nacional de Parques (Inparques), adscrito al Ministerio de Ecosocialismo, solicitando dos bombas de achique sumergibles para solventar esta emergencia sanitaria. También, el 18 de diciembre, se celebró una reunión entre los operadores de turismo, capitanes de las comunidades indígenas del sector II de Canaima y representantes de Venetur. Allí se discutieron algunas soluciones a un problema producido por el desperfecto de la planta de tratamiento de aguas residuales en el primer y único Patrimonio Natural de la Humanidad de la Unesco que hay en Venezuela.
El alivio de la reapertura
“El movimiento turístico ha sido un alivio temporal para la grave crisis que estamos viviendo en Canaima. Pero hay situaciones que se deben afrontar de forma inmediata, como el olor nauseabundo que causa el desbordamiento de aguas negras. Lo sientes apenas aterrizas en el aeropuerto, no te deja estar mucho tiempo allí. Las aguas servidas están siendo vertidas en la Laguna de Canaima. Si no nos mata el COVID-19, nos matará la contaminación”, comenta a Runrun.es Gregorio Rivas, propietario del campamento Morichal y presidente de la Asociación de Operadores Turísticos de Canaima.
Este 26 de diciembre el Consorcio Venezolano de Industria Aeronáutica y Servicios Aéreos (Conviasa) reactivó el vuelo comercial hacia el Parque Nacional Canaima. A través de un Embraer 190 se reinició esta importante ruta desde el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar de Maiquetía (La Guaira).
La reapertura de la actividad turística en Canaima en medio de la pandemia fue anunciada a la comunidad por el capitán general del sector II Kamarata-Kanaimö, Domingo Castro. En el comunicado del 1 de diciembre aseguró «estar preparados para la reapertura de la actividad turística en el Sector Occidental del Parque Nacional Canaima, específicamente los destinos turísticos Laguna de Kanaimö, Salto Ángel, Kavac y Uruyen”. Agregó que se habían cumplido “las condiciones mínimas de bioseguridad, como dotación de medicamentos al centro ambulatorio, pruebas rápidas y tratamientos del COVID-19 y adaptación del terminal aéreo”. La carta de la autoridad indígena no menciona el problema sanitario del desbordamiento de aguas servidas.
