El portavoz del Programa Mundial de Alimentos, Herve Verhoosel, indicó que el organismo está dispuesto a ayudar si el Gobierno venezolano lo solicita
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas advirtió este viernes, 18 de enero, del alto riesgo de malnutrición que sufren los tres millones de venezolanos que emigraron como consecuencia de la crisis económica y política que atraviesa el país.
«Estos migrantes sufren alto riesgo de inseguridad alimentaria, con sólo un 1,7 % de las mujeres teniendo acceso a suplementos», destacó en rueda de prensa en Ginebra el portavoz del PMA Herve Verhoosel.
El portavoz confirmó que, por ahora, el gobierno de Venezuela no ha solicitado la ayuda del PMA, por lo que no puede asistir al país si este no lo autoriza.
Verhoosel aseguró que los principales programas de ayuda se centran en Colombia y Ecuador, y que la ayuda se dirige principalmente “a mujeres y niños en situación de vulnerabilidad, con falta de acceso a los servicios básicos y que no saben dónde van a poder obtener su siguiente comida”.
En noviembre de 2018, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR); la Agencia de la ONU para los Refugiados y la Organización Internacional para las Migraciones, anunciaron que la cifra de personas refugiadas y migrantes de Venezuela en todo el mundo había alcanzado los tres millones.
El informe de alerta temprana sobre seguridad alimentaria y agricultura de la FAO de abril-junio de 2018, destacó que Venezuela fue uno de los 8 países del mundo de alto riesgo por la gravedad y magnitud de los impactos económicos y políticos sobre el empeoramiento de la inseguridad alimentaria y de una crisis migratoria
Según los datos de las autoridades nacionales de migración y otras fuentes, los países de América Latina y el Caribe albergan a aproximadamente 2,4 millones de personas refugiadas y migrantes de Venezuela, mientras que otras regiones recibieron a los restantes 600.000.
Colombia tiene el mayor número de refugiados y migrantes de Venezuela, con más de un millón de personas. Le siguen Perú, con más de medio millón, y Ecuador, con más de 220.000. Asimismo, Argentina acoge a 130.000, Chile a más de 100.000, y Brasil a 85.000 personas venezolanas. Además de Suramérica, los países de América Central y el Caribe también registraron un aumento en el número de llegadas de refugiados y emigrantes venezolanos, como es el caso de Panamá, con 94.000.