Blyde: “La Sala Constitucional usurpó funciones de la Asamblea Nacional”
Asociación de Alcades rechazó la interpretación de la ley que hizo el TSJ, recalcó que las policías municipales no pueden controlar manifestaciones pacíficas. Llevarán el caso a la Unasur
La Asociación de Alcaldes, encabezada por Gerardo Blyde, mandatario del municipio Baruta, rechazó la interpretación que hizo la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia ayer de la Ley de Partidos Políticos, Reuniones Públicas y Manifestaciones, en la que establecen que las manifestaciones pacíficas deben ser autorizadas por las autoridades y no simplemente notificadas.
“La Sala Constitucional modificó la ley al agregar la palabra autorizar”, dijo Blyde. Añadió que los Alcaldes solo deben mediar cuando hay varias manifestaciones que coincidan en lugar y hora y que puedan alterar el orden público.
También advirtió que esta sentencia no habla en ningún caso de actos espontáneos y que busca criminalizar la protesta al decir que las autoridades municipales, en caso de no haber autorizado la manifestación y que esta se lleve a cabo, deben ir al Ministerio Público y señalar a quienes han incumplido.
“Cuando se interpreta atendiendo a un factor político coyuntural, como el que vivimos estos días, se deforma el estado de derecho”, insistió el abogado constitucionalista. El alcalde cree que esta es una forma de dar un “piso jurídico bien endeble” a aquellas autoridades del oficialismo que no quieren permitir protestas en sus espacios. ´
Indicó que las policías municipales no están dotadas de los equipos ni el entrenamiento adecuado para controlar o dispersar protestas, puesto que portan armas letales. “En sus palabras, la sentencia es ‘improponible’ (sic) ¿Cómo vamos a dispersar con armas de fuego?”.
Acompañado de David Smolansky, alcalde de El Hatillo, y de Carlos Ocariz, alcalde de Sucre, Blyde anunció que la Asociación de Alcaldes pedirá una reunión a los embajadores de Unasur para explicar cómo se está violando el derecho de los ciudadanos a manifestar de forma pacífica, así como con el Nuncio Apostólico y los cancilleres de Colombia y Brasil que están presentes en las reuniones de diálogo entre Gobierno y oposición.