Las facturas pendientes que tiene el sector industrial venezolano con los proveedores internacionales no se han terminado de cancelar y ya se acumula una nueva deuda. De los dólares asignados desde mayo por el Sistema Complementario de Adquisición de Divisas, Sicad I, solo se ha liquidado 50% del monto total, la otra mitad sigue sin ser cancelada, afirma Carlos Larrazábal, vicepresidente de Fedecámaras.
El directivo refiere que aunque el Centro Nacional de Comercio Exterior ha estado cumpliendo con la promesa de pagar 30% de la deuda vieja –que ascendía a 10 millardos de dólares–, el retraso del Sicad I con las importaciones de este año vuelve a poner en tensión el despacho de productos desde el exterior.
“Los proveedores mandaron mercancía porque se les pagó la mitad del dinero y porque la otra parte se iba a cancelar después de la nacionalización, pero no ha sido así y ya empezaron a reclamar el resto. Eso puede llevar a que se vuelvan a cerrar las líneas de créditos”, advierte.
Como una cadena, los retrasos en las liquidaciones de divisas han afectado la productividad de las empresas y con ello el abastecimiento. Del total de la capacidad instalada de la industria nacional apenas está operativa 48%, agrega Larrazábal. Aunque destaca que la situación varía dependiendo del sector que se evalúe.
Agrega que el nivel de inventario está en estado crítico y la situación se verá trastocada por las vacaciones colectivas que comienzan en algunas empresas esta semana y en otras el viernes 19, lo que hará que estén inoperativas hasta finales de enero.
“A diferencia de años anteriores, los canales comerciales no están recibiendo mercancía más allá de lo que se rota constantemente porque de lo contrario los acusan de acaparar. Estos meses que va a haber vacaciones se afectará aún más el abastecimiento”, detalla.
Afirma que las reuniones entre el Ejecutivo y el sector privado se siguen dando y pese a que se continúa planteando los problemas de las empresas no se termina de tomar una decisión de fondo que permita restablecer los inventarios.
Caída no prevista. La inesperada disminución en el precio del petróleo de la cesta venezolana va a complicar mucho más el pago de la deuda que tiene el Ejecutivo con la industria nacional, asevera Henkel García, director de la firma Econométrica.
La extracción del crudo provee a la nación de 96% de los ingresos en divisas y por cada dólar anual que pierde la cotización, el país deja de percibir una cifra que oscila entre 500 y 700 millones de dólares. Con menos disponibilidad de divisas hay menos dinero para importar.
“Ya existía el problema de la escasez de dólares para pagar liquidaciones pendientes, con este nuevo precio no hay indicios que permitan pensar que la situación mejorará”, sostiene García.
Reitera que entre las medidas que el Ejecutivo debe tomar está el desmontaje del control de cambio que rige en el país, en el que se adjudican divisas a tres tasas oficiales distintas, eso sin sumar el dólar paralelo que aumenta a ritmos vertiginosos.
“Hasta que la deuda no sea reducida de manera significativa la gran mayoría de las empresas no va a reponer inventario. No basta el compromiso de pago, tiene que haber una cancelación efectiva para que se empiecen a reponer los inventarios”, agrega.
SECTORES
QUÍMICO
Menos pintura para casas
El primer semestre de este año hubo una fuerte disminución en la producción de las empresas del sector químico impulsada por la paralización en agosto de 2013 del pago de la deuda que tiene Cencoex con los proveedores, indica Juan Pablo Olalquiaga, presidente de la Asociación Venezolana de la Industria Química y Petroquímica.
Entre los productos afectados está la pintura blanca que se usa en el ámbito arquitectónico. A la empresa que suministra el dióxido de titanio, que da la coloración blanca a la pintura, no se le ha cancelado totalmente la deuda. “Esa partida arancelaria salió en Sicad I, pero los proveedores pidieron que primero se les pagara lo adeudado”, agrega.
Sin embargo, en el segundo semestre la situación mejoró porque se retomó la cancelación de la deuda. Se aprobaron las ALD y se incluyó a empresas del sector en las subastas del Sicad I.
Cifras de la industria, disponibles hasta septiembre, reportan que este año el Cencoex ha adjudicado al sector 590 millones de dólares, de los cuales 420 millones fueron para cancelar la deuda de diciembre de 2013 para atrás. Y solo 170 millones de dólares fueron para importaciones de este año.
Olalquiaga añade que el monto destinado a deuda representa solo la mitad del compromiso total y asevera que la demanda de las empresas afiliadas es de 1,4 millardos de dólares.
ENVASES
Fallas en un sector afectan a los demás
La industria de envases reportó este año que el Centro Nacional de Comercio Exterior acumuló una deuda de más de 200 millones de dólares. Pero las facturas se han ido liquidando con el transcurso de los meses y en la actualidad casi no quedan facturas pendientes, afirma José Manuel González, presidente de la Cámara Venezolana de Envases.
El directivo considera favorable la liquidación. Sin embargo, advierte que lastimosamente el sector no trabaja de manera aislada y los problemas que han tenido Sidor y Pequiven para operar han afectado a los fabricantes de envases de aluminio y plástico. “Son dos sectores que no eran importadores tradicionales y que ahora han tenido que hacerlo porque no consiguen oferta nacional”, manifiesta.
Agrega que en la cámara hay empresas afiliadas que están sometidas a regímenes legales de importación y que han visto retrasos en la asignación de los permisos para traer materia prima, lo que ha dificultado su operatividad porque no se ajustan al ritmo de trabajo de las empresas.
Además, refiere que en el nuevo Plan Nacional de Divisas 2015 creado por Cencoex hay historiales de importaciones que están muy por debajo de la realidad de transacciones que hacen las empresas, lo que ha complicado que se realice el trámite pensado para mejorar las liquidaciones del año que viene.
CALZADO
Zapatos para seis meses
La industria del calzado se encuentra entre los sectores beneficiados con el otorgamiento de divisas para cancelar las deudas pendientes y realizar importaciones este año.
Luigi Pisella, presidente de la Cámara de la Industria del Calzado, asegura que la deuda que mantenía el Ejecutivo con las empresas afiliadas, que rondaba 20 millones de dólares, se ha ido cancelando progresivamente y el monto que resta es muy poco. “Nos han liquidado casi todo, falta muy poco, pero es normal porque se tarda entre 30 y 60 días”, precisa.
Recuerda que las empresas del sector fueron convocadas a dos de las últimas subastas del Sistema Complementario de Adquisición de Divisas y afirma que la asignación de los dólares para materia prima y productos terminados permitirá que haya inventario para los primeros seis meses de 2015.
La mercancía que llegó al país luego de las subastas y que ya fue distribuida en los comercios ha generado largas colas de consumidores atraídos por los precios de los productos.
La cadena de zapaterías Prime Shoes estuvo entre los comercios que recibieron zapatos importados con dólares preferenciales. Un papel pegado en uno de los negocios en el centro comercial Sambil, en Caracas, en el que indicaba que había mercancía importada con Sicad I, hacía que las personas dejaran que les anotaran números para comprar calzado deportivo desde 700 bolívares.
FARMACIAS
El acetaminofén descubrió el poco inventario
El brote de enfermedades como el dengue y la fiebre chikungunya impulsaron la demanda de acetaminofén este año y descubrieron la ausencia de inventario del medicamento. Las quejas en el sector farmacéutico por la escasez se exacerbaron y representantes de la industria afirman que el problema de fondo siguió siendo el mismo: los retrasos en la entrega de dólares dificultan la producción. Aunque el gobierno atribuyó parte del problema al contrabando de extracción.
La deuda del Cencoex con los proveedores internacionales de insumos para la elaboración de fármacos, que rondaba los 4 millardos de dólares, se ha disminuido, pero aún se mantiene en 3 millardos de dólares, afirma un representante de la industria que prefirió no ser identificado.
Detalla que entre octubre de 2013 y marzo de este año comenzó la crisis en la liquidación pendiente y en la aprobación de solicitudes para importaciones nuevas, pero destaca que desde octubre las empresas han empezado a ver un pago más consecuente.
La fuente reitera, sin embargo, que los mecanismos de administración de divisas siguen siendo muy irregulares y no permiten que se solucione el problema de la escasez. Además, alerta que entre que se aprueba el dinero y se liquida transcurre mucho tiempo, lo que pone en riesgo la salud de quienes necesitan los medicamentos.