Sectores vinculados a la salud tienen trabas para conseguir divisas, lo que afecta sus operaciones
Atender la salud es casi un lujo en el país. De acuerdo con los datos del Banco Central de Venezuela (BCV), en los últimos 12 meses estos servicios subieron 38,7% en un año.
Los números oficiales que publicó el pasado jueves el ente emisor indican que la categoría de servicios hospitalarios -incluida dentro de salud- sufrió una inflación de 45%.
En el caso de los servicios médicos y paramédicos, el salto fue mayor, pues de mayo de 2013 al mismo mes de 2014 experimentaron un incremento de 47,11%. Las medicinas y equipos de terapia también subieron de precio en un año en 23,65%.
Desde hace meses representantes de los sectores empresariales relacionados con la salud, como industria farmacéutica, equipos médicos, odontológicos, clínicas y hospitales, aseguran haber recibido pocas o ninguna aprobación de divisas por parte de las autoridades del Estado, lo que ha afectado sus operaciones, desde las importaciones de insumos y medicinas hasta el estado de aparatos y maquinarias.
La escasez de insumos para la salud ha empujado los precios de los productos. La Asociación de Clínicas y Hospitales ha dicho que la deuda con sus proveedores superaba $4.000 millones hasta abril; mientras que 90% de todos los insumos que utilizan a diario son importados.