La Comisión de la Verdad que se instaló en la Asamblea Nacional y que todavía no tiene una dinámica establecida aspira lograr resultados en un plazo máximo de un año, aunque inicialmente trabajarán en base a seis meses para tener resultados expeditos.
Desde la instancia pedían la incorporación de la bancada opositora, esto sin conocer la decisión de la Unidad de congelar “momentáneamente” el diálogo con el Gobierno.
Ya tienen mesas de trabajo que solo involucran al Partido Socialista Unido de Venezuela, como lo es la subcomisión de Derechos Humanos que será la que reciba denuncias de violaciones en esa materia desde que iniciaron las manifestaciones el pasado 12 de febrero, aunque no descartan recabar pruebas de “terroristas” desde que inició el 2014.
Una fuente oficialista reveló que aun cuando la oposición se retira del diálogo, la Comisión de la Verdad seguirá adelante con su trabajo, pues buscan favorecer a quienes han sido víctimas “del terrorismo”.
El presidente de la AN y de la comisión, Diosdado Cabello, no estuvo encabezando el encuentro. En su lugar Elvis Amoroso señaló que sólo buscan la “transparencia” y que no tienen ningún tipo de temor a que se sepa la verdad. “Aquí se está haciendo todo lo posible para esclarecer esta situación”, aseguró el parlamentario.
Amoroso no dio a conocer si la Comisión se ampliará (no solo con diputados), tal como lo solicitara la MUD para poder hacer una investigación desde diferentes ópticas, lo que sí destacó es que podrían interpelar a funcionarios militares, si hay denuncias de “excesos” por parte de los cuerpos de seguridad del Estado.
Recolección
El trabajo de la subcomisión de Derechos Humanos se alimentará de denuncias fotográficas y videográficas de daños a los organismos públicos, tortura y tratos crueles a estudiantes y otros manifestantes, haciendo énfasis en los 42 asesinatos en manifestaciones. Sin embargo, en la sesión ordinaria de ayer la bancada del PSUV se negó a debatir sobre los tratos crueles y torturas a los estudiantes universitarios. Por otra parte, el Parlamento aprobó la designación de Alí Rodríguez Araque como embajador de Venezuela en Cuba.