Al menos 700 venezolanas se sumaron a la demanda contra de la empresa alemana TÜV Rheinland por haber certificado que las prótesis PIP, rellenas con silicona industrial, eran aptas para el uso humano.

Roberto León Parilli, presidente de Anauco, señaló que hasta el 14 de noviembre hay plazo para que otras venezolanas se sumen al juicio que se sigue en Francia.

“Los tribunales de Francia se han comenzado a pronunciar en procura de indemnizar”, informó. Hasta ahora las demandantes tienen la garantía de que su indemnización será, como mínimo, de 3.400 euros. Sin embargo, se espera que después del veredicto que se emitirá en la audiencia del 11 de diciembre, cada afectada reciba por lo menos 20.000 euros.

Las interesadas en sumarse a la demanda deben enviar un poder suscrito y firmado por la afectada, el carnet otorgado por PIP que certifica que es portadora de las prótesis y una declaración de tenerlas.

Para pedir información o enviar los recaudos se puede escribir a anauco.francia@anauco.net.