Standard & Poor's baja calificación de deuda de Brasil - Runrun

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La nota de Brasil, la mayor economía de América Latina, bajó un escalón desde ‘BBB’ a ‘BBB-‘.

Además, S&P cambió el panorama a estable desde negativo, lo que significa que es improbable que por ahora se produzcan más rebajas de la nota, dando cierto alivio a las autoridades brasileñas y a los mercados financieros.

Aunque el mercado esperaba el recorte, fue sorprendido por el momento en que se conoció la decisión. La rebaja supone además un trago amargo para Rousseff, que buscará la reelección a fin de año.

 El recorte de S&P expone a Rousseff a más acusaciones de que derrochó la buena reputación edificada por Brasil durante el boom económico de la última década.

Brasil ha sufrido por un crecimiento de apenas 2 por ciento en los últimos años.

Rousseff intentó revivir la economía con agresivos recortes de tasas de interés y gastos sociales, pero ha sido criticada por intervenir demasiado y recurrir a opacos mecanismos contables para cumplir sus metas presupuestarias.

«El recorte refleja la combinación de deslizamiento fiscal, la perspectiva de que la ejecución fiscal continuará débil en medio de un bajo crecimiento en los próximos años y una restringida capacidad de ajustar la política antes de las elecciones presidenciales de octubre y cierta debilidad en las cuentas externas de Brasil», dijo la agencia en un comunicado.

S&P dijo que las señales dispares de política del gobierno tenían ‘implicaciones negativas’ para las cuentas fiscales y la credibilidad de la política económica.

El Ministerio de Finanzas brasileño rechazó los argumentos de S&P, y señaló que la rebaja contradice los sólidos fundamentos económicos de Brasil y la saludable posición del país comparada con otras economías.

«La economía brasileña tiene una baja vulnerabilidad externa porque posee la quinta más grande reserva en moneda internacional por volumen entre las naciones del G20», explicó el ministerio en un comunicado.

Credibilidad Debilitada

La agencia dijo que la credibilidad fiscal de Brasil había sido ‘sistemáticamente debilitada’ tras los recortes en la meta presupuestaria y que los préstamos de los bancos estatales habían ‘socavado la credibilidad y transparencia de las políticas’.

S&P dijo, sin embargo, que no habría más sorpresas.

«No esperamos ningún otro cambio en el corto plazo», dijo la analista Lisa Schineller en una teleconferencia.

«Estamos muy cómodos con Brasil en la categoría de grado de inversión». La baja podría llevar a las otras grandes agencias, como Moody’s y Fitch, a seguir los pasos de S&P. Alberto Ramos, jefe de investigación de Goldman Sachs para América Latina, dijo que el recorte refleja la erosión gradual de los fundamentos macroeconómicos de la economía brasileña.

«Lo importante es hasta qué punto el Gobierno reacciona a esa pérdida de credibilidad macro y toma esto como una oportunidad para adoptar políticas más ortodoxas y convencionales para rebalancear la economía y lidiar con los desequilibrios macro», añadió.

Los efectos de corto plazo del recorte no estaban claros, dijeron analistas. Algunos inversionistas podrían vender activos brasileños pues las políticas los obligan a tener valores y bonos de mayor calidad.

Otros, en cambio, podrían enfocarse en el hecho de que S&P difícilmente volverá a bajar la calificación de Brasil en el corto plazo.

«La buena noticia es que ya salió», dijo André Perfeito, economista jefe de Gradual Investimentos. «Esto ahora alarga el horizonte de Brasil, porque en los próximos seis meses a un año no vamos a tener este problema por delante», agregó.

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